Capítulo 43

40.9K 2.1K 380
                                    


Empujo a Hayes hacia atrás separándolo de mi y separando nuestras bocas. Hayes confundido me mira por unos segundos, quedándose a una distancia de mi no muy lejana.

—No vuelvas a besarme. No tienes derecho de hacerlo, ni si quiera a tocarme. Eres un ser despreciable.
–escupo con rabia y apuntándole con el dedo índice.

Frunce el ceño y tensa la mandíbula.

—¿Por qué piensas que no voy hacerlo de nuevo, eh? Que estés saliendo con ese gilipollas, la verdad es que me importa una mierda.

—¡Oh por dios Hayes! no empieces de nuevo. No estoy saliendo con él, solo somos amigos. Además, ¿Por qué te estoy dando explicaciones? No somos nada. Él me gusta y puedo estar con quién yo quiera.
–subo la voz.

Meneo las manos en el aire.
Cabreada y echando humo por las orejas. No puedo seguir así por mucho tiempo.

Las personas que pasan por nuestro lado nos observan. Algunos intentando averiguar qué pasa, otros simplemente nos miran curiosos y otros pasan por nuestro lado como si nada.

—Claro que no. Deja de mentir de una puta vez, él no te gusta ni nunca lo hará. Mientes, todo el rato lo estás haciendo.
–murmura a regañadientes.

Rio secamente sin gracia y niego con la cabeza.
No, claro que no.

Quizá no me guste tanto como le estoy dando a entender a Hayes, pero si me gusta. Quizá un poco.

Quisiera saber por qué le molesta tanto que esté con otro chico. Por qué a todo chico que me acerco, ya supone que estoy saliendo con él. Tantas preguntas, que necesito que me de alguna explicación para entender todo esto de una buena vez.

—¿Por qué te molesta tanto que esté con otro chico? Siempre sacas celos y supones cosas que no son, siempre dices puras tonterías.. ¡No te entiendo!
Me utilizas, juegas con mis sentimientos pero luego no me puedo acercar a ningún chico.. ¡porque al señor le dan malditos celos! –suelto una carcajada sin gracia– ¿Sabes qué? No me gustas, no siento nada por ti y puedo hacer lo que me de la gana. Estoy harta de ti y esta manera de jugar con mis sentimientos.


Estoy explotando literalmente. Explotando por los aires y no hay quién me pueda detener.

Estoy cabreada como mil demonios y la verdad, necesito que Joseph salga de donde le haya metido el médico y nos vayamos de aquí.

No quiero estar nunca más cerca de Hayes.
Le odio, de verdad que sí.

—¡Date cuenta de una puta vez! ¿¡No te das cuenta que me gustas, joder!? Odio a cualquier puto tío que se te acerque, que respire a tu lado. Y mucho más que te toque y te bese como ese gilipollas y con el otro con el que saliste. Odio la manera en las que ellos pueden estar cerca de ti y yo esté cada vez más lejos por ser tan gilipollas contigo. Pero es lo que merezco y lo que quiero, no te haré nunca ningún bien. Como tú dices, soy un mujeriego insensible y no me importa dañar a la gente. Pero me gustas y tengo putos sentimientos por ti que nunca podré negarlos aunque lo intente. ¡Joder!

Cada palabra que va soltando, van quedándose en mi mente y van acelerandome el corazón. Reproduciéndose en mi cabeza una y otra vez.

No me puedo creer nada de lo que está diciendo, estoy completamente en shock. Sin saber qué hacer o que decir al respecto.

No me creo que Hayes tenga sentimientos por mi.
Ni si quiera que le guste, seria de locos.

Niego con la cabeza y doy pasos hacia atrás. Necesito asimilar todo lo que ha soltado, analizar cada una de las palabras. Esto ha venido demasiado rápido.

Destruyeme Donde viven las historias. Descúbrelo ahora