Perdida en mi destino.

Capítulo V

Cuando desperté noté que estaba cubierta con una manta así que supuse que Charlotte lo había hecho, vi a mi alrededor, la ventana estaba cerrada con la cortina, me levanté y fui a asomarme, el día se veía fresco, en eso Charlotte entró a la habitación.

-Buenos días alteza.-

-¿Buenos días?.- dije confundida.

-Sí alteza, la tarde de ayer se quedó dormida y preferimos no despertarla, durmió toda la tarde y toda la noche.-

-¡Oh! ¿cómo puede ser posible? seguramente mi padre está furioso- dije con preocupación tomando mi cara con ambas manos.-

-Descuide, le dije que usted tenía mucho malestar por lo que era preferible dejarla descansar y lo tomó bien.-

-Menos mal, pero ahora sí es momento de que me presente al desayuno.-

-Le prepararé el baño.-

-Gracias, Charlotte.-

Me aseé muy rápido, Charlotte me ayudó a vestirme y peinarme. Al salir de mi habitación encontré a mis padres.

-Buenos días querida- Saludó mi madre -¿Ya te encuentras mejor hoy?-

-Buenos días. Sí, me encuentro mucho mejor esta mañana.-

-Perfecto Elise, ahora cuando te encuentres con los reyes en el desayuno discúlpate por el inconveniente de ayer.-

-Lo haré padre.-

Llegamos al comedor, al entrar los sirvientes hicieron una reverencia acercándose para ayudarnos con nuestros asientos.

-Buenos días a todos- Dijo el Rey Benoit.

-Buenos días.- dijimos todos.

-Elise, ¿te encuentras mejor hoy?-

-Sí, mucho mejor, gracias por su preocupación Reina Christine, y ofrezco una disculpa por no haber podido acompañarlos a la cena de ayer por mi estado inconveniente.-

-No debes disculparte Elise, a mi también me ponen mal los viajes largos.-

Le sonreí a la reina. Nos sentamos todos y el desayuno fluyó con naturalidad, debería agradecer más tarde a Charlotte por haber mentido sobre mi estado en vez de decir que había sido muy holgazana como para despertar de mi siesta.

Seguimos desayunando en silencio cuando el Rey Benoit se aclaró la garganta.

-Esta noche llega mi hijo, justo a tiempo para la celebración y para que por fin lo conozcan.-

-Estamos ansiosos por conocerlo, solo faltan unas cuantas horas más.- Comentó mi madre.

Al término del desayuno mi padre se fue a caminar con el Rey Benoit, mi madre y la Reina Christine fueron a otra sala a conversar, la princesa Marguerite solo salió del comedor después de despedirse de todos, así que yo regresé a mi habitación y comencé a leer uno de los libros que había en un mueble. Pase la mañana leyendo, en la tarde Charlotte entró y conversamos el resto de la tarde hasta que mi madre entró a mi habitación.

-Hija, yo se que eres hermosa pero esta noche debes verte aún más hermosa de lo que ya eres, así que Charlotte por favor comienza a prepararla para la celebración.-

-Mamá, no soy tonta, sé que tú y en especial mi padre buscan que el príncipe Daimmen se case conmigo, pero hagan lo que hagan si a él no le gusto o convengo, no lo hará.-

-Estoy consciente de ello hija pero todo esto es un plan de tu padre y yo sabía que desde el inicio lo deducirías, aun así debemos intentarlo, no podemos dejar pasar tus últimas oportunidades.-

-Hablas como si fuera una anciana.-

-Sabes a lo que me refiero, Elise.-

-Y tu sabes que esto no depende de mi.-

-Lo sé hija, pero confío en tí.-

-Haré lo que pueda pero no prometo nada.-

-Y con eso para mí es suficiente.-

Hola, cambio de planes, subiré capítulo los lunes, martes, jueves y sábado.

Espero que les guste.

Saludos.

:)