El beso de Sam me había dejado pensando mucho. Seguí su beso, y al terminar él se disculpó y yo subí a mi habitación. Maldito bastado. Los premios eran ésta noche, noche de sábado, yo debería de estar en una fiesta con Nate en lugar de en unos premios con Andrew.
-¿Estás nerviosa?.-Me preguntó, negué. Él estaba más nervioso que yo.
-Te veo más nervioso a ti, que a mi y ¿por qué estaría nerviosa yo?.-Le pregunté con una sonrisa, él me miró serio y después río conmigo.
-Por tenerme tan cerca de ti.-Él y su ego de siempre, reí.
-Por supuesto, estoy muy emocionada de tenerte junto a mi, más que emocionada.-Le dije con sarcasmo, él me imitó con una voz fea.-Yo no hablo así.-Me defendí.
-Hemos llegado.-No me respondió nada y al instante en que dijo eso alguien abrió la puerta de mi lado.
El señor me ayudó a bajar, había una alfombra roja y todo se veía espectacular. Andrew se acercó a mi y me sonrió, él iba a tomar mi mano, pero yo entrelace su brazo con el mío, él me miró confundido.
-¿Está todo bien?.-Me susurró, asentí.
-No actuemos como algo que no somos, yo no puedo así.-Le dije, él carraspeo y dio algunos pasos.
Andrew y yo sonreímos a la gente que se encontraba detrás de la alfombra roja, a algunos programas de televisión que estaban en vivo y a las fans. Entrevistaron a Andrew, yo sólo estaba a su lado y cuando la chica me hacía algún comentario yo asentía con una sonrisa.
Enserio que estar en premios sin ser nominados era lo más aburrido del mundo. Andrew y yo sólo aplaudimos cuando nombraban a alguna persona o alguien cantaba. Tan emocionante que se veían en la televisión. Lo bueno fue que me tomé una foto con Austin Mahone.
-Nos vemos mañana, Camilita.-Se despidió de mi, sonreí y el di un beso en la mejilla.
-Hasta luego Drew, gracias Mark.-Le dije al chófer de nuestro auto, él me sonrió dándome las gracias.
El auto donde Andrew venía espero hasta que yo entrara a casa para irse. Mi casa estaba a total oscuras, no había ninguna luz prendida. Prendí la luz de la sala y me quité las zapatillas que me estaban matando. Había una pequeña nota en el mueble cerca del sillón y sin pernsarlo me acerqué a leerla.
Era de mi mamá, estaban en una reunión con no sé quien y se habían llevado a Stew, Nate y Sam tampoco daban señales de vida y lo más seguro era que anduvieran en una fiesta.
Subí hasta mi habitación y abrí la puerta, algo me impidió que la abriera mucho y sin pasar busqué con mi mano el interruptor. Había un gran oso en mi cama con una caja de chocolates y con una hoja de color rosa, quité la silla que me impedía abrir la puerta y de prisa me acerqué al gran osote.
"Sé que fui un gran tonto, por favor perdóname, Mila. ¿Amigos denuevo? A mi me gustaría empezar de cero.."
¿Acaso Sam jamás se cansaría de buscarme? ¿No le había quedado claro eso de que yo ya no quería nada con él? Bien, ni siquiera a mi me había quedado en claro lo que yo le había dicho.
Busqué en mi lista de contactos su número y marqué. No me respondió y le mandé n mensaje, me respondió a los minutos diciendo que estaba en la parte de atrás de mi casa. Así que bajé para ir a ver a Sam.
-¿Viste la carta?.-Preguntó mientras lanzaba piedras a una lata.
-Era imposible no verla.-Le dije, él siguió lanzando las piedras.
-¿Y qué dices respecto a eso?.-Me preguntó, me acerqué a él.
-Me pregunto si mereces otra oportunidad, tu tercera oportunidad.-Le dije, él me miró serio.
-Si tan sólo me dejaras explicarte.-Suspiró, quizás podría matar cinco minutos de mi tiempo escuchándolo.
-Estoy cansada de escuchar mentiras.-Le dije, él bufó.
-No son mentiras, que tú no las quieras creer es otra cosa.-Tenía razón.
Quizás él no me diría mentiras, pero yo de todas formas no le creería y no quería escucharlo, no quería llorar frente a él y no me quería enojar de nuevo.
-Las escucharé después.-Le dije y me di la media vuelta.
-Tengo mucho tiempo.-Dijo quitado de la pena, suspiré.
-No creo que puedas esperarme, Sam.-Mi voz sonaba a que lo estaba desafiando, pero de ninguna forma esa era mi intención.
-¿Segura?.-Preguntó, me di la media vuelta para verlo.
-Segura.-Respondí muy segura, él rió.
-Espero que te haya gustado el oso, se llama...-Se quedó pensando como por medio segundo.-Sammy.
-Es mi oso, yo le pongo como yo quiera.-Le dije.-Y si, si me gusto.-Dije fría y entré de nuevo a la casa.
-¡Yo le pondré el nombre a nuestros hijos, entonces!.-Gritó desde afuera, no pude evitar soltar una risita.
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¿Quieren saber cuál fue mi travesura? A la que adivine o se le acerque, le dedicaré el maratón del sabaduki..
En otras noticias; ¡Los pinchis Jacks andan en Monterrey, México!
¿Cuántas mexicanas bellas?
-Presente, aunque yo no soy totalmente mexicana :'( Andan en México por la fiesta de una tipa, andan de parranda...
Cap dedicado a; @-Cashew- ♥ Espero te haya gustado bella♡