-Smurfy.-Me quité las gafas de sol al escuchar que Johnson me habló.
-¿Mande?.-Pregunté acomodándome para que él pudiera sentarse.
-Sam quiere hablar contigo.-Dijo robando de mi bebida.
-¿Para qué?.-Lo cuestioné con una mueca y rodando mis ojos.
-Creo que algo de las fotos, yo que sé.-Se encogió de hombros y me levanté de mi asiento para ir con Sam.
Caminé por los pasillos del hotel tratando de encontrar a Sam, fui una tonta al no preguntarle a Jack donde Sam estaba.
-¿Buscas a alguien?.-Me sobre salte un poco al escuchar aquella voz detrás de mi.
-Me has asustado.-Me llevé la mano al pecho y él río.-Y si, busco a Sam.
-Estaba en su habitación hace un momento.-Kenny señaló hacía atrás dando a entender la dirección de la habitación de Sam.
-¿Me acompañas?.-Pregunté, él asintió y comenzamos a caminar en dirección a la habitación de Sam, ambos en silencio.
-Me tengo que ir, nos vemos más tarde.-Me dejó frente a la puerta de la habitación de Sam y él se fue corriendo en dirección de donde veníamos.
-¡Sam!.-Grité entrando y pude ver que no había nadie en su habitación.
-Ya salgo.-Gritó desde el baño, me senté en la cama y él abrió la puerta saliendo.-Perdón, me estaba duchando.-Llevaba la toalla atada a su cintura.
-Si, es un poco obvio.-Señalé con la mirada su toalla y él río.-¿Para qué me hablabas?.-Desvié la mirada de la ¡toalla! y observé la habitación.
-¿Qué te dije ayer?.-Volví mi mirada a la suya.
-No lo sé, dices tantas tonterías.-Rodé los ojos y él volvió a reír irónico.
-Estoy hablando enserio, Camila.-Su tono de voz fuerte y grueso que jamás había escuchado hizo que me mordiera el labio inferior.
-Pues no lo recuerdo.-Le dije inocente y enserio no lo recordaba.
-Te dije que no te acercaras a Gilinsky.-Su voz volvió a ser la voz normal de Sam.
-No me puedes impedir nada.-Le dije desafiante y leventandome de la cama.
-Claro que si.-Me contradijo.
-¿Por qué? ¿Quién te crees?.-Le pregunté con un tono sarcástico.
-Porque te lo estoy ordenando, y me creo la persona por la que estás vuelta loca.-Se acercó un poco a mi e hizo que mis vellos se erizarán.-¿O me equivocó?.-Preguntó muy cerca de mi rostro.
-¿Quién te dijo?.-Fue lo único que pude decir.
-Nena, no soy un tonto.-Sus manos se posicionaron en mi cintura.-Y ese bikini rojo te queda excelente.-Había olvidado por completo que traía sólo un blusón blanco sobre el bikini y se podía ver todo.
-Gracias, y Sam te recuerdo que tu mejor amigo es mi hermano mayor.-Estaba tan nerviosa que no podía decir nada para quitermelo de encima.
-No me importa, de hecho me vale.-Se encogió de hombros.-No quiero que te vuelvas a insinuar a Gilinsky con esas intenciones.-Sentí que una de sus manos comenzó a bajar de mi cadera hasta quedar en mi trasero.
-Quita tu mano de ahí.-Le dije cerrando los ojos algo molesta.
-¿O si no, qué?.-Preguntó apretándolo un poco.
-O si no haré...-No terminé de decir nada al sentir sus labios sobre los míos y su otra mano sobre mi trasero, dio unos cuantos pasos hacia atrás hasta chocar con lo que creo era un mueble.
-Estás cometiendo un error.-Sus labios bajaron a mi cuello y apenas así pude hablar.
-Será el mejor error de mi vida.-Sabía que Sam tenía intenciones de llegar lejos con éste beso, también tenía ganas.
-Promete algo.-Tomé sus mejillas entre mis manos e hice que me viera.
-Lo que sea.-Dijo, sus ojos se veían más oscuros que de costumbre, su cabello ligeramente húmedo y su torso desnudó hacían que pensara cosas que no debía.
-Prometeme que jamás me dejarás sola.-Él sonrió tierno, tenía miedo, miedo de que él sólo me mintiera.
-Jamás te he dejado sola, ni siquiera antes de todo esto.-Asentí y volví a sentir sus labios sobre los mios, sus manos por debajo de mi blusón y subiendo lentamente.
-¡Wilkinson!.-Alguien golpeó fuertemente la puerta e hizo que nos separarmos de golpe.
-¡Adelante!.-Gritó, me acomode el blusón y el cabello.
-Tienes tres minutos.-El chico asomó su cabeza avisándole a Sam. ¿Tres minutos?.
-Gracias.-Le dijo, el chico asintió y volvió a cerrar la puerta.
-Tengo que irme.-Él tomó mi mano para que no pudiera irme y volteé a verlo.
-Nada paso, ¿bien?.-Antes de que yo pudiera decir algo él salió de la habitación.
¿Qué había dicho? ¿Me había dicho que me olvidará de todo? ¿Es enserio?. Salí de la habitación con muchas preguntas sin respuesta coherentes en mi mente. Él me había besado y hasta quería tener sexo conmigo, pero después me dijo, prácticamente, que olvidará lo que paso.
Demonios. Maldito hijo de puta.
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Las amo✌❤
