-¿Qué acaso Ally y tú están locas?, se supone que las invitamos para que vinieran a vivir con nosotros,-Se señaló remarcando el ‘nosotros’.-no para que buscaran un apartamento lejos de nosotros.
Mientras Sam y yo dábamos un paseo le iba contando sobre los planes que Ally y yo teníamos de comprar un apartamento. Ese siempre ha sido uno de mis sueños, ¿a quién no le gustaría vivir con su mejor amiga en Los Ángeles?.
-Te dije que eran planes, no tenemos nada confirmado aún.-Le dije riendo de su expresión molesta.
-Pues más les vale que no confirmen nada.-Dijo, y ambos reímos.
Seguimos paseando, el bus del tour aun no llegaba y mientras nosotros y los chicos teníamos un tiempo libre. Sam y yo nos acercamos a las fans de ahí cerca y Sam comenzó a saludarlas. Yo llevaba mi cámara y comencé a tomar fotos de Sam y sus fans, mientras ellos se tomaban otras fotos.
-¿Nos podemos tomar una foto?.-Siempre había un grupo de chicas lindas que querían tomarse una foto y yo con gusto aceptaba.
-Por supuesto linda.-Ella se acercó más a mi, me rodeo con su brazo al igual que yo y le dio su teléfono a una de sus acompañantes, la otra chica tomó la foto y después cambiaron de lugar.
-Camila, me gustaría que leyeras esto en privado, o bueno, puede estar Sammy contigo.-La chica que primero se había tomado la foto me dio un papel, lo vi por unos minutos y después lo tomé de sus manos.
-Claro, gracias.-Le dije con una sonrisa, ellas también sonrieron.
-Un gusto conocerte, Mila.-Agregó la segunda chica, les sonreí de nuevo y las vi marcharse.
Volví a donde estaba Sam conversando con algunas fans, guardé el papel y tomé de nuevo una foto. Un rato después Sam se despidió de ellas y me tomó de la mano para volver al hotel.
-Desapareciste por unos minutos.-Dijo ya cuando íbamos lejos de las chicas.
-Algunas fans si me quieren y se toman fotos conmigo.-Le dije, él río.
-Todas te quieren, es sólo que aún no se acostumbran de verte de la mano con su daddy.-Volteé a verlo con una mueca ante su comentario y él me guiñó un ojo.
-Si, todas me quieren.-Dije con sarcasmo.
Si ponemos a las fans de los chicos, al 60% le caigo bien, pero de ese 60% al 30% no le gusta que salga con Sammy, es mas ni siquiera les le gusta que me vaya de tour con mi hermano o que pasee con Nate. Al otro 40% les caía mal desde que empecé a salir más con Nate, después vino y Sam y comenzaron a odiarme. Digamos que sólo el 30% del fandom me acepta, esté o no con alguno de ellos.
-¿Qué es lo que traes ahí?.-Preguntó señalando la bolsa de mi cámara.
-Pues mi cámara.-Le dije obvia, pero era claro que él hablaba del papel.
-JaJa que graciosa.-Río con sarcasmo.-¿Una de ellas te lo dio?.
-Si, la que se acerco a tomarse la foto conmigo, me dijo que la leyera en privado o que podías estar tú.-Le indiqué, él sacó el papel de la bolsa de mi cámara y lo guardó.
-No quiero que lo leas sin mi.-Al igual que Sam, también tenía miedo de que fuera odio hacía mi, aunque leyéndolo sola quizás no me afectara tanto.
-No te preocupes, cielo.-Le dije, él sonrío e hizo que lo abrazara, caminando así lo que restaba de camino a la entrada al hotel.
Entramos de nuevo al hotel, saludé a Kenny y a Johnson mientras que Sam iba la baño.
Platiqué con los chicos en lo que Sam salía de sus necesidades, él también se unió a la plática y después subíamos a su habitación.
-Bien, ¿la leo ya?.-Preguntó sacando el papelito de su bolsillo, asentí y me senté en la cama.
-No, la leeré yo, me la dieron a mi.-Le dije, me levanté, caminé hasta él y le quité el papel.
Abrí el papel lentamente, vi a Sam caminar a la cama y después posar su mirada en mi. Terminé de abrir la carta.
“Camila Maloley..
Hola, pues si ves esto es genial, ya que eso significa que nos hemos conocido. En ésta carta te quiero decir lo feliz que estoy por ti, Camila tienes a una de las personas más importantes en mi vida; Sammy, su corazón te pertenece y estoy muy feliz por ambos.
Espero que jamás le rompas el corazón a nuestro Sammy, ni que él a ti, hacen una pareja hermosa, se que han tenido sus altas y bajas, pero ¿y quién no?. El corazón de un chico genial te pertenece, así como el de nosotras, eres preciosa Camila y no me gustaría que a mi ídola (tú) unas cuantas envidiosas las hagan caer.
Es verdad que duele ver que tu ídolo encontró su mitad, es doloroso ver que él ya tiene a alguien a quien abrazar, besar, consentir, yo se que él no nos dejará de lado, pero eso se siente, que él se irá.
No te voy a mentir, al principio me dieron celos; celos de ver que en el brillo de los ojos de Sammy se reflejaba otra chica y que tú eras el motivo de su sonrisa, pero esa sonrisa. Verlo con esa sonrisa en su rostro me hacía sentir bien, me decía que él estaba feliz y eso no me ponía mas alegre.
Lamento molestarte con ésta carta, pero no tengo otro medio de como decírtelo. En las conferencias no puedo tenerlos mas de cinco minutos y esos minutos no me bastarían, ninguno me sigue en twitter, o en alguna red social como para decírselos, y jamás ven mis publicaciones, quizás no leíste la carta, pero al menos intente hacerte ver lo importante que eres para nosotras al saber que tú tiene el corazón de Sammy en tus manos.
Nota; Sólo tú puedes llamarlo ‘Daddy’, tienes nuestra aprobación... ;)
Atentamente; @shouldbemine”
Terminé de leer, miré a Sam con una sonrisa, ésta chica me había hecho el día, la semana, la vida.
Sam se acercó y comenzó a leerlo lo más rápido posible, después sentí sus brazos en mis caderas.
-Te dije que no todas te odian, ella ha dicho que nadie te odia.-Besó mi cuello.
-Son tan lindas, la seguiré, Sam ella me ha hecho verlas de otra forma, casate con todas ellas.-Le dije, él río.
-Sería ilegal, y además te engañaría con muchas.-Me encogi de hombros.-Ellas te han dado el permiso de llamarme daddy, ¿por qué no lo aprovechamos?.
Reí, Sam jamás cambiaría.
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¿Vieron que quizás los chiquibabys de los Magcon se vuelvan a reunir?
Ojalá, recen para que así pase
