Cincuenta y dos.

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Al llegar pedimos una mesa, pues no habíamos encontrado a Andrew por todo el restaurante. Sam y yo nos sentamos en la primera mesa que nos dio la gana y ninguno de los dos hablaba.

-Si así va a ser nuestra cita, no voy a querer ir.-Le dije cruzandome de brazos mientras él estaba muy entretenido en su teléfono.

-Estoy preparando eso, linda.-Guardo su teléfono y me sonrió.

-Seguramente.-Le dije algo molesta y mirando hacia otro lado.

-Te enseñaría la conversación, pero no quiero arruinar nuestra cita sorpresa.-Dijo, asentí aún molesta.-Te prometo que es eso.-Se levantó de su silla y me dio un beso en la cabeza.-Iré al baño.

Mientras Andrew y Sam llegaban comencé a ver cosas en mi teléfono; nuevos seguidores, menciones, y muchas cosas más. Estaba en twitter y me di cuenta de que Kalin and Myles me habían comenzado a seguir. Entré a su twitter y decía que vendrían a Omaha, no era una de sus súper fans, pero me gustaba su música y los niños no estaban tan mal.

-Al parecer Andrew es muy responsable sobre estas cosas, ¿no?.-Preguntó Sam sentándose de nuevo frente a mi.

-Pudo haberse atorado en el tráfico, no seas así.-Le dije, él no dejaba de mirar a todos lados.-¿Recuerdas cuando le pedí a Nate que me presentara a Kalin y Myles?.-Le pregunté, él asintió.

-¿Qué con eso?.-Sam a veces podía ser muy frío.

-Van a venir a Omaha, se que eres amigo de ellos y me encantaría conocerlos.-Le dije con una mirada del gato con botas.

-¿Quieres que te presente ante ellos?.-Me preguntó elevando una ceja.

-Si, podemos ir a su concierto y tomar algunas fotos, será genial.-Le dije, él sonrió.

-Está bien, conocerás a Kalin y Myles?.-Me dijo, sonreí.

-Hola, Camila...-Andrew llegó de la nada y al ver a Sam borró su sonrisa y lo miró algo dudoso.

-Hola Andrew, él es Sam.-Le dije con una sonrisa, me levanté y lo saludé con un beso en la mejilla.

-Soy Samuel Wilkinson, su novio.-Andrew y Sam se saludaron con un apretón de manos. Andrew traía una rosa en su mano y la vio por unos minutos.

-La traía para ti.-Dijo, pero no me la dio, sólo la puso en la mesa.

-Gracias.-Le dije algo incómoda. Sam se recorrió a otra silla, enseguida de mi, y colocó su mano sobre mi muslo.-¿Y cuál sería el trabajo?.

-Sé que eres fotógrafa, soy músico, me gustaría que hicieras una sesión y seria todo, me gustaría que trabajaras conmigo y con mi equipo, con un contrato de por medio.-Sonreí, era prácticamente el primer empleo que obtendría.

-Eso sería genial, ¿podemos hablar de la paga?.-Le pregunté, él río.

-300 dólares al mes, quizás más, depende de tu trabajo.-Dijo encogiéndose de hombros.-Mi equipo trabaja con varios músicos, y eso significa que podrás trabajar con más músicos.-Sonreí aún más, podría llegar a ser famosa.

-Eso es excelente.-Le dije, miré a Sam y él me sonrió.

-Entonces, ¿qué dices?.-Obvio diría que si, sentí un leve apretón en mi muslo; la mano de Sam.

-¿Dónde firmo?.-Pregunté, él río.

Mientras cenábamos el teléfono de Sam comenzó a sonar, el de disculpó y salió para contestar la llamada.

-Pensé que no tenías novio.-Dijo Andrew, lo miré atenta.

-Las cosas pasan, ¿eso afecta en el trabajo?.-Traté de no sonar muy grosera, pero creo que si sonó un poco fuerte.

-No para nada, pero pensé que yo, olvidalo.-Dijo quitado de la pena.

-Perdón, Andrew, no sabía que...-Él asintió sin darle importancia y seguí comiendo con algo de pena.

-No te preocupes, pero según yo, tu me habías dicho que no era tu novio.-Dijo con el ceño fruncido.

-Porque no lo era.-Le dije de lo más normal.

-Suerte por él.-Bufo y siguió cortando su carne.

-No sabía que tus intenciones eran otras, Andrew.-Le dije molesta.

-En la fiesta, tus intenciones también eran otras.-Contradijo, tenía un buen punto.

-Estaba ebria y no tenía novio.-Dejé de comer y me puse seria.

-No debes de decir eso, cualquiera te podría tachar de una cualquiera.-Eso no, eso si que no.

-Olvidalo, no quiero ese trabajo.-Me levanté molesta y él también lo hizo.

-Perdón, se me salió de las manos.-Dijo tomandome de los hombros.-Pero enserio me gustaría que trabajaras con nosotros, perdón por eso Camila.-Volvió a repetir.

-Es que Andrew.-En eso Sam entró, y como no quería que hiciera un escándalo por vernos parados e investigar que había pasado, me senté de golpe.-Está bien, perdonado.-Lo tomé de la mano para que se sentara y en cuanto se sentó lo solté de golpe.

-¿Entonces si aceptas?.-Preguntó, asentí.

Andrew fue el primero en irse, se disculpo con que tenía que ir a grabar una canción, pero yo sabía que era por la tensión entre los tres. Sam me invitó el postre y después a pasear por el parque.

-Es genial Sam, será mi primer empleo.-Le dije dando unos saltitos y aplaudiéndome a mi misma.

-No tienes porque trabajar, con el dinero que gano es suficiente para mantenerte a ti a todos los hijos que vamos a tener.-Me abrazó por la cintura y unas chicas nos miraron y señalaron.

-Sam hay fans.-Le dije, él no quitó su mano de mi cintura.-Sam aún no.

-¿Por qué?.-Preguntó y quitó su mano.-Algún día tendremos que hacerlo público, no me puedo quedar solo toda la vida.-Dijo exagerando las cosas, como siempre.

-Ese día no será hoy, será después, lo prometo.-Le dije y levanté mi mano derecha en señal de lo prometo.

-Lo que pasa es que tu no me amas.-Dijo haciendo puchero, reí.

-Claro que si.-Le dije y pellizque su mejilla.

-Demuestralo.-¿Me estaba retando?.

-¿Más?.-Me miró ofendido.-¿Cómo?.

-Dame un beso, en la boca, con tus manos abrazadas a mi cuello.-Esto era muy raro, había tenido un novio antes, pero no solía ser muy empalagosa con él y mucho menos demostrarnos afecto públicamente.

-Está bien.-Me acerqué a él y como él me lo pidió; coloqué mis manos en su cuello y acerqué mis labios a los suyos.

-Gracias, te amo.-Dijo con una sonrisa en medio del beso, sonreí.

Flyin' high, touchin' the sky | Sammy WilkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora