Feel Again I: X Factor (CAMREN)

La bandera

Capítulo 13: Parte III

Lauren, 30 de mayo; Los Ángeles.

Cuando Lauren se acostumbró a la poca luz, algo más que cuando llegaron hace unos minutos, que había en el sótano, lo primero que hizo fue asombrarse de lo que estaba viendo. Y por los jadeos de sorpresa que escuchó al instante, ella supuso que sus compañeras estaban igual de asombradas. Ally ya les había avisado de que era un laberinto, y de cómo era por dentro, pero la motorista no había esperado aquellos muros negros e inmensos que llegaban casi hasta el techo. Y porque la mujer de ojos verdes conocía aquel lugar, sino hubiese sido así, hubiera pensado que era tres veces más grande de lo que en realidad era.

Es un laberinto, volvió a pensar Lauren. Tenía que concentrarse y no dejarse llevar por la impresión. ¿Y la bandera? Se preguntó mentalmente. En el centro de todo.

-Vamos, chicas.

Lauren necesitaba que ellas también salieran de su estupefacción; necesitaba que reaccionaran ya. Nada más ver que la miraban, empezó a caminar hacia la derecha:

Había tres pasillos por donde ellas podrían entrar al laberinto, sin embargo, ya sabían cuál era el correcto, gracias a la visión de Ally, el de más a la derecha.

Ellas jugaban con aquella ventaja y Lauren tenía intención de aprovecharse lo máximo posible. Sabían cuáles serían sus obstáculos, incluso sabían que se encontrarían personas allí dentro, aunque no cuando o en qué lugar.

No iba a ser fácil ganar aquel juego, pero no era imposible.

Nada más empezar a caminar por aquel pasillo de la derecha, todas se vieron rodeadas por aquellos muros altos que hacían de pared, dejando solo el camino de ida y el de vuelta, por donde habían venido. Lauren iba la primera y aceleró el paso hasta encontrarse con el primer obstáculo.

Después de todo, aquel obstáculo era difícil de ignorar.

El camino estaba cortado por varias vallas llenas de alambres de espino, a varias alturas diferente, haciendo imposible la idea de saltarlas. Cuando llegó lo suficientemente cerca, Lauren sintió como una corriente eléctrica le atravesaba por sus manos y se paró al instante.

Un segundo después, una mano le tocó el hombro para hacerle reaccionar, era Normani.

Todas ya sabían lo que se iban a encontrar ahí y también sabían que debían atravesarlo por las cuerdas que habían suspendidas desde el techo. No tenían por qué hablar en aquellos momentos; ellas solo debían trepar y balancearse de una cuerda a otra. Era un ejercicio de fuerza, pero Sean les había entrenado a la perfección y no había ninguna duda de que todas podrían conseguirlo rápido.

Sin embargo había una cosa que Lauren sabía, y que probablemente las otras chicas no, aquellos alambres tenían electricidad. La motorista no dio ese detalle y siguió adelante; no quería ponerle más presión al grupo.

-¡Que fácil está siendo!-exclamó Dinah cuando todas finalmente acabaron de pasar.

-¡Cierto!

Camila chocó su mano con la de su amiga totalmente de acuerdo con ella.

Lauren nada más verlas negó ligeramente con la cabeza, su mayor enemigo seguía siendo el tiempo. No podían pararse a hacer el tonto.

Pero, de repente, se empezaron a escuchar unos disparos.

Eran unos disparos que iban directamente hacia ellas. Instintivamente la mujer de ojos verdes se agachó para que no le dieran, y eso mismo estaban haciendo sus compañeras. Así que, arrastrándose por el suelo, y guiadas por Ally, todas fueron yendo hacia una pared que les ocultaba a todas de los disparos blancos, disparos láseres.