-¿Puedes con algo más pesado?

Camila, algo dubitativa, asintió con la cabeza y se giró para encarar la mesa principal. Hizo lo mismo que la vez anterior, la señaló con su mano derecha, pero al contrario que con la carpeta, esta se tambaleaba suspendida en el aire a varios centímetros del suelo.

De golpe, y de forma poco cuidadosa, la mesa acaba cayéndose.

Al instante Lauren pudo escuchar un suspiro de cansancio por parte de Camila y cuando esta se giró para encararlas a todas, tenía la frente perlada de sudor.

-Practicáremos tu habilidad y mejorarás en fuerza, no te preocupes-la chica asintió con la cabeza mientras que intentaba controlar su respiración. Demi se había acercado hasta ella para recuperar la capeta y después volver hacia la parte trasera del aula-. Hay algo más que debes mostrarnos.

-¿El qué?

Lauren volvió a mover la cabeza para mirar a la tutora y esta se estaba golpeando ligeramente la sien con su dedo; estaba indicando esa zona de la cabeza:

-Tu memoria.

-Pero eso...-escuchó que dijo Camila de forma dudosa-, ¿cómo lo muestro?

Casi inmediatamente, la motorista vio como a Demi se le formó una sonrisa en los labios; parecía como si hubiese estado esperando esa pregunta para poder mostrarle cómo hacerlo. Ella cogió uno de los libros, que había traído de ante mano y que estaban en uno de los pupitres, y le dijo:

-The faul tour stars. Último capítulo; la parte en la que recibe el e-mail.

Lauren, regresando la mirada a Camila, se encontró con algo muy diferente a lo que había visto minutos antes. La frente de la cubana ya no tenía rastro de sudor ni su respiración estaba agitada. En esos momentos parecía totalmente calmada con aquellos tejanos ajustados y su camisa blanca:

-"Van Houten: Soy una buena persona, pero una mierda de escritor. Usted es una mierda de persona, pero un buen escritor. Formaríamos un buen equipo. No quiero pedirle ningún favor, pero si tiene tiempo..."-empezó a recitar de memoria sin ningún tipo de duda en su rostro.

Lauren abrió los ojos y, ligeramente, la boca sin poder controlar la sorpresa y asombro que sentía:

-Hamlet-indicó Demi-. La famosa escena cinco con el soliloquio de ser o no ser.

-"Ser o no ser, he aquí la cuestión. ¿Qué es más elevado para el espíritu, sufrir los golpes y dardos de la insultante fortuna o tomar armas contra el piélago de calamidades y, haciéndoles frente, acabar con ellas? Morir..., dormir..."

-¡Yo también quiero probar!-exclamó Dinah interrumpiendo aquel precioso momento, pensamiento textual de Lauren. No había duda que se le había puesto la carne de gallina al haberla escuchado recitar de aquella manera tan sentida y pasional-Camila, recita la tercera escena de sexo en Cincuenta sombras de Grey.

Al instante, Normani soltó una sonora carcajada mientras que Ally gritó:

-¡Dinah Jane!

Lauren miró un segundo a sus tres compañeras, pero después regresó la mirada a Camila para encontrársela totalmente roja. Sus mejillas parecían que estuvieran en llamas de lo sonrojadas que estaban. Incluso la motorista, en el mismo instante en el que la vio, tuvo que ponerse una mano en la boca para ocultar aquella pequeña sonrisa que empezaba a formarse lentamente en sus labios.

-A mí no me importa que "recites" ese libro-aclaró Demi alzando la voz para que todas la pudiesen escuchar por encima de las risas de Normani y Dinah.

Estas dos chocaron sus manos contentas de que tenían el visto bueno de la tutora:

-Yo...-tartamudeó la cubana-. Yo no he leído... ese libro...

-¡Pero si lo lees todo!

-Es imposible leerlo todo...-contradijo rápidamente mientras se cruzaba de brazos. Sin embargo, aún seguía con el rostro bastante rojo.

Lauren empezó a notar como Camila se estaba poniendo incomoda con el tema, se removía inquieta sobre sus pies, y al ver que Demi no hacía nada para solucionar aquella situación, su boca intervino antes de que su mente pudiese procesar lo que estaba haciendo:

-Matar a un ruiseñor-habló de la nada haciendo que todas le prestaran atención-. Escena... Mmh... No recuerdo que capítulo es, pero cuando les regalan a Scout y a Jem los rifles de aire, ¿sabes cuál te digo?

Camila, al instante, asintió efusivamente mientras que se le creaba una preciosa sonrisa en los labios, como si fuese una niña pequeña:

-"Prefiero que disparen a las latas vacías en el patio trasero, pero sé que ustedes van tras los pájaros. Dispara a todos los pájaros azules que quieras, si es que les puedes acertar, pero recuerda que es un pecado matar un ruiseñor..."

Y en esos momentos, fue Demi quien interrumpió aquel precioso momento:

-Perfecto Camila, ya te puedes sentar-ordenó desde la parte trasera del aula-. Normani, te toca demostrarnos tu habilidad.

-¡Vamos, Mani!-Ally gritó entusiasmada.

Lauren, levemente, sacudió la cabeza para poder seguir prestando atención a lo que ocurría y no a sus pensamientos:

Normani no lo dudó ni un momento. Nada más pararse delante de la mesa, justamente en el centro, alargó sus brazos pasando por encima de la cabeza de Ally para después coger la carpeta de Demi, la misma que había hecho levitar Camila. Sus brazos se habían alargado más de tres metros de distancia y ella no se había movido del sitio.

-Muy bien, Normani-expresó Demi-. Pero que la próxima que no utilice mi carpeta como ejemplo, por favor-las aludidas rieron por lo bajo ante ese reproche-. Las artes marciales dejaré que las muestres con Sean. Ally es tu turno.

A pesar de que durante esos veinte minutos Lauren no había dejado de estar sorprendida por lo que podían hacer las otras tres chicas, ya que a Ally ya le había visto en acción y vagamente recordaba los informes que había leído de ellas, pero a pesar de eso la que más le había asombrado, sin ninguna duda, había sido Camila. Y sin poderlo evitar, la chica de guantes negros, durante unos segundos, se la quedó mirando con cierto interés. Estaba mirando el perfil de la cubana pensando en cómo había sido capaz de recitar todos esos libros de memoria sin vacilar en ninguna palabra.

Lentamente, y volviendo en sí, regresó su atención a Ally:

-... no las puedo controlar ni tampoco sé si van a suceder en la vida real. Simplemente, no las puedo forzar. Y a veces han fallado, así que no puedo asegurar que sean cien por cien seguras cuando las explico...

-¿Pero, si puedes saber cosas, no?-escuchó que le cuestionaba Demi.

-Sí-afirmó a la vez que asentía-, sé cosas. También de forma involuntaria, es como si alguien me susurrase al oído esa información de alguien o de algo.

-¿Qué sabes de mí?

Ally se quedó mirando durante unos segundos hacia la zona donde estaba la asistente mientras inclinaba ligeramente su cabeza, pero después volvió hablar:

-Esta noche tienes una cita... con tu novio-en ese segundo, Lauren giró su cabeza para mirar a Demi y esta tenía las cejas levantadas, pero en ningún momento la cortó. Era bastante evidente que había acertado en eso:-. Se llama... Will, no, perdón... Wilmer. Wilmer Valderrama. Y te llevará a tu restaurante favorito... A ese italiano en el que soléis ir en los momentos espe...

-Vale, lo entendí-en esos momentos sí que la cortó, al parecer ya no necesitaba escuchar más-. Ejercitaremos tu mente para que interpretes las visiones y sepas analizarlas y clasificarlas: aquellas que pueden suceder y las que no. Y también las que puedes decir o no.

Todas se miraron entre ellas confundidas, pero Ally, al parecer, lo entendió a la perfección porque rápidamente asintió con la cabeza.

¿Ally sabrá algo de mí?

-Lauren, tu turno.

Y el momento que había estado temiendo había llegado.



Feel Again I: X Factor (CAMREN)Where stories live. Discover now