Another Soft Story || TaeGyu

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1:40 AM

BeomGyu estaba estresado.

TaeHyun lo hacía estresar en niveles inimaginables.

—¿Y qué culpa tengo yo de tu estrés? —preguntó TaeHyun cruzado de brazos. BeomGyu volteó a verlo.

—¡Mira esto! Dejaste todas las doradas aquí y allá hay un espacio vacío, tienes que abrir más el espacio —explicó moviendo las bambalinas que había puesto el alfa, TaeHyun lo abrazó por la cintura, besando su cuello.

—No sabía que eras diseñador de árboles de navidad.

—No lo soy, soy una persona con lógica —contestó acomodando todo, dejándolo mejor distribuido, TaeHyun observó, apenas iban por la mitad del árbol, y todavía le faltaban luces de un lado y ya quería ir a dormir.

Pero era imposible.

—Yo las pongo, tú no —pidió TaeHyun quitándole las luces al omega de las manos, BeomGyu cruzó los brazos mirando al alfa subir a un banco algo alto para poder colocar las luces de la punta del árbol. TaeHyun se quejó pasando las luces alrededor, aparte de alto, el árbol era grueso, por lo que era algo forzoso pasar alrededor de él desde un solo lado, así que debía bajarse, rodar el banco y seguir por todo el alrededor.

—Eso te pasa por comprar un árbol más grande que tú existencia —reclamó dejando una suave palmada en el trasero de su esposo que chasqueó la lengua, siguiendo con su trabajo.

Aún quedaban adornos, bolsas sin abrir, luces que encender y demás.

Ambos habían tenido una ardua jornada de trabajo, y ya estaban por fuera de la hora normal en la que dormían, así que no fue sorpresa cuando el omega bostezó mientras rodeaba el árbol con una guirnalda brillante.

—¿Qué hora es? —preguntó TaeHyun bajando del banco cuando estuvo listo. BeomGyu revisó el teléfono en sus bolsillos.

—Dos de la mañana —contestó arreglando más adornos con cuidado y sin apurarse, quería que quedara hermoso.

TaeHyun se quejó un poco arrastrando los pies a su esposo, lo abrazó por la espalda, restregando su nariz en el cuello ajeno.

—¿Qué quieres, Tae? —preguntó con una risa por los movimientos del alfa en su cuello, colocó otra esfera de navidad en otra rama del árbol.

—¿Me preparas un sándwich, cielito lindo? —preguntó el alfa en un tono bajo, BeomGyu sonrió.

—Son las dos de la mañana...

—Pero tengo hambre.

—¿Y por qué no lo haces tú? Tienes dos manos funcionales.

—A tí te quedan más sabrosos... —contestó sacándole una risa al omega, BeomGyu se dió la vuelta entre lo brazos ajenos, besando la nariz del alfa antes de ir a preparar  el sándwich sin problemas.

Tenía semanas que no consentía a su esposo.

Por otro lado, el alfa empezó a adelantar el trabajo, siguiendo con los adornos del árbol, usando de guía el cómo las había colocado su esposo.

Si no lo hacía así, se ganaría un regaño.

—Tae...

—¿Si?

—¿Recuerdas lo que te mencioné de Byeol? —preguntó el omega preparando el sandwich con dedicación, usando todos los ingredientes, TaeHyun se acercó a él, apoyándose del otro lado de la encimera para verlo y hablar con él.