Another Soft Story || TaeGyu

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3 días después.

—Vamos a quedarnos acostados, así, abrazados, ¿Si? —preguntó BeomGyu abrazando el pequeño cuerpo de su bebé que se quejó— Anda, Byeol —pidió mirando a su bebé sentarse, con la mirada fija en la puerta, balanceándose hacia ella con quejidos— Que insistente —bufó el omega sin tener otra opción que sujetar a su bebé para salir como él quería, sintiendo algo de dolor al caminar, su celo había acabado hace tres días, y aún tenía algo de dolor allí.

Se había retractado de sus chistes sobre la vejez de Kang y no había vuelto a hacer más desde entonces.

Byeol soltó un chillido de emoción estirando sus brazos a los juguetes en su zona de juegos, BeomGyu se agachó con un quejido, tomando asiento con el bebé.

TaeHyun era el encargado de hacer la comida ese día, entonces se escuchaban los sonidos en la cocina y por la encimera se podía ver al alfa de espaldas, moviéndose con un leve tarareo.

Byeol tomó el primer juguete que vio, llevándolo a su boca, BeomGyu se lo separó con cuidado con una risa mirando a su bebé insistir en llevarlo a su boca.

—Bien, ganas —aceptó dejando al bebé meter el juguete a su boca, simplemente babeándolo.

BeomGyu inhaló con un sonido de satisfacción, olía divino.

—Huele bien, ¿Qué estás haciendo? —preguntó mirando a Byeol mecerse en su lugar, apretando el juguete a él.

—Pollo en salsa agridulce —contestó concentrado, el omega hizo un pequeño baile de felicidad por la comida de ese día. Byeol se estiró a otro juguete, quedándose boca abajo.

TaeHyun colocó todos los ingredientes en el sartén para poder sofreír unos minutos antes de agregar el pollo, tuvo cuidado con la cantidad de aceite y la llama.

Pero cuando agregó el pollo al sartén soltó un quejido de puro dolor, retrocediendo cuando sintió el dolor en su mano derecha.

—¿Qué pasó? ¿Te quemaste? —preguntó BeomGyu levantándose del suelo con rapidez para acercarse preocupado a su esposo que seguía presionando su mano a su pecho con dolor.

Byeol quedó sólo en el tapete de juegos, el bebé puchereó mirando a sus padres lejos.

—¿Te duele mucho? Está todo rojo... —murmuró apagando la cocina para llevar a su esposo al lava trastes, abrió el grifo dejando la mano del alfa bajó el agua, TaeHyun siseó adolorido.

BeomGyu pasó su índice por la quemada, mirando que era grande, todo el dorso y llegaba hasta su muñeca, eran salpicaduras de aceite caliente.

—Debes tener más cuidado, Tae —recordó el omega aún pasando su mano por la quemada del alfa que volteó en dirección a dónde se supone estaba su hijo.

—BeomGyu... —palmeó el hombro del omega con su mano libre pero el omega se removió.

—Es normal que te duela, pero te refresca, te lo aseguro... —afirmó sobando con cuidado, TaeHyun lo volvió a palmear con insistencia— Deja el drama, Kang, ya se debe haber aliviado un poco.

—¡Mira a Byeol! —le insistió el alfa haciéndolo voltear, BeomGyu observó en la dirección señalada.

Soltó la mano de su esposo para dejarla sobre su boca con emoción.

Byeol estaba en la entrada de la cocina, en sus cuatro puntos, mirándolos a ambos mientras balbuceaba.

—¿Lo... Lo estás viendo? ¿Estás viendo a tu hijo? —preguntó el omega palmeando con emoción el pecho de TaeHyun que se agachó para estirar ambas manos al bebé que volvió a gatear con algo de torpeza y lentitud acercándose al alfa— ¡Nuestro bebé ya gatea, ya gatea! ¡Lo hizo él solito!