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Ese mismo día, en la noche, cuando Byeol ya estaba dormido en su cuna y el omega se estaba dando una ducha luego de cenar, TaeHyun decidió colocar una película en la televisión de la sala de estar.

Pasó las listas con el control remoto, una y otra vez, leyó las sipnosis de algunas y otras las pasó sin verles siquiera el título.

Encontró la zona de estrenos, empezó a ver uno a uno detalladamente, ninguno le llamaba la atención.

Chasqueó la lengua dirigiéndose a su última opción.

El top diez de la semana.

Revisó uno por uno, leyó todas las sipnosis.

—Se ve buena —murmuró mirando el corto de la película, era de terror. Le bajó el volumen por los gritos, sin querer despertar a su hijo.

—¿Por qué andas a oscuras? —preguntó BeomGyu saliendo de la habitación, con un cambio de ropa parecido al que tuvo toda la mañana, shorts deportivos una talla menos que su original y una camisa de su esposo.

—Voy a ver una película, ven, veamos esta juntos —invitó palmeando el espacio a su lado, BeomGyu achicó los ojos.

—¿Qué género es?

—Terror, suspenso.

—¿Por qué no pones un musical mejor? —preguntó arrastrando los pies hacia su esposo que rió, recibiendo al omega a su lado.

BeomGyu no era muy fan del terror, evitaba ver esas películas, mientras que su esposo podría ver tres películas de terror seguidas, y de paso, crear teorías entre las sagas existentes.

Teorías que él escuchaba con total atención.

—La última vez tú elegiste la película, ahora me toca a mí —recordó el alfa empezando la película, BeomGyu refunfuñó subiendo los pies al sillón, TaeHyun se relajó con el dulce aroma a miel que lo rodeaba, mezclado con café y el aroma suave de los productos que usaba su esposo cada que se duchaba.

Ambos se concentraron en la pantalla, prestando atención a la película.

BeomGyu se sentía en tensión, estaba esperando un susto o algo, pero nunca pasaba y eso lo ponía aún más nervioso.

—¡Carajo! —gritó pegándose más al alfa que rió, abrazando sus hombros, BeomGyu refunfuñó.

—Solo se cayó un vaso, BeomGyu —aclaró el alfa con una sonrisa, BeomGyu chasqueó la lengua quedándose recostado en el hombro de su esposo que lo abrazó por los hombros, pasando su dedo índice por su brazo, moviéndose en pequeñas caricias distraídas.

BeomGyu prestó atención a la película, estirando su brazo para pasarlo por encima del abdomen del alfa, abrazándolo.

Ambos se quedaron en silencio, prestando atención, BeomGyu empezó a encogerse en su lugar cuando las cosas se pusieron tensas en la película.

—No vayas a gritar —susurró el alfa concentrado en la escena, BeomGyu dejó su mano en su boca para evitar gritar. La escena fue larga, una mujer viéndose en el espejo, volteaba hacia atrás constantemente, volvía al espejo y el espectro salía en su hombro.

Fue una repetición de unas cinco veces, pero cuando la mujer volteó, el horrible espectro apareció en toda la pantalla. BeomGyu dió un salto en su lugar, pegándose aún más al alfa con miedo.

—¿¡Por qué no me avisas!? —reclamó asustado, golpeando con suavidad el abdomen del alfa.

—¿Qué te voy a avisar?

—¡Que van a asustar!

—No hice la película, mi cielo, así que tampoco sé cuándo asustan —explicó, el otro chistó subiéndose al regazo del alfa que lo recibió con gusto, BeomGyu se abrazó a los hombros del otro que abrazó su cintura algo dudoso.

Another Soft Story || TaeGyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora