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Ir a la otra sede se había convertido en un “mañana voy” de parte del omega que no tuvo otra opción que quedarse con su bebé adolorido y ahora temeroso de acercarse a los gabinetes o intentar levantarse por si solo.

Así que se quedó en casa ese día, levantándose temprano al día siguiente para alistarse para el trabajo.

—¿Enserio vas a ir? —preguntó TaeHyun de brazos cruzados, sentado en el borde de la cama, en pijama.

BeomGyu se colocó la ropa adecuada para ir, peinándose con las manos.

—Si, ¿Qué tiene de malo?

—¡Es la nueva sede! —reclamó mirándolo con el ceño fruncido.

—¿Qué tiene que ver? Dijimos que me iba a encargar de ella por un tiempo.

—¡Está llena de alfas! Más de la mitad de los empleados son alfas, BeomGyu —recordó mirando a su esposo suspirar, BeomGyu se volteó a verlo.

—Ven, te voy a preparar el desayuno —animó estirando la mano al alfa que la tomó, entrelazando sus manos.

BeomGyu caminó, besando la mejilla de su esposo antes de separarse para prepararle el desayuno.

TaeHyun suspiró mirando a su esposo, se acercó a ayudarlo también a cocinar el desayuno, aprovechando que Byeol estaba dormido.

—Pásame la sal, por favor —pidió el omega cuando tuvo dos huevos fritos hechos, empezó a cortar algo de fruta, TaeHyun caminó al gabinete sobre el omega, se pegó por completo a él, recostando cierta parte en cierta zona mientras buscaba la sal.

BeomGyu sintió las mejillas calientes, el cuerpo del alfa pegado el suyo por completo.

—Concéntrate, tarado —le reclamó arrebatándole la sal, el alfa lo abrazó por la cintura, besando su mejilla.

—Te pasé la sal, estoy concentrado —afirmó pasando su nariz por el cuello del omega que se encogió en su lugar, el alfa lo abrazó aún más, juntando sus cuerpos.

Sintió besos en su nuca, sus orejas se calentaron y el sonrojo en sus mejillas se intensificó.

—¡Toma, ve a comer! —le ordenó dejando las frutas picadas en un plato hondo, se volteó entregando el plato al alfa que se separó de él— Ve, sientate y yo sirvo todo —propuso empujando los hombros de su esposo, dejándolo sentado en su silla. TaeHyun lo observó.

—Pero-... Yo te ayudo —propuso, haciendo el intento de levantarse, pero BeomGyu lo devolvió a la silla.

—Quedate aquí, enserio —insistió aún con las mejillas sonrojadas, TaeHyun suspiró mirando las frutas. BeomGyu volvió a servir en los platos lo que faltaba para comer.

—Solo te di un abrazo...

—Con recostada incluída... —murmuró el omega colocando los platos en la mesa. El alfa lo observó fijamente, su esposo se sentó frente a él, mirando la comida.

Recostó su mejilla en su palma.

—Es que eres muy ardiente...

—¡Ya come que se va a enfriar! —regañó tomando un trozo de fruta para meterlo a las fuerzas a la boca del alfa que rió, empezando a comer con normalidad.

TaeHyun estiró sus pies bajo la mesa, el omega buscó los pies del alfa con los suyos, dejó sus pies encima de los del alfa, comiendo.

—Mi celo está cerca —comentó el alfa mirándolo fijamente— Tu... ¿Estás cómodo con eso? —preguntó, el omega suspiró mirando su plato vacío.

Another Soft Story || TaeGyuWhere stories live. Discover now