Alfa!Cracker x Omega!Male!Reader +18

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Pedido de Samantha_Alanis



Desde el día que nací, supe que mi vida sería una verdadera pesadilla, en la cual negaría constantemente algo que soy... Aunque mi cuerpo y mi forma de ser sean contrarios a los míos, tarde o temprano todos terminan por darse cuenta de mi maldita realidad. En esta sociedad, los que somos llamados "Omegas" tan solo servimos para procrear... Somos muy pocos en comparación a los "Betas" y siempre debemos de someternos a los demás, incluso si no nos gusta... Especialmente hacia los "Alfas".

No importa si eres hombre o mujer, ambos pueden embarazarse y llegar a embarazar, dependiendo de qué clasificación biológica tengan... Tan solo los Omegas hombres podemos embarazarnos... Y los Alfas pueden preñar; las mujeres Beta son las únicas de su especie que pueden tener hijos. Nací siendo uno de ellos... Los que no tienen más opción que bajar la cabeza y aceptar órdenes, incluso si no queremos.

Tuve una buena infancia... Nadie sabía que era un Omega... Y yo lo mantenía en total secreto, guardando la esperanza de un día convertirme en un Alfa o que mi aspecto y actitud desafiante ayudaran a conseguir un título alto y de respeto... Siempre me metía en problemas en la escuela, peleando contra los más fuertes para demostrar mi dominio, conquistando tantos territorios como pudiese, aceptando cada reto... Recuerdo siempre sus palabras... "¡Serás un gran Alfa!", "¡¿Acaso te convertirás en presidente?!", "Hey, mira a esos Omegas, como te coquetean... ¡Seguro tendrás un buen celo cuando te llegue!"

—(Qué iluso...)— Suspiro, observando la pantalla de mi monitor.

Me sentía en la cima del mundo... ¡Respetado y querido por todos! ¡Un Alfa en toda regla! ...Y luego sucedió... Mi maldito primer celo. Jamás olvidaré el desesperante olor dulce de mis feromonas, avisando a todos los Alfas cercanos que finalmente había alcanzado la edad necesaria para embarazarme. Todo aquel imperio que había creado con mis propias manos se derrumbó en pedazos... Mis sueños se estrellaron... La realidad golpeó con todas sus fuerzas a un mocoso que desesperadamente intentaba cambiar su propia existencia...

Las burlas comenzaron, al igual que los acosos por parte de los Alfas... Incluso las inyecciones y pastillas de inhibición de estral no sirvieron... Mis feromonas eran demasiado fuertes como para poder suprimirlas tan fácil. "¡Un Omega en toda regla!" Ese ha sido el mayor insulto que recibí en mi vida... ¡Nunca quise ser uno de ellos! ¡Quería ser un Alfa exitoso! ¡Alguien que respetaran con solo pronunciar mi nombre! El desespero por inhibirlas fue tanto que comencé a usar ambas opciones juntas... Era un milagro si lograba levantarme por el dolor esos días...

Muchas veces intentaron usar "La voz" conmigo, ordenándome volverme un maldito sumiso al cual poder coger sin importar nada más... Fue muy difícil hacerles frente con ellos ordenándome cosas y yo luchando internamente para no rebajarme. Tuve muchas peleas y palizas que di y recibí, todo por protegerme a mí mismo y para evitar el abuso de alguien... Cada una de mis cicatrices las luzco con verdadero orgullo.

—(Esta es la mejor...)— Toco mi párpado, donde debería de estar mi ojo izquierdo.

Fue un día en que el celo me llegó en la escuela. Los estudiantes más grandes me acorralaron en el baño e intentaron abusar de mí... No me arrepiento ni un poco de haberle arrancado la puta polla a uno de un solo mordisco. Me arrojaron contra el espejo y se rompió en pedazos, incrustando sus cristales en mi espalda... Usé mis manos para tomar todos los fragmentos que pude y los lancé hacia mis agresores, cortándolos y dañándolos aún más... Cuando ellos huyeron, sentí que el cansancio me vencía y... No tengo más memorias de eso...

Una pequeña historia (One Piece X Reader) ONE-SHOTSWhere stories live. Discover now