Un Verdadero Márquez (MLLP 3)

Capítulo 54: Navidades en familia

El 21 de diciembre Mellea y Joel cogen un vuelo a Barcelona. Joel esperaba encontrar a Daniel o a su hermana en el aeropuerto y en cambio lo que se ha encontrado es a sus padres que no lo han dejado tranquilo ni en el coche. Que casi no llegan tampoco porque Marta no quiere soltar a Joel. Lleva 3 meses sin verle y ya le echaba de menos.

Joel y Mellea se quedan en casa de Àlex y Marta. En la antigua habitación de Joel, que sigue tal cual la dejó él. Y están los 5 solos; Marta, Àlex, Joel, Mellea y Ares; hasta el lunes, que es Nochebuena y que a Mireia no le queda de otra que volver a Cervera ya. La hija de Àlex ha estado aprovechando el tiempo al máximo para estar tranquila y relajada. Y para estar el fin de semana con Jordi que ha venido desde Andorra para estar con ella antes de los días festivos y familiares que llegaban. A ninguno de los dos le gustan mucho esas fechas. Mireia perdió la ilusión tras darse cuenta de quién eran la Reyes Magos y pensar qué nunca le caería la moto que pedía. Y a Jordi nunca le han encantado. No le disgustan, pero no le parece una fecha especial. Son fechas muy materiales, no tienen realmente ese mensaje de reunirse la familia en Navidad para estar juntos, sino que siempre ronda ese ambiente comercial.

-Me gustaría poder pasar estas fechas contigo.
-No voy a poder quitarme de encima las cenas y las comidas en familia. Pero a mí tampoco me gusta todo esto.
-Estaríamos tan bien los dos solos aquí. Tú, yo, y el piso para nosotros solos.
-Sería perfecto. Pero no va a ser posible.
-Lo sé. Mi padre me sacaría a rastras de aquí.

Mireia y Jordi se despidieron el 24 al mediodía, y cada uno cogió un camino diferente. Mireia fue a Cervera, y Jordi a Andorra.

-Anímate hermanita. Que no voy a estar todas las fiestas.
-Es verdad. Mejor todavía me lo pones para animarme más aún estas fechas. Mi hermano se va antes de fin de año.
-Mellea necesita estar con su padre y su hermano. Su madrastra los ha dejado.
-Lo sé Joel. Lo sé muy bien. Pero estas fechas ya son una mierda sin que tenga que añadirle que no vas a estar en su totalidad.
-Piensa que, aunque estuviéramos viviendo aquí todos, mi suegro y cuñado incluidos tampoco podríamos estar todas las fiestas juntos. También tendríamos que estar con ellos.
-Pero estaríais aquí fuera de las fechas, ahora vivís a miles de kilómetros.
-Hermanita, tú también te irás de casa pronto. Tampoco es que pases mucho tiempo en esta casa ya.
-También es verdad. Pero no creo que me vaya tan lejos.
-¿Y Andorra?
-Suena bien.
-Convenceré a papá para que te deje pasar unos días allí con Jordi.
-Si consigues que mamá no te mate por ello serás mi héroe.
-Yo me voy el 30. No va a poder hacerme nada cuando se entere.
-Ya veremos.

La cena de Nochebuena será en casa de Marc, pero aún queda un rato para ir a casa de sus tíos. Aunque quizás estar con Adrián y Leticia no sería del todo mal. E incluso estarían mejor. Tener a Marta taladrándoles los oídos con que les echa de menos mucho por casa, qué solo está Ares y que es muy diferente no tenerlos por casa siempre como cuando eran pequeños y se buscaban todo el día una al otro, y al revés. Ya están empezando a cansarse de su madre y de sus historias de cuando eran dos niños pequeños que correteaban por casa. Ya no son unos niños. Tienen 20 y 23 años.

-Mamá, nos vamos a ayudar a la tía Almu con la cena y a ver a los primos. Luego nos vemos.- le dice Joel a Marta antes de salir por la puerta.

Joel, Mellea y Mireia se van sin darle opción a su madre y suegra a decir nada. Salen por la puerta sin pensárselo y van a casa de Marc y Almudena donde el primero les da conversación y les pregunta a Joel y a Mellea por la vida en Milán, por el trabajo de psicólogo deportivo y por la carrera de farmacia que está haciendo Mellea. También ayudan con la comida que se va a servir en la cena de Nochebuena junto a sus primos Leticia, Adrián y Luka. Daniel y Alejandro vendrán más tarde a cenar con la familia. Así que los únicos novios que no van a estar esa noche son Jordi, que estará en Andorra con sus padres, y Didac, el novio de Luka que también tiene que quedarse en casa con sus padres y no va a poder pasar a cenar ni a ver siquiera a Luka hoy. Los dos primos se miran y se entienden esa noche. Los demás tendrán a sus parejas esa noche. Y en el caso de Mireia va a ser peor de aguantar aún porque Marta está nostálgica y no los dejará en paz a ella y a Joel. Pero su hermano tiene a Mellea para apoyarse.

Daniel y Alejandro llegan antes, y Marc y Almudena mandan a sus dos hijos y sus dos sobrinos a estar con ellos, que ya terminarán ellos dos lo que falta por colocar en la mesa y lo que falta por hacer en la cocina. Mireia se anima al estar con Daniel y sus primos. Pero pronto llegan sus padres y su hermano.

Àlex se ayuda de Marc para intentar que la cena sea animada y sin problemas. Pero Marta no para de hablar de lo lejos que está Joel, de lo poco que pasa por casa Mireia, y de lo poco que hace que eran como uña y carne y estaban en casa los dos. Mireia es la primera en levantarse. Detrás se levanta Joel, y justo detrás de él van Leticia y Daniel. Los 3 intentan animar a la rubia malhumorada, pero cuando le dicen que mañana en la comida de Navidad no van a estar más que ella y Ares, porque los 6 van a ir a casa de los padres de Daniel y Alejandro, y Luka también va a casa de Didac, se altera aún más. Aunque acaba llamando a Jordi para pedirle que le hagan hueco en la mesa mañana. Su chico y su suegro la aceptan sin problemas y entonces vuelven a la mesa los 4 de nuevo.

-Mañana no voy a estar aquí.
-¿Y eso?- pregunta Marta.
-Me ha llamado Jordi. Fabio me ha invitado mañana a estar en la comida de Navidad con ellos. No he podido rechazarle la oferta a mi suegro.
-Vas a ser una abogada excelente.- le susurra Joel que sabe que no es verdad.

Mireia asiente como respuesta y Marta acepta que no podía decirle que no a Fabio porque se lo tomaría mal.

.

.

.

Nuevo capítulo. Primero del día. Otro más dentro de un rato.