Un Verdadero Márquez (MLLP 3)

Capítulo 10: Relación rota.

(15 años antes)
Poco después de nacer Mireia, Marta se enteró de que Loka acababa de ser padre de una niña también. Así que aprovechó el siguiente Gran Premio que había para ir a hablar con él sobre esa noticia que había llegado a sus oídos. Le parecía imposible que no le hubiera nombrado que iba a ser padre. Àlex no aguanta que se hablen, pero podría haber aprovechado cualquier ocasión en la que ha hablado con él en los GPs a los que ha ido para contarle que iba a ser padre y presentarle a su chica que ni siquiera sabía que tenía novia. Quizás ha sido un ligue con el que se le olvidó usar el condón o se le rompió.

Tuvo que usar a Almudena para que la ayudara a distraer a Àlex para que no se diera cuenta de que iba a dar con Loka para hablar con él. Se llevó a Mireia con ella por si le entraba hambre y dejó a Almudena con Joel y los suyos propios.

-¡Hola!
-Hola Marta. Hola princesa.- le dice a Mireia que abre los ojos de par en par al escucharle.- Qué espabilada está Mireia.
-Es que tú espabilas a cualquiera, además, a esta la veo motorizada pronto.
-Me parece haberle oído a Àlex lo contrario.
-Àlex no, pero Marc la sube en cuanto le quitemos el ojo de encima.
-Típico de Marc. Y antes de que preguntes Marta... Sí, es verdad lo de que he sido padre hace pronto. Aunque no está aquí. Pero estoy seguro de que será una muy buena compañera de juegos para Mireia cuando se vean en los GPs.
-¿Con quién?- le pregunta Marta respecto a la madre de la niña.
-No es nadie que conozcas. Ni que vayas a conocer.
-¿No me vas a presentar a la madre de tu hija?
-No se la voy a presentar ni a mi hija Marta. No somos nada, y ella no quería la niña. Pero yo sí, así que ahora soy padre y ella seguirá con su vida. Renunció a ella desde el primer momento en que supo que existía, y está firmado. Así que la niña es mía y solo mía.
-Entiendo.
-No te conté nada porque prefería esperar a que naciera para decirlo. No me fiaba de que realmente me la dejase.

Se acerca más a Loka y le abraza sin aplastar a su hija que la lleva en el canguro encima suyo.

Mireia se queda fija mirando a Loka y este empieza a hacerle tonterías para que se ría con él.

-Le caes bien. No mejor que Guille, que parece que le ha gustado a la enana esta, pero le llamas la atención.
-Pues a ver cuando te presentamos a tu nueva amiga.

Loka busca el teléfono móvil y busca una foto de su hija recién nacida para poder enseñársela a Marta y cuando la encuentra se la enseña.

-Aquí tienes a Mellea.
-Miel... Sí que parece dulce.
-¿Sabes lo que significa?
-Si me guardas el secreto, a Mireia pretendía ponerle un nombre italiano.
-Pero Àlex se negó.
-No llegamos a un acuerdo hasta llegar a Mireia.
-Esa parte me la he ahorrado al ser yo quien le ha elegido el nombre solo.
-Esa parte es la mejor sin duda. La peor es perderte su día a día por trabajar en la otra punta del mundo. A Àlex le cuesta despegarse de Mireia. Es su princesa.
-Mellea está bien cuidada en casa. Su tía sabe cuidarla bien.
-Se le debe caer la baba a Roberta.
-No más que a ti.

Marta deja de mirar la pantalla donde está la foto de la niña y le devuelve al móvil a su amigo. Siempre ha adorado a los bebés. Son tan pequeñitos y adorables, hasta que son tuyos y tienes que aguantar como lloran y no sabes qué le pasa. Compadece a Àlex cuando tuvo que cuidar prácticamente solo a Joel dos meses desde que nació hasta que ella despertó.

La pequeña no deja de intentar alegar y Marta la saca y se la pasa a Loka. Sabe que se muere por cogerla y más ahora que no tiene a su pequeña aquí con él.

-Sé qué quieres cogerla.

Loka coge a Mireia en brazos y se pone a hablarle y a subirla y bajarla hasta que los dos jóvenes escuchan la voz imposible de confundir de Àlex.

-Suelta a mi hija.
-Àlex...
-Ni Àlex ni ostias, Marta. Suelta a mi hija, Locatelli.
-No le va a hacer daño Àlex. Deja de gritarle.
-No te parece poco quitarle a la madre de tu hija su propia hija, sino que tienes que quitarme a mí también a mi hija. Suelta a Mireia ya.
-Àlex...
-¡Cállate Marta! Dame a mi hija ahora mismo.- le dice por último a Loka.

Loka le pasa la niña a Àlex y este se marcha sin más una vez que tiene a su hija en brazos. Aunque vuelve sobre sus pasos cuando ve que Marta no le sigue.

-Y no te vuelvas a acercar a mi mujer o a mis hijos. ¿Entendido?
-À...
-Es lo mejor para todos, Marta. Hazle caso a Àlex.

...

Y eso le tocó hacer a Marta. Loka no volvió a hablarle nunca. Ni siquiera volvió a mirarla jamás. A Joel se le enseñó a no salir corriendo a por Loka a partir de entonces y a Mireia como era una bebé solo se le apartó de Andrea cada vez que estaban en un circuito, al menos hasta que ha pasado el encontronazo en Misano 15 años más tarde de este final de relación tan buscada por Àlex.

Marta no se volvió a hablar con Loka, no a ojos de Àlex. Mireia no oyó nunca nada sobre él, más que su madre tuvo una rara relación con él hasta poco después de nacer ella.

Y Joel sólo oyó desde entonces malas palabras de Locatelli. Aunque no sé creyó nada de lo que le decía Àlex hasta que su hija mayor le mintió y descubrió que le habían tomado el pelo por segunda vez en su vida, aunque esta vez no duró mucho la mentira. No volverá a confiar en nadie que no sea su hermana pequeña o sus dos primos medianos, Leti y Adri.

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Buenas!! Aquí nuevo capítulo. El siguiente el próximo domingo. Espero que os guste.