40. "Colisión"

1.4K 70 97
                                    

Pero, te vas a cuidar, ¿Verdad?

—Claro que me voy a cuidar, mamá—murmuro cautelosa contra el auricular, más precavida aún por las muchas connotaciones que 'cuidar' puede tener. A Joey se le salen un montón de risas a mis espaldas—. Sería un crimen tener veintiocho años y no ser capaz de valerme por mí misma, ¿No crees?

Escucho cómo deja escapar un suspiro largo.

Supongo, hija—musita—. Sólo quiero que todo vaya bien.

—Lo está, y lo va a estar. Descuida.

Bien. Te dejo. Adiós, Rach. Te quiero.

—Te quiero, mamá—una sonrisa me traiciona—. Adiós.

Me quedo viendo un puñado de segundos más el teléfono luego de que lo he devuelto a su base. Mi madre a veces era capaz de preocuparse demasiado, y añadiéndole 'Michael' o 'Moscú' a una nueva noticia para ella el juego se vuelve cientos de veces más complicado. Como quiera, tenía que admitir que yo esperaba una reacción peor; lo ha manejado de maravilla.

Paso ambas manos a través de mi cabello para despejarme, y me pongo de vuelta a terminar de ordenar el equipaje, que los ojos de Monica ya me decían desde hace rato que no le agrada nada el hecho de que todas mis cosas estuvieran regadas por la sala de estar.

—Déjame ver si entendí bien.

Joey se olvida de permanecer observándome desde el comedor, y se aproxima a la estancia con una mirada dubitativa. Por detrás Monica le tuerce el gesto por no tenderle sus platos sucios.

—Dime—continúo empacando. Coloco un par de blusas y un pantalón más a la valija más grande. Casi no le pongo atención.

—Michael te llamó hace unas semanas para asegurarse de que viajarían juntos a Tailandia, ¿Y le has dicho que no?

—Es correcto—asiento con él.

—Y estás empacando—apunta con su índice mis valijas puestas sobre el sofá, cuando le encaro me doy cuenta de que está contemplando toda mi ropa dispersada—. Para demasiados días, parece.

—Sí.

—¿Por qué?

Oh, Dios. A tocar el tema de nuevo.

—Ya te lo expliqué, Joey—me detengo a contemplar un par de blusas de rayón que tiendo frente a mí. No sé si llevar la negra, o la verde. Termino por escoger ambas—. Ése era mi plan desde un principio. Sí que iría con él, pero quería también sorprenderle. Aparecer en dónde sea que él estuviera en cuanto me fuera posible.

—No lo sé, Rach—Monica musita al tiempo en que se gira para unirse a nosotros. Yo trago saliva para prepararme hacia lo que tenga que decir—. No estoy del todo convencida de que haya sido una gran idea. No lo entiendo, cuando le dijiste que no, ¿No se molestó? ¿No se puso triste al menos?

La boca se me seca en ese segundo, y me detengo. Es como si ella me hiciera caer en la cuenta una y otra vez. Cuando le observo, percibo cómo se turbia su mirada.

—Ese es el problema, Mon. No lo sé...—admito con voz queda, un poco débil—. Su voz sonaba ansiosa por el teléfono esa vez, diferente, como si no fuera... en realidad él.

Monica chasquea su lengua y el desagrado se va a su rostro.

—¿Qué te dijo cuando le dijiste que no irías con él?

—No me dijo nada.

—¿Nada?—se le frunce el ceño. Sus ojos entrecerrados amenazan los míos.

Just Good Friends (Michael Jackson Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora