STORYBOOK 2

ENCRUCIJADA DE AMOR 1.4 (SPANISH)

Sin poder evitar que un grito saliera de sus labios, Krist tomó el móvil del suelo y comenzó a correr hasta la puerta de la vivienda. 

Un nuevo golpe llegó a sus oídos en el mismo instante en el que salía al pasillo. Segundos después había cerrado la puerta y corrido hacia las escaleras.

Sólo cuando llegó a la calle, detenido un taxi y ordenado que le llevaran a la casa de Joss fue que se dio cuenta de que no llevaba la cartera consigo... que por no llevar, ni siquiera llevaba zapatos.

Krist gruñó mientras miraba sus dedos, completamente pálidos sobre la esterilla negra del vehículo.

- "¿Por qué...? ¿Por qué me está pasando ésto?"

QUINCE MINUTOS MÁS TARDE...

- "¿Pero estás seguro de lo que dices?" - volvió a preguntar Joss mientras le hacía entrega de una taza de té humeante.

Krist asintió y, sin decir nada más, se llevó la bebida a los labios. Un poco del líquido, sin embargo, cayó sobre sus pantalones a causa de lo mucho que le temblaban las manos.

- "No puedes volver a esa casa..." - gruñó, mientras tanto, su amigo. Todo ello a la vez que seguía dando vueltas por la habitación como si fuera un animal enjaulado.

- "Pero todas mis cosas están allí. Yo..."

Joss le miró con tal expresión en su rostro, que Krist sólo pudo callarse y bajar la mirada hacia la taza que tenía entre sus manos.

- "Mañana me acercaré a tu casa con varios de los guardias de la compañía y recogeremos todo lo que vayas a necesitar.. ahora lo importante es ir a la policía y denunciar ésto".

Krist se mordió el labio inferior para después asentir con cansancio.

Ahora que todo había pasado, comenzaba a sentirse agotado.. como si un gran peso se hubiera colocado, de repente, sobre sus hombros. Incluso un breve bostezo salió de su boca, haciendo que Joss se detuviera en mitad de su caminata para mirarle fijamente.

- "Vete a descansar al cuarto..."

Krist negó con la cabeza mientras que un segundo bostezo se escapaba de sus labios cuarteados.

Joss suspiró y, acercándose a Krist, le tomó de una mano e hizo que se levantara.

- "Descansa un rato mientras yo me ducho y  me visto para ir contigo a la policía..." - susurró mientras comenzaba a tirar del joven hacia uno de sus cuartos de invitados.

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Joss suspiró, observando al policía que, con expresión tranquila, hablaba por teléfono con uno de los detectives que habían ido a la casa de su amigo. Por unos segundos deseó poder gritarle al hombre, exigirle que dejara de sonreirle a su compañera de trabajo y se concentrara en lo que fuera que le estaban diciendo desde el otro lado de la línea.

Sin embargo se mantuvo callado, esperando pacientemente al lado de un Krist que, por cómo se movía en su silla, estaba ya lo suficientemente nervioso por los dos.

- "Cálmate..." - susurró a su amigo mientras colocaba una mano sobre la del joven. Éste le miró con una expresión agradecida en el rostro que, desgraciadamente, desapareció en cuanto vio cómo el guardia se volvía hacia ellos con una expresión seria en su rostro.

- "Ya veo.. ok..." 

Joss tragó con dificultad mientras que Krist simplemente comenzó a palidecer hasta quedar tan blanco como el papel que estaba encima de la mesa.

- "Me temo que no les tengo buenas noticias..." - les dijo finalmente el hombre - " la persona que entró en su casa se llevó algunas de sus pertenencias..."

- "¿Dinero?" - preguntó Krist con voz esperanzada

Sin embargo el hombre negó con la cabeza.

- "Todo su dinero y sus joyas están en la vivienda... faltan sólo algunas fotos suyas y varias prendas..en fin... prendas íntimas suyas".

La piel de Krist se volvió levemente verde, lo que hizo que Joss apretara con fuerza la mano del joven, intentando darle fuerzas.

- "Además... me temo que ninguna puerta ha sido forzada por lo que debe tener las llaves de su casa..." - siguió diciendo el policía tras unos segundos de silencio - " y... bueno... le ha dejado un mensaje..."

Joss, al igual que Krist, miró hacia el papel que el policía acababa de dejar enfrente suya. Allí aparecían garabateadas un par de frases que hicieron que Krist casi se desmayara en la estación de policía.

¡RECUERDA QUE ERES MÍO! 

REGRESARÉ Y NO NOS VOLVEREMOS A SEPARAR, LO JURO

- "Lo encontraremos, no se preocupe..." - musitó el policía - "pero mientras tanto intente no quedarse solo nunca...recuerde que no sabemos quien es...que en realidad, puede ser cualquiera"

Krist, con un suspiro, negó con la cabeza mientras que, con voz temblorosa, comenzaba a contarle al hombre todo lo que sabía sobre Mr. Park.

Mientras Krist respondía a las preguntas del policía, Joss se levantó con la excusa de ir al baño. Sin embargo, nada más salir de la sala, marcó un número y esperó pacientemente a que le contestaran.

- "Hola, verás... ha surgido algo y..me gustaría pedirte un favor..."