Capítulo 103.

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Tn: Ahora, si me disculpas, me gustaría terminar de vestirme. —Estoy respirando fuerte. Muy lentamente, Christopher se retira, su conducta endureciéndose.

Christopher: ¿Es lo que quieres? —susurra.

Tn: Ya no sé lo que quiero. —Mi tono refleja el suyo, y toma un esfuerzo monumental fingir desinterés mientras casualmente meto las puntas de los dedos en mi crema hidratante y las esparzo suavemente sobre mi cara. Me miro en el espejo. Ojos cafés abiertos, cara pálida, pero mejillas sonrojadas. Lo estás haciendo bien. No te eches atrás ahora. No te eches atrás ahora.

Christopher: ¿No me quieres? —murmura. Oh, no... oh no, no lo hagas, Vélez .

Tn: Estoy aquí todavía, ¿no? —replico. Cogiendo mi máscara, aplico un poco primero a mi ojo derecho.

Christopher: ¿Has pensado en irte? —Sus palabras son apenas audibles.

Tn: Cuando el marido de una prefiere la compañía de su ex-amante, normalmente no es una buena señal. —Puse el desdén al nivel justo, evadiendo su pregunta. Ahora pintalabios. Hago un puchero con mis brillantes labios a la imagen del espejo. Mantente fuerte, Tn... um. Recojo mis tacones, me dirijo a la cama a zancadas una vez más, y rápidamente me los pongo. Síp. Me veo bien sólo en ropa interior y tacones. Lo sé. De pie, lo miro desapasionadamente. Parpadea hacia mí, y sus ojos viajan rápidamente y avariciosamente por mi cuerpo.

Christopher: Sé lo que estás haciendo —murmura, y su voz ha adquirido un borde caliente y seductor.

Tn: ¿Sí? —Y mi voz se parte. No, Tn... aguanta.
Él traga y da un paso adelante. Doy un paso atrás y pongo mis manos en alto. — Ni lo pienses, Vélez —susurro amenazadoramente.

Christopher: Eres mi esposa —dice suavemente, en tono amenazador.

Tn: Soy la mujer embarazada que abandonaste ayer, y si me tocas gritaré hasta tirar la casa abajo. —Sus cejas se levantan en incredulidad.

Christopher: ¿Gritarías?

Tn: Altísimo. —Entrecierro los ojos.

Christopher: Nadie te oiría —susurra, su mirada intensa, y brevemente recuerdo nuestra mañana en Aspen. No. No. No.

Tn: ¿Estás intentando asustarme? —murmuro sin aliento, deliberadamente tratando de descarrilarlo.
Funciona. Se queda quieto y traga.

Christopher: No era mi intención. —Frunce el ceño.
Apenas puedo respirar. Si me toca, sucumbiré. Sé el poder que ejerce sobre mí y sobre mi traidor cuerpo. Lo conozco. Me agarro a mi enfado. — Tomé algo con alguien con quien solía ser cercano. Despejamos la atmósfera. No la voy a volver a ver otra vez.

Tn: ¿La buscaste?

Christopher: No al principio. Intentaba ver a Flynn. Pero me la encontré en el salón.

Tn: ¿Y pretendes que me crea que no la vas a volver a ver? —No puedo contener mi furia mientras le siseo—. ¿Qué hay de la siguiente vez que cruce alguna línea imaginaria? Esta es la misma discusión que tenemos una y otra vez. Como si estuviésemos en algún tipo de rueda de Ixion. Si la cago otra vez, ¿vas a volver corriendo a ella?

Christopher: No la voy a volver a ver —dice con una finalidad helada—. Ella finalmente entiende cómo me siento. — Parpadeo hacia él.

Tn/ ¿Qué significa eso? — Se estira y pasa una mano por su pelo, exasperado y enfadado y mudo. Intento una táctica diferente. —¿Por qué puedes hablar con ella y no conmigo?

Christopher: Estaba enfadado contigo. Como lo estoy ahora.

Tn: ¡No lo dices! —replico—. Bueno yo estoy enfadada contigo ahora mismo. Enfadada contigo por ser tan frío e insensible ayer cuando te necesitaba. Enfadada contigo por decir que me quedé embarazada deliberadamente, cuando no lo hice. Enfadada contigo por traicionarme. —Consigo reprimir un sollozo. Su boca se abre de impacto, y cierra los ojos brevemente como si lo hubiera abofeteado. Trago. Tranquilízate, Tn. — Debería haber seguido mejor las citas de mis inyecciones. Pero no lo hice a propósito. Este embarazo es un shock para mí también —murmuro, intentando adoptar un mínimo de cortesía—. Podría ser que la dosis fallara. — Me mira hostilmente, en silencio.
—Ayer realmente la cagaste —susurro, dejando salir mi enfado—. He tenido un montón con lo que lidiar las últimas semanas.

Mi esposo...el diablo. (Christopher Vélez y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora