Capítulo 63.

2.6K 122 6
                                    

Elliot aplaude cuando entramos. —¡Eso sin duda fue un servicio rápido y a bordo! —Se burla. Christopher lo ignora.

Stephan: Por favor, damas y caballeros, permanezcan sentados dado que pronto comenzará el despegue.

Abrazo a Kathe y Paola y saludo a Ethan y Elliot antes de sentarme y acurrucarme junto a Christopher. Pone su mano en mi rodilla y la presiona cariñosamente. Parece relajado y feliz a pesar de que tenemos compañía. Me pregunto por qué no puede ser siempre así, nada dominante.

Christopher: Espero que hayas empacado tus botas de escalar —dice con un tono cálido.

Tn: ¿No vamos a esquiar?

Christopher: Eso sería un desafío en agosto —dice divertido. — Oh, claro.

Elliot: ¿Tú esquías, Tn? —Nos interrumpe.

Tn: No. — Christopher mueve su mano de mi rodilla para darle palmaditas.

Elliot: Estoy seguro que mi hermanito puede enseñarte. —Elliot me guiña un ojo—. También es bastante rápido en las pendientes. — Y no puedo evitar sonrojarme. Cuando miro a Christopher , le está dando una mirada impaciente a Elliot, pero creo que intenta contener la risa. El avión comienza a avanzar en la pista. La azafata explica los procedimientos de seguridad en un tono claro y cantarín pero sin dejar de ver a Christopher, realmente es bonita. Alzó una ceja volteando a verla.

Kathe: ¿Estás bien? —me pregunta Kathe intencionadamente—. Quiero decir, ¿siguiendo el negocio Hyde? — Asiento. No quiero pensar ni hablar de Hyde, pero Kathe tiene otros planes. —¿Y por qué enloqueció de rabia de esa forma? —pregunta, llegando al fondo del asunto como sólo ella puede. Se quita el cabello de la cara como si se preparara para investigar el asunto. Mirándola fríamente, Christopher se encoge de hombros.

Christopher: Lo despedí —dice llanamente.

Kathe: ¿Oh? ¿Por qué? —Kathe tuerce la cabeza, y sé que está en su estilo Nancy Drew.

Tn: Intentó hacer algo conmigo —murmuro. Intento patear a Kathe bajo la mesa, pero fallo. ¡Mierda!

Kathe: ¿Cuándo? —Kathe me mira.

Tn: Hace mucho tiempo.

Kathe: ¡Nunca me lo dijiste! —Espeta. Me encojo de hombros, disculpándome. — No puede haber sido sólo por eso, honestamente. Quiero decir, su reacción fue muy exagerada. —Prosigue Kate, pero ahora dirige su pregunta a Christopher —. ¿Es mentalmente inestable? ¿Y qué hay de toda la información que tiene sobre ti Vélez? —Que interrogue así a Christopher me pone nerviosa, pero ella ya sabe que yo no sé nada, por lo que no me puede preguntar. La idea me molesta.

Christopher: Creemos que hay una conexión con Detroit. —Se limita a decir. Demasiado limitado. Oh no, Kathe. Por favor, déjalo por ahora.

Kathe: ¿Hyde también es de Detroit? —Christopher asiente. El avión acelera, y aumento mi agarre en la mano de Christopher. Me mira reconfortantemente. Sabe que odio los despegues y aterrizajes. Aprieta mi mano y su pulgar acaricia mis nudillos, para calmarme.

Elliot: ¿Qué sabes tú sobre él? —pregunta Elliot, ignorando el hecho de que estamos arriba de un diminuto avión que está haciendo una carrera en la pista, a punto de lanzarse al cielo, y también ignora la mirada exasperada de Christopher a Kathe . Kathe se inclina, escuchando atentamente.

Christopher: Esto tiene que quedar fuera de los registros. —Le dice Christopher directamente a Kathe. Ella hace una fina línea con sus labios. Trago saliva. Oh mierda. — Sabemos poco sobre él. —Continúa Christopher —. Su padre murió en una pelea en un bar. Su madre bebía hasta perder la conciencia. Él estuvo entrando y saliendo de hogares adoptivos de niño... y también de problemas. Más que nada asaltar coches. Pasó tiempo en la correccional de menores. Su mamá se curó con un programa, y Hyde se transformó. Ganó una beca para Princeton.

Mi esposo...el diablo. (Christopher Vélez y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora