Capítulo 99. (5/6)

1.3K 68 3
                                    

exasperada conmigo y con Hanna... aunque muy en lo profundo sé que no puedo culparla realmente.
Con desespero enciendo el ordenador. Hay un e-mail de Christopher.
____________________
De: Christopher Vélez.
Asunto: Extrañándote.
Para: Tn Vélez.

Sra. Vélez.
He vuelto a la oficina por sólo tres horas, y ya te extraño. Espero que Ray se haya establecido en su nuevo cuarto sin problema Mamá va a verlo esta tarde y chequearlo. Te recogeré como a las seis, y podemos ir a verlo antes de irnos a casa.
¿Suena bien?

Tu esposo que te ama
Christopher Vélez.
______________________
Escribo una rápida respuesta.
_______________________
De: Tn Vélez.
Asunto: Extrañándote.
Para: Christopher Vélez.

Seguro, besos.
________________________
________________________
De: Christopher Vélez.
Asunto: Extrañándote.
Para: Tn Vélez.

¿Estás bien?
__________________________

No, Christopher, no lo estoy. Me estoy enloqueciendo por estar enloqueciendo. No sé que hacer. Pero no te diré vía email.
__________________________
De: Tn Vélez.
Asunto: Extrañándote.
Para: Christopher Vélez.

Bien. Sólo ocupada. Nos vemos a las seis.
__________________________

¿Cuando se lo diré? ¿Esta noche? ¿Quizá después del sexo? Quizá durante. No, eso puede ser peligroso para los dos. ¿Cuando esté dormido? Pongo la cabeza en mis manos. ¿Qué voy a hacer?

Christopher: Hola —dice Christopher con cautela mientras me subo a la camioneta. —¿Qué va mal? —frunce el ceño. Niego con la cabeza mientras Mauricio se dirige al hospital.

Tn: Nada. —¿Quizás ahora? Podía decirle ahora cuando hay un espacio contenido y Mauricio está con nosotros.

Christopher: ¿El trabajo está bien? —continua Christopher para probar.

Tn: Sí. Está bien. Gracias.

Christopher: ¿Tn, qué va mal? —su tono es un poco forzado, y me acobardo.

Tn: Sólo te he extrañado, eso es todo. Y he estado preocupada por Ray. —Christopher se relaja visiblemente.

Christopher: Ray está bien. Hablé con mamá esta tarde y esta impresionada con su progreso. —Christopher toma mi mano—. Dios, tu mano esta fría. ¿Has comido hoy? — Me sonrojo. —Tn—me regaña Christopher, molesto. — Bueno, no he comido porque sé que vas a enloquecer cuando sepas que estoy embarazada.

Tn: Comeré esta tarde. No he tenido tiempo de verdad. — Niega con la cabeza en frustración.

Christopher: ¿Quieres añadir "alimentar a mi esposa" a la lista de deberes?

Tn: Lo siento. Comeré. Simplemente ha sido un día extraño. Tú sabes, mudar a papá y todo eso. — Sus labios se presionan en una dura línea, pero no dice nada. Miro a la ventana. ¡Dile! Me susurra mi subconsciente. No. soy un cobarde. Christopher interrumpe mi ensoñación.

Christopher: Quizá tenga que ir a Taiwan.

Tn: Oh. ¿Cuándo?

Christopher: Al final de esta semana. Quizá la próxima semana.

Tn: Bien.

Christopher: Quiero que vengas conmigo. — Trago.

Tn: Christopher, por favor, tengo trabajo. No vamos a repetir este asunto otra vez. — Él suspira y hace pucheros como un adolescente malhumorado.

Mi esposo...el diablo. (Christopher Vélez y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora