Capítulo 11.

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Christopher termina su llamada y regresa a sentarse a mi lado,sonríe y me acomoda el pelo por detrás de la oreja.

Tn:¿Esta todo bien? --Digo y doy un pequeño sorbo a mi bebida.

Christopher:Todo perfecto --Su tono es suave,creo que la llamada que ah recibido lo tranquilizó de alguna manera.

Tn:Bien --Sonrió y agachó la cabeza avergonzada por que el no deja de mirarme.

Christopher se pone de pie y me tiende la mano,lo miro algo confundida pero dejo mi bebida en la mesita y tomo su mano para que el me conduzca hasta nuestro dormitorio,Christopher se quita la camisa y la tira en el suelo,me toma de la barbilla y tira de ella para que deje de morderme el labio inferior.

Christopher:Mejor así. ---Me guiña el ojo

Se gira y camina hasta el armario en el que guarda su ropa saca dos pares de esposas de metal ¡Esposas! nunca ha usado esposas.¿Dónde demonios va a enganchar las esposas? Se vuelve y me mira fijamente con los ojos oscuros y brillantes.

Christopher:Estas pueden hacerte daño se clavan en la piel si tiras con demasiada fuerza —dice levantando un par para que lo vea—.Pero tengo ganas de usarlas contigo ahora,toma —dice acercándose y pasándome uno de los pares—. ¿Quieres probártelas primero?

Tn:Sí. ---Christopher me observa atentamente.

Tn:¿Dónde están las llaves? —Mi voz tiembla.

Abre la mano y en su palma aparece una pequeña llave metálica. Me acaricia la mejilla con el dedo índice y va bajando hasta mi boca. Se acerca como si fuera a besarme.

Christopher:¿Quieres jugar? —me dice en voz baja y toda la sangre de mi cuerpo se dirige hacia el sur cuando el deseo empieza a dispersarse en lo más profundo de mi vientre.

Tn:Sí —jadeo y él sonríe.

Christopher:Bien. —Me da un beso en la frente que es poco más que un roce— Si dices «Para» no sirve de nada porque lo vas a decir varias veces, pero seguramente no querrás que lo haga. —Me acaricia la nariz con la suya, el único contacto entre nosotros.

El corazón se me acelera. Mierda… ¿Cómo puede ponerme así solo con las palabras?

Tn:De acuerdo.

Christopher:Esto no va a doler pero va a ser intenso,muy intenso, porque no te voy a dejar moverte. ¿Vale?

Oh, Dios mío eso suena excitante mi respiración se oye muy fuerte. Gracias a
Dios que estoy casada con este hombre, de lo contrario esto me resultaría muy vergonzoso. Bajo la mirada y noto su erección.

Tn:Vale. —Apenas se oye mi voz cuando lo digo.

Christopher tomo mi vestido playero, me lo quita por la cabeza y lo tira al suelo.
Extiende la mano y le devuelvo las esposas. Pone las dos esposas en la mesita de noche y retira la colcha de la cama de un tirón, arrojándola luego al suelo.

Christopher:Volteate.

Me giro y me suelta la parte de arriba del biquini, que cae al suelo.

Christopher:Mañana te voy a grapar esto a la piel —murmura.

Después me quita la goma del pelo para soltarlo. Me lo agarra con una mano y tira suavemente para que dé un paso atrás hasta quedar contra su cuerpo. Contra su pecho y contra su erección.
Gimo cuando me ladea la cabeza y me besa el cuello. —Has sido muy mala hoy—me dice al oído provocándome estremecimientos por todo el cuerpo.

Tn:Sí—respondo en un susurro.

Christopher:Mmm. ¿Y qué vamos a hacer con eso?

Tn:Aprender a vivir con ello —digo en un jadeo. Sus besos suaves me están volviendo loca. Sonríe con la boca contra mi cuello.

Christopher:Ah, señora Vélez. Siempre tan optimista.

Con un movimiento repentino me agarra de la cintura, se sienta en la cama y me tumba boca arriba en la cama y él me mira fijamente con sus ojos de un Cafe obscuro. Estoy a punto de empezar a arder.

Christopher:¿Sabes lo preciosa que eres? —Me roza el muslo con las puntas de los dedos de forma que me
cosquillea… todo. Sin apartar los ojos de mí, se levanta de la cama y coge los dos juegos de esposas. Me agarra la pierna izquierda y cierra una de las esposas alrededor de mis tobillos. ¡Oh! ahora tengo un par de esposas en mi tobillos.

Christopher:Siéntate —me ordena y yo obedezco inmediatamente—. Ahora pasame tus manos.

Parpadeo y extiendo las manos y pone las esposas. Me toma la barbilla y me da un beso suave y húmedo en los labios antes de ponerme un antifaz sobre los ojos ¿Que?. No veo
nada y solo oigo mi respiración acelerada y el agua chocando contra los costados del yate, Oh, madre mía. Estoy muy excitada… ya.

Christopher:¿Estás lista ______?

Tn:Sí.

Christopher:Bien,ahora —dice Christopher con un jadeo— te voy a follar hasta que grites.

¿Qué? Todo el aire abandona mi cuerpo me agarra los dos tobillos y me empuja hacia atrás hasta que caigo de espaldas sobre la cama y las esposas me aprietan la carne si tiro de ellas. Tiene razón, se me clavan casi hasta el punto del dolor… Me siento muy rara, atada, indefensa y en un barco Christopher me separa los tobillos y yo suelto un gruñido,me besa el interior de los muslos y quiero retorcerme pero no puedo,no tengo posibilidad de mover la
cadera. Mis pies están suspendidos en el aire. No puedo moverme.

Christopher:Tendrás que absorber todo el placer, ________. No te muevas —murmura mientras sube por mi cuerpo
y me besa a lo largo de la cintura de la parte de abajo del biquini. Suelta los cordones de ambos lados y el
trocito de tela cae. Me besa el vientre y me muerde el ombligo.

Tn:Ah —suspiro,esto va a ser duro… No tenía ni idea. Va subiendo con besos suaves y mordisquitos hasta
mis pechos.

Christopher:Shhh… —Intenta calmarme—. Eres preciosa amor.

Vuelvo a gruñir de frustración normalmente estaría moviendo las caderas, respondiendo a su contacto con un ritmo propio pero no puedo moverme. Gimo y tiro de las esposas. El metal se me clava en mi piel.

_______________
HOLAAAAAAAAA,por fin regresé💕
Perdón,mi celular no queria abrir esta app pero ya hice de TODO para poder entrar de nuevo y en cuanto pude aproveche para subirles este capítulo,aunque se que esta muuuuy fuerte....pero ¿les gusta? Díganme que si por favor😢
Bueno pues ahí les deje el capítulo de hoy,nos leemos mañana lindas💋

~Jadara~♡👑

Mi esposo...el diablo. (Christopher Vélez y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora