47.¿Espadas gemelas?.

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Si tienes algo que alcanzar ojalá sea yo, porque para mi tu eres lo único.

—Ginny... la espada.

Harry parecía consternado, la tranquilidad que se aproximaba era nula, me senté a su lado y mire a Hermione.

—¡Lo se, lo se!— metió la mano en su pequeño bolso— donde está...— continuó revolviendo el interior hasta meter todo el brazo—¡Aquí está!.— apretó los dientes mientras tiraba con fuerza de algo que se encontraba hasta las profundidades de su bolso— si alguien sabe del cambio de la espada es Phinias Nigellus, su retrato está a un lado de la urna.

— A menos que estuviera dormido— dije callándome al instante cuando vi que Hermione se arrodillaba frente al lienzo y comenzaba a hablar.

—¿Phinias?, señor Nigellus, ¿está ahí?, ¿hola? — nadie aparecía detrás del recuadro— Señor Black podríamos hablar con usted ¿por favor?.

—Pedir las cosas por favor siempre ayuda— dijo con una voz fria, apareció al instante.

Entonces Hermione exclamó:

—Obscuro.

Y un pañuelo tapo los ojos de Phinias, impidiendo que este pudiera ver absolutamente nada del lugar en el que nos encontrábamos.

—¿Pero que?...¿Que se ha...?, ¿Que esta ha...?.

—Lo siento mucho profesor Black— dijo apenada— pero es una precaución necesaria.

—¡Retíreme está añaduria!, ¡usted está destruyendo una obra de arte!, ¿donde estoy?.

—No importa donde estemos— dijo Harry y el señor Nigellus se quedó quieto.

—¿Me equivoco, o esa es la voz del escurridizo Potter?.

—Podría serlo— dije tratando de mantener el interés del señor Nigellus— Necesitamos hacerle unas preguntas acerca de la espada de Gryffindor.

—¡Ah, vaya!— dijo moviendo la cabeza de un lado a otro, alzando la mirada de vez en cuando para ver a Harry— esa chiquilla estupida actuó de un modo muy imprudente...

—¡No hable así de mi hermana!— le grito Ron y Phinias alzó las cejas con altanería.

—¿Quien más está aquí?— pregunto aún alzando y moviendo la cabeza para poder ver— su tono me desagrada, esa chica y sus amigos fueron imprudentes, mira que robarle al director.

—¡No estaba robando!— dije— esa espada no es de Snape.

—Pero pertenece al colegio del profesor Snape, ¿acaso tenía esa Weasley derecho sobre ella?, merece el castigo que obtuvo al igual que ese Longbottom y la chiflada de Lovegood.

—¡Neville no es un idiota y Luna no está chiflada!— salto Hermione a su defensa.

—¿Donde estoy?— Repitió Nigellus tratando de quitarse la venda nuevamente— ¿donde me han traído?, ¿porque me han sacado de mi hogar?.

—Eso no importa— le dije— ¿como fue que castigaron a Ginny y a los demás?.

—El profesor Snape los mando al bosque prohibido con ese idiota gigantón.

Destruida. (Draco Malfoy). [Libro#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora