—¿Que si no lo se?—se alejo- ¡Claro que lo se!—Draco miro a lo lejos—Tal vez lo mejor sería olvidarla.

—¿Olvidarla pequeño idiota?, ¿y olvidar eso que te hace feliz?, aquello por lo que vives o sobrevives, ¿¡ESTAS DEMENTE!?.

—Ma...

—Tienes que luchar por ella, no la pierdas Draco, no se te ocurra hacer algo así.

—Yo...

Pero no podía decir nada, el echo de que su madre lo apoyará en algo de tal magnitud lo hacía sentirse tan agradecido con ella, lo hacía sentirse feliz, por un momento en su vida después de tanta tragedia Draco parecía sonreír.

—Tienes razón, no voy a olvidarla porque no puedo, Madre... quiero estar con ella, yo...

—Lo estarás pequeño, no lo dudes- acaricio su cara- no hay duda de eso, te lo juro.

Draco sonrió.

—Lo se.

—Ahora entremos, necesitas dormir.

[...]

Y el silencio se apoderaba de la habitacion, el pensar en lo que podría pasar los minutos siguientes la hacían estremecer, Harry había subido a la habitación y ella se había quedado sola abajo porque pensaba que el subir habría infligido en la privacidad de el.

Entonces sólo se recargo en la mesa, mientras contaba los minutos y escuchaba con atención cada sonido que de alguna manera aparecía en algún lugar, los minutos pasaban más lentos que de costumbre para ella, parecía que las manecillas del reloj que se encontraba colgado en la pared frente a ella no se movían.

Camino a la cocina, tal vez un vaso de jugo disminuiría su nerviosismo, abrió con cuidado el refrigerador como aquellas veces que lo había echo de madrugada mientras todos dormían, tomó la caja de jugo y antes de acordarse de que ya nadie estaría en esa casa se la enpino tomándose todo el contenido.

Pero entonces un ruido se intensificó, afuera el de una moto casi chocando se hizo notar, Harry bajo corriendo mientras _________ había llegado ya a la puerta y estaba lista para abrirla, por fin habían llegado.

Empezaron a aparecer figuras a la vista cuando los Encantamientos Desilusionadores se iban alzando.

Dominando la escena estaba Hagrid, llevando un casco y guantes y sentado a horcajadas en una enorme motocicleta con un sidecar negro adjunto.

A su alrededor los demás estaban desmontando de escobas y, en dos casos, de esqueléticos y negros caballos.

Abriéndo de golpe la puerta trasera, se lanzaron entre ellos.

Hubo un grito general de saludo mientras Hermione les lanzaba los brazos alrededor y Ron le palmeaba la espalda a Harry, Hagrid dijo.

—¿Todo bien, chicos? ¿Listos para partir?.

—Definitivamente, —dijo Harry, sonriendo a todos ellos-.

—No puedo esperar—contestó emocionada.

Al fin saldría de ese lugar.

—¡Pero no esperabamos a tantos de Ustedes!

—Cambio de planes,—gruñó Ojoloco, que sujetaba dos enormes sacos, y cuyo ojo mágico estaba girando del cielo oscurecido a la casa y el jardín con mareante rapidez—. Pongámonos a cubierto antes de hablar de ello.

Y hasta atrás estaban ellos, juntos y sonriendo mientras esperaban ser notados.

Fred y George.

_______ corrió sin pensarlo junto a ellos mientras los demás entraban a la casa, beso la mejilla de cada uno con emoción.

—¡No creí verlos tan pronto chicos!.

—¿Quien crees que te protegerá?—pregunto Fred.

—¿No creiste que no vendriamos a uno de los momentos más grandes de tu vida?.

—Tal vez el único emocionante—Balbuceo.

—¡Callate Fred!—dijo golpeando sus costillas.

—Sabes que es broma, pequeña.—La abrazo.

—Entonces, ¿Entramos?—gruñó George.

—No te enojes —lo abrazó también.—Los amo chicos.

—Si, Si, "los amo chicos", ¡eso dirán cuando los maten!—Ojoloco los separo—¡Ahora entren o los metere de una patada!.




Destruida. (Draco Malfoy). [Libro#2]Where stories live. Discover now