Returning Home

Only you...

Después de que Will les contara toda la historia de su reconciliación, con una que otra intervención por parte de Nico, los chicos procedieron a hacer preguntas, mientras orinaban, se bañaban (porque hacía un puto calor de mierda, palabras de Nico), se vestían y se cepillaban los dientes. Leo era quién más preguntas hacía, Jason quien casi no preguntaba nada, y Frank y Percy estaban en el intermedio.

Cuando tomaron por satisfechas todas las dudas, Percy los llevó a desayunar a un restaurante que estaba tan lejos de su casa, como el resto de civilización en Honolulu. Jason fue el primero en mostrarse un tanto preocupado por el aislamiento al cual se sometía Percy, pero, cuando lo mencionó, Jackson solo se encogió de hombros y dijo que "así estaba mejor", dando el tema por zanjado después de eso. Percy solía saludar a todas las personas que conocía en el camino, pero tan pronto como entraron al restaurante, fue evidente que no era uno que visitara con frecuencia, ya que lo atendieron como a un cliente más y no como a alguien especial.

—¿Es nuestro restaurante favorito?—preguntó Leo, simplemente en búsqueda de información, ya que Percy estaba anormalmente silencioso.

—No, pero, ponen buena música aquí —contestó, esta vez mostrando una sonrisa— Sentémonos por allá, para tener una buena vista del salón. A veces las personas bailan aquí.

—¡Oh! ¡Genial! —dijo Will, quien ya había superado por completo su mal humor mañanero por haber sido despertado con un baldazo de agua fría— Me siento con ganas de bailar. ¡Suena estupendo!

Lo dijo con efusión y una sonrisa sobre los labios. Sin embargo, si Nico lo escuchó, hizo como que no, pero lo más probable era que no lo hubiera escuchado en absoluto, ya que estaba demasiado ocupado quejándose del "maldito calor" que hacía en ese "infernal lugar" y "maldito seas unas cuantas veces Frank Zhang".

Existió un momento de silencio, dónde el grupo de amigos se quedaron esperando a que Nico dijera algo, lo que fuera, incluso Will lo miró de soslayo como esperando alguna reacción por su parte, sin embargo, Nico no se dio por enterado en lo más mínimo.

Por lo tanto, Percy tomó su lugar dentro del grupo de amigos, como persona que cambia de tema en los momentos más incómodos y les dijo:

—De aquel lado hay una mesa grande, ¿vamos?—y no esperó a que los demás contestaran, sino que simplemente avanzó en la dirección señalada. Como era obvio, los otros lo siguieron.

Era una mesa relativamente apartada, ni muy cerca de la cocina, ni muy lejos. Estaba al lado de una ventana grande, por medio de la cual podían ver hacia la parte de atrás del restaurante y apreciar la naturaleza, pero no sería sencillo que alguien los mirara a ellos desde allí, ya que el área era privada y por tanto muy poco transitada. Todo parecía estar preparado muy convenientemente para pasar desapercibidos, como si Percy temiera que algún reportero fuera a saltar sobre ellos para preguntarle sobre alguna posible nueva controversia ambiental.