Blanco y negro (Kayn x Jinx) (Yasuo x Sona)

E x t r a 4

Ingresaron con aire presuntuoso al gran salón que se extendía delante de ellos. Decorado con delgados cristales vaporosos de distinto largo que descendían desde el techo, la iluminación del salón cambiaba suavemente de colores azules obscuros hasta verdosos, mostrando cierto aire de sofisticación con un toque del espacio espectral; colocadas cada cierto trecho, había mesas de distintos juegos  de azar y al costado izquierdo se encontraba una inmensa mesa de bufet con vistosos platos y demás bocadillos, finalmente, muy al fondo, estaba una larga barra de bebidas flotando elegantemente.

— ¿Listos? — susurró Yasuo a su minúsculo comunicador disimulado en un pendiente que se había puesto.

— ¿Cuándo no estoy lista? — Jinx rió. — ¡Como extrañaba hacer esto!

— Estoy en posición, capitán — Malphite hablo.

Yasuo miro hacia Sona, que le devolvió una mirada confiada mientras permanecía sujeta de su brazo derecho.

— Pues que empiece la diversión, camaradas.

El capitán de la Morning Star y Sona descendieron las escaleras que guiaban hacía el salón. Él vestía un traje formal negro, una camisa azul marino, tenía su cabello recogido en una coleta baja y portaba un bastón elegante en el cual disimiló a Melodía; caminaba con gran aire de suficiencia y elegancia, dejando ver la educación que había recibido en su antigua vida. Por su parte, Sona llevaba puesta un vestido verde oscuro que se le ceñía hasta la cintura y luego caía elegantemente hasta sus pies; el cuello del vestido iba de forma triángular desde su propio cuello hasta su pecho, la espalda era descubierta y portaba un delgado chal a juego acomodado por sus antebrazos pasando por detrás de su cintura.

— Sona, las acompañantes de un magnate del Imperio mueven más las caderas — dijo Jinx con un tono de picardía.

La piloto estaba al otro extremo del salón, vistiendo un uniforme de camarera que, gracias al cielo, era una camisa blanca simple con pantalón negro. Se paseaba lentamente entre los invitados, con una charola repleta de comida que ofrecía a los demás de vez en cuando.

— Jinx, tu deja de comerte los bocadillos — le hizo recuerdo Yasuo.

— Colarse en fiestas de autoridades imperiales es lo mejor — lo ignoró. — ¿Quién diría que tu encajarías tan bien aquí, Yas? ¡Debiste ver la primera vez que lo hicimos! Yasuo gano un montón de créditos y muchas chicas le...

— Vuelve a lo tuyo Jinx — el tonó de Yasuo dejó en claro que no continuaría.

Malphite ahogo una risa; él estaba fuera del salón, haciéndose pasar por uno de los tantos sujetos que llevaban las provisiones, adornos y demás por todas partes.

Sona observaba todo con detalle, era la primera vez que estaba en un ambiente tan rico y extravagante, no quería perderse ningún detalle. Un poco cohibida por la inmensa cantidad de personas y energía que había, se apretujó aún más contra el brazo de Yasuo, que la miró algo preocupado.

— ¿Todo bien, Sona?

"Es solo que no estoy acostumbrada a este tipo de eventos", le respondió con calma.

— Tranquila, Sona — Jinx paso por su lado casualmente. — Sólo ganaremos algunos créditos en el casino y nos marcharemos lo antes posible. ¡Además el moño que te hizo Malph te queda bien! Deberías recogerte el cabello más a menudo.

Sona asintió, después de todo sabía que no podían pasarse la vida gastando el ora, pues tarde o temprano sería sospechoso que una tripulación tan pequeña tuviera ora nivel 10 siempre a su alcance; así que entre todos habían acordado que era mejor conseguir algo de créditos de manera más disimulada.