Capítulo 77

578 58 54
                                    

— Jinx, ¿estás segura que el capitán te dio permiso?

— Pero por supuesto, Malph.

La piloto bajó de un salto del peculiar montículo y se colocó junto a Malphite, detrás del fuerte que ella misma había construido con montones de basura y chatarra en medio de aquel terreno baldio, alejado por tan solo 50 metros de la Morning Star.

— ¿En serio te permitió colocar media docena de explosivos de titany en un montón de residuos de lo que se llamaba "pólvora"?

— Malph, Malph — soltó un suspiro y le habló como a un niño de 3 años. — Desde la antigüedad, la gente ha buscado nuevas y mejoradas formas de hacer explotar las cosas, además de matarse entre sí, claro; y debemos considerarnos afortunados de haber encontrado tanto de la polvota: ¡Fue una de las primeras invenciones diseñadas para ello!

— "Pólvora", Jinx.

— Sí, como sea. ¿Listo? A la una, a las dos y...

Malphite le quitó el detonador y se lo tragó.

— ¡Malphite! —  se subió a sus hombros y empezó a golpearlo. — Devuélvemelo en este instante.

— Ya es tarde.

— ¡Vas a dármelo así tengas que defeca...!

— Iré a preguntarle al capitán y luego veremos.

— Aguafiestas.

Los dos se encaminaron hacia la nave. Cuando entraron, se desplazaron entre el más completo caos que la tripulación jamás había visto: basura, restos de comida y de aparatos a medio armar atestaban todos los pasillos desde la misma entrada y así continuaba por toda la nave, hasta el puente de mando; en medio de tanto caos, hacía días que nadie había visto a Lagarto Espacial.

— Creo que el capitán salió, Jinx — dijo Malphite mientras rebuscaba entre la montaña de basura que le llegaba hasta el pecho.

— No lo creo — abrió la pestilente heladera. — Falta el kilo de helado de fresa y la botella de cerveza demaxiana.

Se dirigieron al cuarto del capitán, haciendo a un lado montones de recipientes vacíos de helado, papas fritas y golosinas, además de botellas vacías de todo tipo de bebidas alcohólicas.

— Vaya, no había visto así a Yasuo desde que nos contrató.

Jinx levantó uno de los recipientes de helado tamaño familiar, del cual surgió una especie de rata con 6 patas, completamente pelona.

— En ese entonces solía deecir que nosotros lo llevamos a la depresión y que terminaríamos por conducirlo a la tumba¡Bah! ¿Qué teníamos de malo? Dramático.

— Dirás que dijo que tu lo harías. ¿Capitán? — Malphite llamó a su puerta, que se deslizó pesadamente gracias a toda la basura acumulada contra esta.

Adentro podía verse una tenue luz azulada proveniente de una lámpara de iones pequeña, que alumbraba un círculo en medio del cual Yasuo estaba sentado. Apoyado en un montón de cojines, con las piernas estiradas, su cabello completamente desordenado y con nada más que ropa interior; el capitán de la Morning Star pasaba lentamente las hojas de una novela romántica, intercalando bocados de helado, cuyo contenedor tenía a un costado, y tragos de cerveza, cuya botella tenía en la vaina de su espada.

— Capi...

— ¡Sh! — poniendo su dedo índice sobre sus labios, le indicó a Malphite que guardara silencio.

Blanco y negro (Kayn x Jinx) (Yasuo x Sona)Where stories live. Discover now