Quisiera Amarte: Nuestra Historia De Amor (Milo x Camus)

~ Capítulo 82: Los celos ~

Hola (n.n)/ Un nuevo capítulo, espero sea de su agrado. Se me olvidó comentar que La personaje nueva será la última en salir en el acto dos con papel en la historia. Los próximos que salgan ya son parte importante del acto 3. La descendencia. Les puedo asegurar que las apariencias engañan 😈 Sobre el diablito y angelito se me ocurrió porque así estuve la otra semana con hacer o no hacer lo que se viene. 😂 El jueves se viene un capítulo con humor para apaciguar la tormenta que se avecina ⛈ La mujer que sale es del Gaiden de Dégel por si acaso no la conocían y creo que ya sospecharan algo 😏

Todos los créditos a los autores de las imágenes del capítulo en la portada.

Muchas gracias por sus comentarios, leídos y votos.

Sayorana (n.n)/ Hasta el jueves 😘💤😴🌙

La vida para Aiacos ha estado tranquila. De vez en cuando va de visita a la mansión de los Acuario a ver a los gemelos y a Surt. Aunque se le hizo la propuesta que vaya a vivir con ellos él la rechazó si está lejos de Surt mejor. Quiere olvidarlo de una o otra forma, aunque se le metió profundamente en el corazón y ahora le cuesta sacarlo. Pero tiene que hacerlo por su bienestar. No han hablado casi y no piensa hablar con él todavía hasta que tenga el valor suficiente. Quien diría que él siendo alguien directo y serio le dé pena hablar con un doncel. En su vida pasaron donceles y algunos con una relación de meses y hasta ahí quedó. Nunca le lloró a ninguno de ellos y vivía la vida feliz en su soltería. Aunque Surt no es cualquier doncel... es el amor de su vida y quien lo cautivo. Él quien parecía un hombre indomable y sin algún interés sentimental cayó domado ante un doncel que ama a otro hombre y justamente un hombre mayor le está ganando la batalla. Eso le molesta porque él hizo miles de cosas por el pelirrojo y este nada más con ver de nuevo al idiota de Aspros lo besa y quien sabe lo ocurrido ese día. Se sienta en una banca del parque y ve a las personas pasar. Todas en pareja y con sus hijos. A pesar de la crisis en Grecia hay gente feliz y tratando de evitar un mal trago. Suspira pesadamente y cree es mejor marcharse.

— Hola, guapo. —Saluda un chico.

Levanta su rostro y ve al chico Piscis quien esa vez lo abandonó por ayudar a Mistorya. Sonríe para evitar que vea esa tristeza que lo invade día con día.

— Hola, Afrodita.

— ¿Qué haces por aquí tan solo? —Pregunta con una sonrisa y se sienta a su lado.

— Simplemente doy un paseo para relajarme de todo lo que está ocurriendo en Grecia.

— Es lamentable. —Se pone serio— Mi padre quien tiene una empresa aquí está sufriendo mucho. —Murmulla— Perdieron mucho dinero. —Se pone triste.

— Lo lamento. —Posa una de su mano en los hombros y lo acerca para estar muy juntos— No sé lo que viva tu familia en estos momentos, pero verán que todo volverá a la normalidad.

— Gracias.

El de Piscis siente ese rico aroma del perfume entrar por su nariz. Un aroma único y que lo hace sentirse relajado. Además sentir esas manos cálidas son tan diferentes a muchas que han pasado por su cuerpo. Uno se puede acurrucar entre ellas y sentir una paz interior. Ese hombre ya tendría pareja no usando piropos o cualquier otra cosa sino que únicamente con escucharte y estar ahí es suficiente para considerarlo un buen candidato. Además le hizo sentir esperanza ya que está triste por ver a su padre Aspros buscando alguna solución por poder levantar la empresa. Por unos momentos pensó en conquistar a Aiacos para que lo ayude a su padre, pero pensándolo mejor no puede jugar con los sentimientos de todo un caballero y a pesar de haberse visto una ocasión le está haciendo sentir algo completamente diferente... puede ser eso que llaman...