Somos 4

Capítulo 74|Tercera llamada y que empiece el show.

Alguien llamó a la puerta. Dejé escapar un suspiro realmente dramático, me senté en la cama y abracé mis rodillas esperando a que ella entrara.

—Sabes que puedes entrar, Emma.

Entró con algo en la mano, sostenía un plato y, a juzgar por el aroma, supe que era sopa de pollo.

—Déjame adivinar, tratas de compensar el que hayas aceptado que Scott y Henry fuesen solos a buscar a Blake —sonrió apenada.

—No sabía cómo ibas a reaccionar, pero cuando te lo conté lo tomaste muy bien —dijo dejando el plato de sopa a un lado de la mesita de mi recámara.

Había ordenado la habitación a mi gusto. No me gustaba entrar a las de mis padres, de hecho, había tenido que quitar la cuna que estaba aquí e instalar una cama desde que llegué.

—Es porque no me pareció adecuada la manera en la que reaccioné hace un rato —admití apretando más las piernas contra mi pecho.

—No es tu...

—Sí, claro, lo sé —gruñí—. No es mi culpa pero aún así debí tratar de controlarme.

La vi golpear la madera de la cama con los talones de sus pies, los mecía de atrás hacia adelante con su vista clavada en el suelo.

—¿Ocurre algo? —pregunté.

Ella dejó de mover sus pies y giró a verme.

—No me gusta que nos separemos.

—Sabemos que ellos regresarán pronto —ladeé la cabeza.

—Sí, pero aún así no deberíamos dividirnos.

Pensé en Blake. No se había separado de nosotros por su cuenta, lo quería a salvo, no pensé que todo esto se saldría de control. El plan era solo ir a hablar con Bestier, o bueno, por lo menos averiguar la debilidad de DarkBan, no contábamos con que realmente el híbrido pudiera hablar.

Mató a Bestier, y en mi cabeza aún me preguntaba si era porque cometió traición por habernos contado su pasado, o porque en todo lo que hubo de la historia se reveló algo que DarkBan no quería que supiéramos.

—¿Thea...?

—Sí, ella está fuera de la cama —aseguró Emma asintiendo energéticamente con la cabeza—. Debo añadir, que estaba muy entusiasmada por el escuadrón que le diste.

Tomé el plato de sopa de la mesita.

—Espero que Peter aparezca pronto para poder otorgarle uno —llevé una cucharada de sopa a mi boca.

—¿Rico? —preguntó con una ceja alzada.

—¿Aparte de enfermera, cocinera? Me impresionas cada día más, Emma Miller.

Aún recordaba la primera vez que nos vimos. En ese entonces yo era la chica loca que aterrizó cerca de su casa por haber volado por los aires, y ella la chica amable que me ayudó a recuperarme. Me agradaba tener a una mujer en el equipo, jamás consideré que ella se volvería alguien especial para mí, en ese tiempo yo veía a todos como simples compañeros de equipo.

Hasta que claro, supe que Blake estaba enamorado de mí, descubrí que Scott era mi hermano de sangre y que el planeta o la vida misma no sería la misma si DarkBan se apoderaba de nuestros elementos.

Era extraño. Angélica no nos había escogido en específico a nosotros, pensaba más que fue el mismo destino quien nos escogió.

De hecho, todo era una cadena. Angélica dio todo y tuvo fé en los próximos en ocuparse de su poder, sus hijas apostaron a por nosotros también, sin mencionar a nuestros padres, incluso Scott después de ponerse a pensar las cosas con claridad.