Capítulo 18|¿Qué ha pasado aquí?

19.6K 1.5K 113
                                    

No sé realmente cómo describir lo maravilloso y no tonto de Henry. Siempre pensé que era un idiota en la manera en la cual siempre se burlaba de todos o haciendo cualquier tipo de tontería, pero al escuchar lo de sus padres bueno, fue ya otra cosa. Tuvo su lado serio, y ahora es feliz porque sus padres lo hubieran deseado así. Era un gran chico.

Cuando salimos de aquella cueva segundos después se derrumbó, eso era suerte. Ya había pasado una semana desde aquel día. Desde aquella vez que hablé con Henry, ahora parecía que éramos inseparables, en tan poco tiempo nos habíamos convertido en mejores amigos.

Es mi mejor amigo, y para él yo soy su mejor amiga. Blake ha actuado extraño desde que nos ha visto juntos. Realmente solo pienso en lo que Henry dijo, de que a él le gustaba yo, y sin duda alguna también pienso que lo que tiene son celos.

Pero descartaba cualquier idea, porque esto tenía que salir de Blake, no de Henry.

—Pueden tomar un descanso —sugirió Alex, sentándose en el suelo claramente agotado.

—¿Tenemos que seguir con estos entrenamientos? —preguntó Emma cansada.

—No te quejes, fuiste la última, tú deberías practicar más —espetó Alex un poco molesto.

—¿Te ocurre algo? —le pregunté—. Desde aquel día, cuando Leo y Len entraron has estado un poco molesto —dije, acercándome a él.

—No.

Que necio era.

—¿Entonces porque....?

—¿Podrías callarte? —espetó interrumpiéndome.

—Solo quiero ayudar.

—Ayudas más sin hacer nada —nos miró a los cuatro—. Todos ustedes.

—No hay razón para que te exaltes ni nos grites, no tienes porque tratarnos así.

Él se acercó rápidamente a mi, podría jurar que quería golpearme o incluso demostrar que era más astuto que yo, pero en vez de eso solo se plantó frente a mi, alzó su mano y la puso en mi cabeza revolviéndome el cabello.

Me perdí, ¿qué rayos pasaba aquí?

Quitó su mano y dio media vuelta para salir de aquí, pero antes de eso se giró a Jordan.

—Tu turno.

Asintió y se acercó a nosotros. Esto iba a ser cansado.

Alex estaba raro, pero entendía el porqué estaba así. Lograron secuestrarlo y tal parecía que no les costó nada hacerlo, se sentía impotente. ¿Pero por qué sentirse así? Estaba contra Leo, alguien con magia, no iba a poder hacer algo si se aprovechaban de que contaban con eso.

—Señorita Keitlyn.

Parpadeé regresando a la realidad, todos al parecer estábamos sentados en círculo. ¿Cuándo me había sentado? Miré a Jordan y me reproché mentalmente. Estaba explicando tema.

—¿Ha escuchado algo de lo que dije? —preguntó alzando una ceja.

No.

—Eh, si —balbuceé. Que mentira tan grande, me costará.

—¿Qué dije?

Oh vamos Keitlyn, siempre escuchas lo que dice Jordan, siempre habla de concentración y poderes, debe ser algo de eso.

—¿Que los poderes son... destructivos? Y que tenemos que usarlos con suma responsabilidad.

—No —dictó—. Agente Smith, ¿podría ser tan amable de explicarle a su compañera lo que acabo de decir?

Somos 4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora