Capítulo 56|Rescate.

14.2K 1K 223
                                    

—¿A que se refería con primera llamada? —preguntó Blake viendo a través del cristal de la habitación como atendían a Peter.

Agarré una manzana dándole una gran mordida, últimamente no había comido bien, la inquietud me consumía.

—A una guerra.— Ambos giramos a ver a Scott—. Mejor dicho la guerra.

Emma permanecía sentada en unos asientos frente a la habitación a la que atendían a Peter, Henry estaba a un lado de ella tomándola por la mano sin soltarla.

Enojada, tiré la manzana al suelo y corrí fuera del hospital apretando los puños.

¿Acaso se sentía poderoso? ¿Qué pasa si Peter muere? Yo no... yo no me lo perdonaría.

—¡Keitlyn!

Seguí corriendo sin importarme nada, por primera vez quería estar sola.

—¡Oye! —me giró quedando frente a frente—. ¿A dónde crees que vas?

—¿A dónde más? Iré a buscar a Thea —dije enojada.

—¿Por dónde piensas iniciar?

—¡No lo sé! ¡No sé nada! Ese hijo de puta está esperando otra oportunidad —toqué mi cabeza con ambas manos—, para atacarnos.

—Lo sé, pero separados somos un blanco fácil. —Blake quitó mis manos de mi cabeza llevándolas a los costados de mi cuerpo.

—¿Qué hay de Thea? —Mi voz tembló.

—Hasta que no despierte Peter no sabremos qué pasó, y mucho menos sabremos dónde buscar a Thea.

—Si despierta.

Giré a ver a Scott, estaba caminando hacia nosotros, estaba mejor, se le veía.

—Despertará, es un guerrero —afirmó Blake enfrentando a mi hermano.

—¡Keitlyn!

Los tres giramos a ver a Emma, se encontraba en la entrada de la puerta del hospital.

—Peter despertó.

—Vaya, eso fue rápido —dijo Scott asombrado.

Corrí al interior del hospital seguida de Blake y Scott.

Llegué hasta la habitación en la que lo estaban atendiendo, el doctor hizo una leve reverencia hacia mi dejándome pasar.

Peter se encontraba recostado en la camilla, con la mirada puesta en el brazo izquierdo que acababa de perder, se veía triste, ni siquiera me miraba.

—¿Peter? —dije logrando que alzara su mirada a mí—. ¿Qué pasó?

Cerró los ojos, al abrirlos nuevamente unas cuantas lágrimas resbalaron por su mejilla.

—¿D-Dónde está Thea? —pregunté con voz temblorosa.

Él negó con la cabeza apretando su boca.

Me acerqué hasta la camilla con las piernas temblorosas.

—¿Dónde...?

—No lo sé —admitió sollozando fuertemente—. No lo sé...

Con mis manos me froté lentamente la cara. Giré al vidrio de la habitación, todos se encontraban observando la situación. Emma se veía cansada, triste y derrotada.

¿Qué intentaba ganar DarkBan con todo esto?

<<Miedo.>>

La mirada de Blake conectó con la mía, apretó los ojos separándose del vidrio, entró a la habitación cerrando la puerta detrás de si y se acercó a Peter silenciosamente.

Somos 4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora