Somos 4

Capítulo 40|Derrumbe de confianza.

POV Ethan Carter.

Regresé de mi misión exhausto. Ese maldito mercenario casi acababa con la vida de la hija del presidente, que bueno que el rayo azul llegó a tiempo...

Necesitaba un nuevo apodo.

Bueno, pensar en todo esto era lo único que me distraía de aquella imagen que vi ayer por la mañana. Apenas había pasado un día de todo aquello y no acababa de digerirlo.

Pasé mi identificación de la PATFS por el escáner de la entrada para que me diera acceso a las instalaciones. Troté hasta ingresar al interior, justo cuando crucé la puerta escuché y vi a muchos de los agentes correr en diversas direcciones.

Sea lo que fuese, había problemas por sus rostros. Suspiré, de por si acababa de llegar de con un mercenario, además hoy descansaba. Juro que pediré mis vacaciones después de esto.

Corrí hasta la oficina de F y sin tocar ni pedir algún permiso entré rápidamente.

—Agente Ethan, llega tarde —me avisó.

—Estaba... ocupado —miré unas carpetas que se encontraban en su gran escritorio.

Las carpetas decían al principio: «CONFIDENCIAL, RANGO Z». Ese rango solo era para las únicas personas autorizadas en poder leer algún documento. Alex, Jordan y yo éramos de los pocos que podíamos tener acceso a toda esa información, es por eso que al abrir un poco la carpeta me sorprendí al instante.

"Keitlyn Carter".

Eso era lo que decía la carpeta al principio. Giré a ver a F, estaba tan distraída con una computadora como para ponerme atención, así que aproveché eso para seguir viendo las demás carpetas.

"Emma Miller".
"Henry Cooper".
"Blake Smith".

Todo era obvio, se trataba de toda la información de los cuatro elementos, y si F se veía tan estresada solo podía significar una cosa.

—¿Ya los encontraron? ¿Tienen alguna idea de a dónde escaparon esta vez? —pregunté cansado. Nuevamente hicieron lo que querían, desde entonces los buscábamos.

—Hazme un favor y quema esas carpetas —me pidió F.

—¿Quemarlas? ¿Se ha vuelto loca? Toda esta información es de los cuatro elementos, no puede quemarla así como así —espeté confundido—. ¿Los está tratando de encontrar... verdad?

—Oh, ¡agente Tripp! —F me ignoró llamando a otro agente—. Lo necesito aquí, deje lo que esté haciendo.

Tripp se acercó confundido hasta F, me miró y me saludó cordialmente.

—A sus órdenes —respondió el agente Tripp.

—Esta es la computadora general de toda la PATFS; la única que contiene información de alta seguridad y rango Z. —Tripp miró la computadora casi como si fuese algo frágil—. Tengo entendido que usted es un hacker profesional y necesito de su ayuda para borrar algunos documentos de alta confidencialidad.

—Yo no tengo esa clase de autorización —acotó el agente.

—No me importa su rango ahora, necesito que busque el archivo código ZE-913.

Tripp tecleó rápidamente en la computadora, se encontró con varios códigos encriptados que pudo deshacer con facilidad.

—Me pide autorización de alguien de alto rango —habló Tripp.

—La tienes.