Somos 4

Capítulo 19|Descubriendo las cosas.

POV Blake Smith.
30 minutos antes de la pelea.

Ya habían pasado dos horas desde que las chicas se fueron, Jordan había cancelado el combate que había propuesto. No nos dejaron descansar, ya que Alex regresó un poco mejor de su extraño humor para ponernos a entrenar a su manera.

Conclusión: nos estaban explotando.

¿No conocían la palabra cansancio o agotamiento acaso?

—Chicos —Alex llamó nuestra atención—. Jordan y yo iremos a la sala de planificación, crearemos nuevas tácticas de entrenamiento para ustedes.

Si que alegría, ya quiero que la hagan.

—Recojan los sacos de boxeo y todo lo demás, no se tarden —ordenó Alex.

Rodé los ojos cuando él salió. Empecé a recoger las cosas que nos había dictado Alex. Miré de reojo a Henry, él también comenzaba a recoger. Suspiré.

Había estado evadiendo a Henry y a Keitlyn por una única razón profesional...

¡Claro que no! ¡Era una razón personal! ¡Sabía  que ella me estaba empezando a gustar y va como idiota a acercarse más!

Como hombre sabemos las intenciones que otro tiene.

Vi que Henry me miró con duda y gruñó ligeramente. Agarró una toalla para la cara y se giró a mi.

—Blake —me llamó secándose la cara debido al sudor—. ¿Estás enojado conmigo o algo?

Este tipo si que era directo. Giré a mi alrededor y me percaté que estábamos a solas.

—No —dije secamente.

—En todo este tiempo que llevo conociéndote he aprendido a identificar cuando estás bien y cuando no. Estos días no has estado de buen humor. ¿Enserio no te ocurre algo?

—No.

Resopló y se calmó a sí mismo.

—No voy a presionarte, pero has estado distanciado —empezó a hablar y a sacarme de mis casillas—. Si tienes algún problema, es mejor que lo sueltes.

—¡¿Quieres saber que me pasa?! —exploté, ya estaba fastidiado—. Has estado más tiempo con la chica que me gusta en tan poco tiempo. He escuchado que te dice mejor amigo y se cuentan muchas cosas —fruncí el ceño—. Llevo aquí más que tú y ni siquiera he conseguido algún nombre honorable de ella.

—¿Enserio es por eso? —alzó una ceja cruzándose de brazos—. Sabes que yo no intentaría nada con ella. No sería capaz de hacerte algo así. Solo es mi mejor amiga y ya.

—Mentiroso —escupí.

—¿Por qué mentiría? —preguntó ofendido.

—Los mejores amigos siempre acaban enamorándose.

El empezó a reír por mi comentario, negó lentamente y respiró hondo.

¿Por qué se reía de esto? ¿Qué no veía que era algo serio?

—Anda ya, esa estuvo buena —se aclaró la garganta—. El hecho de que a muchos les pase, no significa que a nosotros también.

—Eso dicen todos.

—De acuerdo, ¿qué tengo que hacer para que me creas? —cuestionó algo irritado.

—No sé, ¿desaparecer?

—Deja ya de comportarte como un niño Blake.

Reí irónicamente. ¿Me decía a mi niño?

—Eres un idiota —espeté—. Eres tú el que siempre se comporta así, ¿qué no te educaron tus padres?