Capítulo 274

831 60 2
                                    

Dulce María repasaba su guion detrás de la barra cuando vio entrar al que sería su compañero de novela por unas horas. Su efusividad fue evidente, al fin y al cabo, para las personas que allí se agolpaban, hacía medio año que no se veían. Christopher le respondió de la misma forma, nadie debía saber que había pasado la noche entre sus sábanas, aunque durante esos días ella fuese una mujer soltera de cara a la galería...

La pelirroja, muy alegremente, le mostró el set de grabación, el mismo en el que rodaría sus escenas esa misma tarde. Esperando a ser llamados, se escondieron tras aquella barra, detrás de unos dispensadores de bebidas que los alejarían de aquellas cámaras indiscretas que no dejaban de enfocarlos.

En una de esas andaban cuando Uckermann se le acercó más de la cuenta, ocultando su sonrisa bajo mano derecha, con la única intención de que los allí presentes no escuchasen ni entendiesen nada de lo que le decía a su compañera...

- Oye, ¿y tu galán? Aún no lo he visto rondar por aquí...; susurraba el joven entre risas.

- Ya sabes que desde ayer soy una mujer soltera...; respondía la muchacha muy risueña.

- Puedes aprovechar mi presencia para darle celos. Los hombres nos volvemos locos cuando nos sentimos amenazados, y lo digo por propia experiencia...; carcajeaba el chico.

- ¡Estúpido!; lo insultó la pelirroja, tapando sus cachetes colorados con el guion que aún permanecía en sus manos.

- ¡Chavos, entran a escena en un par de minutos!; anunciaba uno de los directores de "Verano de amor".

Ambos se marcharon a sus posiciones, regalándose un guiño y una sonrisa de complicidad. Echaban de menos compartir momentos delante de una cámara. Lo habían hecho durante años, la mayor parte de las veces escapándose del guion. Hoy no, hoy lo respetarían sin rechistar, aunque nadie podía coartar la magia que irradiaban al estar el uno al lado del otro.

Fueron cortas las escenas que grabaron en el interior de aquel bar, aunque intensas... Hicieron algunas alusiones al pasado que para nadie pasarían desapercibidas. Por supuesto, no podían desaprovechar la química que había entre ellos, y el personaje de Christopher, no dudaría en tirarle los perros a Miranda, aunque nada pudiese suceder entre ellos. Al menos, ante aquellas cámaras.

A media tarde ya rodaban la última de las escenas, donde Uckermann promocionaría uno de sus sencillos: Light up the world tonight. Extremadamente orgullosa de su bebé, la pelirroja lo presentaba al público que ya coreaba su nombre. Durante la actuación no podía dejar de observarlo. Sabía que estaba en pleno rodaje, que las cámaras la estaban filmando, pero era incapaz de evitar esa sonrisa orgullosa al verlo sobre aquel escenario, al ver aquellos movimientos tan característicos, al escuchar esa voz que tantas veces le había cantado a ella y sólo a ella, y que ahora podían disfrutar los fans que allí se agolpaban. Lo despidió saltando al escenario, corriendo hacia él escondida tras una sonrisa espléndida, envolviéndose en un efusivo abrazo...

Para todos, la cosa ahí se quedaría, pero no para ellos dos... Aún quedaban días de los que disfrutar en Tlacotalpan. 

2.2. Before the moon... (2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora