Cap 192

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Se siente bien tenerte a mi lado.

"Cariño, ¡me estás seduciendo!", Hyun se dio vuelta y lo abrazó. Sudaba gotas de agua en su cuerpo desnudo. Lucía excitado y fascinante.

"¿Y qué si lo hago? Está funcionando, ¿o no?", aunque ya lo había visto en otras ocasiones, se sonrojó al ver su pecho desnudo,

"Si mi querido esposo lo pide, considéralo un hecho", entonces lo molestó Hyun deliberadamente. Él se sonrojó aún más. Cada vez que se intimaban, se sonrojaba.

"Hyun, se siente bien tenerte a mi lado", dijo Saeng con voz apenas audible. Estaba demasiado avergonzado para mirarlo a los ojos, así que enterró la cara en sus brazos y se sumergió en el aroma de jazmín en su cuerpo. Hyun no lo escuchó. Lo abrazó con la barbilla apoyada en la cabeza. Lo disfrutó y lo amó aún más.

Llegó la noche y tuvieron una buena cena. Como séquito de Saeng, Marco se quedó a pasar la noche. Ya había empacado las cosas necesarias a sugerencia de Saeng, de modo que traía consigo un cepillo de dientes, un cuchillo de afeitar, etc., y durmió en la habitación de huéspedes.

A KyuHyun le encantó que se quedará porque tendría un compañero de juegos. Se divirtió esa noche, a diferencia de HongKi, quien tenía más bien un asunto importante que considerar en ese momento. Aunque la propuesta que le habían hecho no le parecía tan absurda, seguía dándole vueltas al asunto en su cabeza. Suspiró al pensar en la cita del día siguiente. La propuesta de KyuJong era tentadora, pero no estaba seguro de querer casarse con un extraño.
No sabía nada de él ni de su familia, ni siquiera sabía su edad, ¿qué le gustaba? Pero por otro lado, se sentía atraído por la libertad personal que él le había prometido. Sería libre de hacer lo que quisiera. '¡Maldita sea! ¿Qué debería hacer? ¡Con lo que sea que elija, habrá inconvenientes!', volvió a mirar la nota que KyuJong le había dejado esa noche, pero cuanto más la miraba, más dudaba. Se recostó en la cama a la espera de obtener alguna respuesta. Luego, exhaló muy profundo, se puso de pie y comenzó a caminar. Pero se topó con alguien en la puerta.

"¿Por qué estás tan apurado?", SunMin lo abrazó y le preguntó fríamente.

"Oh, hermano, ¿por qué estás abajo?", HongKi hizo una mueca graciosa y lo abrazó, se sentía cálido y seguro en sus brazos.

"¿Cuándo vas a volver a Francia para terminar los estudios?", SunMin dijo eso sin soltarlo.

"Hermano, no quiero volver allí. Quiero quedarme y ayudarte con los preparativos de tu boda".

En realidad, ya no le faltaba mucho para graduarse, estaba en una pasantía. Tenía que enviar un correo electrónico a su instructor con los borradores de sus diseños de forma regular. Pero no se lo contó a su hermano porque le preocupaba que le prohibieran salir y divertirse.

"Será mejor que primero vayas a Francia. A ShangGuan le gusta las cosas simples, por lo que la ceremonia no será algo extravagante. Puedes irte tranquilo", dijo SunMin mientras le acariciaba el cabello con suavidad. Había pensado que un hombre arrogante como ShangGuan habría preferido una boda especial. No entendía por qué había elegido una ceremonia tan simple. ¿Habrá sido por él? ¿O porque realmente le gustaban los eventos simples y sencillos?

"Pero quiero quedarme en la ciudad. Es mucho más divertido". En Francia había alguien que le había roto el corazón, aunque no estaba seguro de si realmente era amor. No había pensado en él ni una vez desde que llegó a casa. Dudaba que alguna vez lo hubiese recordado si SunMin no hubiese mencionado a Francia.

"No depende de ti. Tengo que enviarte lejos antes de que te metas en serios problemas". SunMin lo conocía demasiado bien como para dejar que se saliera con la suya. Sólo porque tanta gente lo amaba en su familia, él pensaba que podía hacer lo que quisiera. Alguien se haría cargo de sus desastres, sin importar cuán grande fueran.

"Hermano, no me envíes lejos. Prometo que me comportaré y no me meteré en problemas", suplicó HongKi con los brazos alrededor de su cuello.

"La decisión ya está tomada", dijo SunMin con firmeza. Esta vez él había cometido un error con ShangGuan y con él, ¿y si hubiese sido con otra persona? ¿Lo dejaría pasar tan fácilmente?

"¡Si sigues presionándome, buscaré a alguien y me casaré mañana!", gritó HongKi.

"¿De verdad? Hazlo si puedes", se rió SunMin, quien pensó que estaba bromeando. "Esperaré y veré cómo encontraras a un hombre para casarte durante la noche"

"Hermano, ¡recuerda lo que acabas de decir! Prometeme que no me enviará a Francia, si me caso mañana", HongKi acababa de decidir que se casaría con KyuJong. SunMin no le dejaba otra opción. ¡Casarse con un extraño, no podía ser tan terrible! Talvez hasta sea emocionante. Después de todo. Es un joven y apuesto militar.

"Un trato es un trato. Pero si haces trampa, el trato se termina" , sonrió SunMin. Evidentemente, no creía que el pudiera casarse al día siguiente.
Y nunca se imaginaría que fueron sus palabras las que ayudaron a HongKi a decidirse. ¿Cómo reaccionaría cuando se enterará? ¡seria interesante descubrirlo.

Un verdadero Amor. 1a Parte.Where stories live. Discover now