Un verdadero Amor. 1a Parte.

Capítulo 151

Tu familia, también es la mía.

ShangGuan estaba parado fuera de su casa y no tenia intención de entrar Él había estado perdiendo su tiempo en la oficina después de terminar el trabajo. A regañadientes, bajó las escaleras porque sabía que el resultado no sería agradable. No tenía idea de lo que SunMin le había dicho a su padre.
Se encontró con SunMin, el hombre de hielo, quien traía consigo una sensación fresca en un día caluroso. "ShangGuan, aquellos que te conocen saben que vuelves a casa, pero aquellos que no te conocen, podrían pensar que estás a punto de trepar el muro". SunMin lo miró con sorna, ya que nunca había visto a nadie dudar de esa forma para entrar a su propia casa. Él pensaba que estaba bien que él sintiera vergüenza, pero que él no debería perder su tiempo parado fuera de su casa como un tonto junto con él. "¡Qué! ¿Trepar el muro? SunMin, ¿sabes lo que eso significa? Por favor, no me juzgues si no me conoces. La gente se reiría de mí". ShangGuan dijo eso y puso los ojos en blanco con impaciencia. Si su padre no hubiera dicho que no podía regresar a casa a menos que trajera a SunMin con él, no estaría atrapado en esa situación. "Estar afuera así es mucho más vergonzoso que los demás se rían de ti". SunMin le dirigió a ShangGuan una mirada fría, lo que lo asustó. Por lo general, él no tenía miedo de nada, pero le asustaba su indiferencia. "SunMin, ¿estás seguro de que debes entrar? ¿Estás seguro de que mi padre no te echará?". ShangGuan no quería rendirse tan fácilmente. Aunque conocía la respuesta, tenía que intentarlo. Él podría haber cambiado de opinión. SunMin no le respondió, sino que entró directamente en la villa. Había decidido no perder el tiempo parado allí discutiendo el problema. Era mucho más fácil simplemente ir hacía adentro. Él se preguntaba si sería una desgracia para él presentarlo a su familia. Pero esconderse era la peor opción de todas. "¡Oye! SunMin, ¿estás seguro de que quieres entrar? Oye, ¿por qué carajos no me esperas?".
ShangGuan no anticipó que él entraría sin avisarle. Presa del pánico, se apresuró a seguirlo y se lanzó sobre su espalda cuando él se detuvo de repente. "ShangGuan, si dices otra palabra vulgar, no me importará limpiarte la boca".
SunMin no entendía cómo un chico de noble nacimiento podía decir palabras tan groseras. "¡Eh! SunMin, no tienes sentido del humor". ShangGuan puso los ojos en blanco con desesperación y pensó: '¡Oh Dios mío!' ¿Por qué se sentía tan estresado al pensar en su vida futura con él?
"¡Jeje! ¡SunMin! Nunca me había imaginado que podríamos convertirnos en familia. La última vez que vi a tu padre, me preguntaba cómo te iba a presentar a mi hijo. Me sorprende ver que ustedes dos se mueven más rápido de lo que pensaba". ZaChary conocía bien a SunMin. La sonrisa astuta no había abandonado su rostro desde que descubrió que SunMin estaba saliendo con su hijo. ¡SunMin era el soltero más codiciado de la ciudad S!
Y, sorprendentemente, su hijo se había ganado su corazón. En su mente, ZaChary comenzó a sopesar los beneficios que podía obtener de esta relación. No le importaba mucho el hecho de que su hijo estuviera con SunMin tan temprano por la mañana. Como todas las suegras, cuanto más tiempo miraba Sherry a SunMin, más le agradaba. Aunque era indiferente por naturaleza, ella pensaba que apenas valía la pena mencionar ese rasgo si él
consiguiera controlar a ShangGuan. Realmente le gustaba este yerno guapo e interesante. ¡En ningún otro lugar había podido encontrar una pareja tan buena como SunMin para su hijo! Sherry estaba molesta con su hijo por no haberles presentado a SunMin antes. De haberlo hecho, su padre habría dejado de preocuparse y de agendar citas a ciegas para él. "Papá, lo siento por ser tan desconsiderado y no haberte visitado antes". SunMin no se sentía incómodo al dirigirse al padre de ShangGuan de esa manera, pero ShangGuan sí tenía un problema con ello. "¡Oye! SunMin. ¿Estás borracho? Este es mi padre. ¿Desde cuándo se convirtió en tu padre?", ShangGuan dijo mientras le lanzaba a SunMin una mirada de irritación. Pensó en lo fácil que le resultaba a él establecer lazos de confianza con otras personas. ¿A quién había llamado papá? Aquí no había ningún padre para él. "Desde el momento en que entró en vigor nuestro matrimonio, tu familia se convirtió en mi familia. No creo que sea inapropiado para mí dirigirme a tu padre de esta manera". SunMin tenía una personalidad fuerte, pero era tierno cuando se trataba de asuntos familiares. Una vez que estaba seguro de algo, se lanzaba a la caza sin ninguna pretensión. "¡Jeje! Lo llamaste bien, SunMin. No le hagas caso a ShangGuan. Simplemente está celoso". Sherry todavía lo estaba observando. ¡Era evidente! Como ella había dicho, sólo un hombre como SunMin podría controlar a ShangGuan. Si hubiera sido cualquier otro hombre, ShangGuan no se habría comportado tan gentilmente. "Mamá. Lo siento. No te rías de mí, por favor". SunMin se emocionó al decir "mamá". Había olvidado cuánto tiempo había pasado desde que dijo esa cálida palabra por última vez. Nunca pensó que podría decirla de nuevo, y se sentía cálido en compañía de Sherry. "Está bien. Debería agradecerte por tolerar el mal genio de mi hijo. Ya debes haberte enterado de su temperamento, supongo. Me temo que tendrás que soportarlo perpetuamente". Sherry se comportaba con elegancia y dignidad. En comparación, su hijo era bastante raro. A veces se sentía impotente por ello, pero tenía que aceptarlo ya que ella lo había mimado demasiado. "Mamá, ¿qué quieres decir? ¿No te parece que tengo una buena personalidad? ¿Acaso no has visto la cara de póquer que él ha puesto todo este tiempo? ¡La verdad es que soy yo quien tendrá que soportarlo!"
En ese momento ShangGuan había olvidado aquello en lo que siempre insistía. Por lo regular a el no le agradaba la idea de describirse como una pareja con SunMin.
SunMin sonrió levemente y pensó que hipócrita era ShangGuan. La verdad es que él ya se había dado cuenta de su nueva identidad, pero seguía tratando de arruinar las cosas. Ese no era un comportamiento normal en él.
"Oh, ShangGuan, solo mirate ¿Cómo puedes quejarte de SunMin? Deverias sentirte afortunado de que él no se queje de ti" Todos sabian acerca de la buena reputación de él. Era el yerno más codiciado para las señoras ricas en la ciudad S. Sherry no guardaba grandes esperanzas para su hijo. Ahora que SunMin se había convertido en su yerno, ella se sentía en las nubes.