Si me amas... No se lo digas a nadie

Pansy Parkinson, la mejor cómplice

Llegaba el momento de regresar al colegio por lo que Hermione y sus amigos ya se encontraban en el expreso de Hogwarts listo para partir, sus padres y los aurores estaba en aquel lugar para despedir a los chicos y para indicarles que su trayecto al colegio sería seguro ya que habían hechizado los vagones para pasar desapercibidos en caso de que algún Mortifago o una marionett los atacaran en el camino.

Hermione se despedía de sus padres indicándoles que todos estaría bien y que no se preocuparan demasiado por ella, ellos solo asintieron resignados al no tener otra alternativa pues preferían que su hija estuviera bien cuidada con expertos en la magia. Al despedirse llegó la hora de abordar el expresso de Hogwarts por lo que los alumnos se disponían a ocupar los respectivos vagones que les correspondían, Hermione en aquel instante acomodaba los equipajes mientras que los demás chicos hablaban de la grandiosa navidad que habían pasado, la castaña notó que Harry hablaba más entusiasmado que de costumbre pues al comentarle a Ron lo grandiosa que era su hermana Ginny en el Quidditch intuyó que tal vez estaban a un paso de la reconciliación cosa que le dio gusto a la Gryffindor.

-Debemos patrullar Ron, recuerda que debemos hacer el censo- Hermione le imperaba a su amigo pelirrojo indicándole que debían hacer el conteo general para verificar cuantas faltas o en su defecto bajas se habían presentado, pues con todo lo que estaba pasando en el mundo mágico se encontraba normal el hecho que varios padres de familia no permitirían regresar al colegio a sus hijos. Ron a regañadientes decidió hacerle caso a su amiga ya que no quería sentir las reprimendas de ella.

-Harry, tu quédate aquí, y por favor no te busques problemas- Se despedía la castaña dejando a su amigo observando la ventana, al parecer esa idea que tenía con Hermione se estaba evaporando lo que le dio mas gusto a la chica.

Hermione y Ron caminaron por los pasillos de los vagones mientras se encontraban con unos cuantos alumnos de otras casas que compraban dulces y golosinas del carrito del tren. Esta situación la encontraron bastante normal por lo que solo se dedicaron a realizar el conteo rápido para poder seguir con otros vagones, la castaña le indicó a Ron que debían separarse para poder terminar lo más pronto posible, en eso el chico encontró la oportunidad perfecta para ver a su novia lavander aunque fuera por unos instantes. Hermione siguió caminando y revisando como de costumbre cuando de repensé te encontró con los prefectos de Slytherin, aquel aroma a encino dulce era inconfundible, pero esta vez lo encontró de lo mas normal.

-Por primera vez Hermione Granger no esta distraída, eso si que es un milagro- Indicaba pansy para aparentar que reñían, mientras que Draco se mostraba serio, su semblante estaba mucho mejor.

-Tomaré eso como un cumplido Parkinson, ahora si me disculpan debo de seguir patrullando- Hermione se disponía a seguir su camino pero escuchó que el rubio decía algo.

-Te ves contenta Granger, acaso te reconciliaste con tu noviecito?- Preguntaba en doble sentido el rubio, haciendo que Hermione se volteara para contestar.

-Nunca he estado enojada con él si a eso te refieres, y como veo que estas muy interesado en el tema, pues si, me reconcilié con él, lo amo por encima de todo- Hermione lanzaba una sonrisa de satisfacción haciendo que Pansy tomara a los dos chicos de las manos para encerrarlos en un vagon para que nadie pudiera escucharlos, cosa que la feliz pareja tomó por sorpresa.

-Muy bien, basta de jueguitos de ustedes dos, solo preguntaré una vez,¿Ya están juntos de nuevo?- Preguntaba la morena mirando furtivamente a los dos muchachos mismos que se dirigieron una mirada de complicidad.

-No le contaste nada verdad?- Preguntaba la castaña al platinado mismo que negaba con la cabeza.

-Preferí darle una sorpresa, aunque me dijo que subí de peso- Draco se sobaba el estomago, pues la morena al momento de abordar el expreso lo bombardeo de preguntas sobre su recuperación milagrosa, mientras el platinado no decidió contárselo para escucharlo de la propia boca de la castaña.

-Si Pansy, hemos vuelto, y por cierto, muchas gracias por contármelo todo, ya que tu amigo es tan impulsivo que no pensó en ti para romper el juramento que había hecho con su padre- Agradecía la castaña abrazando al platinado mismo que le correspondió con un beso en la frente, la morena en ese momento se llenó de felicidad abrazando a su amigo y a su novia al mismo tiempo.

-Ya era hora con ustedes dos, estaba poniéndome histérica, y por favor, cuando decidan terminar por algo quiero que primero me lo consulten ya que ustedes solos estarían dispuestos a matarse- Indicaba Pansy separándose de los chicos, mientras en ese momento Draco tomó la palabra sin soltar a la castaña.

-En la escuela nos trataremos igual Pansy, pero no te preocupes, no me atrevería a volver a lastimar a mi nutria, así que por favor guárdanos el secreto- Mencionaba el platinado.

-Pansy, por favor quiero que me tengas al tanto de todo lo referente a lo que Draco tiene que hacer en Hogwarts, no quiero que cometa más imprudencias- Hermione comentaba a Pansy mientras que el platinado iba a protestar pero ambas chicas lo miraron con reprimenda para que no hablara por lo que el chico decidió callar.

-No te preocupes Granger, cuidare de que éste no se meta en más líos, a decir verdad que bueno que de ustedes dos hay alguien que piensa, y no me refiero a ti querido amigo- Pansy y Hermione comenzaron a reir haciendo que el rubio se sonrojara.

-Es lo malo de tener a tu mejor amiga y a tu novia de aliadas- Comentaba algo infantil el rubio mientras la castaña le daba un tierno besito en los labios para que no se molestara.

-Oye Pansy, por cierto ¿Cómo van Neville y tu?- Preguntaba la castaña para asegurarse de que la morena también compartiera su felicidad.

-Estoy loca por él, con decirles que llego a ir a mi casa a escondidas solo para verme, pero debo decir que es un incensato, no le importa el peligro a ese tonto, incluso me dijo que si me volvía a ver con Blaise no dudaría en romperle la cara y secuestrarme para que estuviera con él- Pansy se ruborizaba de emoción al pensar en esa alocada idea.

-Estas hablando del Neville Longbottom que yo conozco?, vaya que el amor lo ha transformado- La castaña y Draco se reían por lo que acababan de escuchar mientras que Pansy solo los observaba.

-Conocí a su abuela, y debo decirles que tengo su aprobación- Comentaba Pansy.

-Me da gusto amiga, no dejes ir a la persona que amas, es el peor error que podemos llegar a cometer, ahora debemos irnos de lo contrario los demás se preguntarán donde estamos- Comentaba Draco observando que ya era un poco tarde.

En ese momento Pansy salió primero del vagon para asegurarse de que nadie los pudiera observar, incluso llego a ahuyentar a algunos que intentaban cruzar, y al estar todo despejado se dispusieron a salir, pero al momento de separarse y tomar sus respectivos caminos el rubio no pudo resistir y tomó a la castaña para darle un beso apasionado haciendo que Pansy los separara pues no debían ser indiscretos.

-Pero lo que tienen de romanticos, lo tienen de tontos- Pansy tomó del brazo a su amigo mientras que la castaña se reía tiernamente.

-Te amo mi nutria, te veo en el colegio- Draco le decía a la chica tomando su broche de Cronos para recordarle el medio de comunicación que utilizarían.

-Yo tambien Huroncito, pero hazle caso a Pansy- Hermione también tocaba su broche y le mandaba un beso al aire mismo que el chico correspondió con otro.

-Si ya, mucho amor, mucho amor, pero les tengo noticias, hay gente pasando por aquí- La morena arrastraba a su amigo para obligarlo a ir con ella, mientras que la castaña daba un suspiro y recuperaba su paso para continuar haciendo el censo respectivo.