Si me amas... No se lo digas a nadie

El precio alto de los celos

Hermione seguia nerviosa y desconcertada por la ultima clase de pociones, se acercaba la noche y debia estar preparada a hacer su recorrido ya que Ron estaba demasiado exhausto por los entrenamientos de Quidditch, asi que debia hacerlo sola. Se encontraba algo fatigada tanto fisica como emocionalmente ya que despues de la clase de pociones decidio investigar mas sobre las desapariciones. Ese dia no les tocaba tampoco practica con Moody en la sala de menesteres por lo que decidio aprovechar ese tiempo para estudiar un poco mas para sus TIMOS. Entro rapidamente a su habitacion para ponerse una tunica mas caliente y empezar a patrullar. Tenia algo de hambre ya que por sus diversas actividades le fue imposible tomar alimento ese dia.

Comenzo a patrullar los pasillos, caminando silenciosamente con la vista cansada, tenia ganas de dormir o de comer algo pero debia continuar. Se encontraba cerca del pasillo de Encantamientos cuando vio que otra silueta se aproximaba, volteo para ver quien era y para su sorpresa era su nuevo compañero de equipo de pociones.

-¿Que haces aqui Malfoy, no se supone que debes de vigilar la torre de ADIVINACION?- Le replicaba la castaña al chico rubio.

-Pansy se quedo alla, asi que decidi patrullar otra zona- Malfoy le indicaba a la castaña.

-Pues yo estoy patrullando aqui, asi que si no te molesta desearia terminar lo antes posible, tuve un dia pesado- Hermione no tenia animos siquiera para discutir, por lo que su tono fue demasiado debil.

El rubio noto que Hermione estaba cansada, tenia ganas de tomarla en sus brazos recostarla en su pecho y pedirle que descansara un poco.

-Traje algo de comer, supuse que no habias cenado ya que no te vi en el gran comedor- Malfoy saco una servilleta que contenia algunas croquetas de pollo, estaban aun calientes ya que las habia tomado precisamente para llevarselas a la castaña.

Hermione lo miro extrañada, ¿Acaso se preocupo no verla en la cena?,debia estar soñando, decidio darle una oportunidad y acepto las croquetas.

-Lindo detalle de tu parte Malfoy, muchas gracias- Se ruborizo Hermione al mismo tiempo que recibia la servilleta con las croquetas de pollo.

-Ahora ven, debes comer, si gustas yo me encargo de vigilar tu zona- Le indico que se sentara en una de las bancas que se encontraban cerca para que pudiera descansar un poco.

Hermione no podia creer las atenciones que Draco tenia con ella. Le llevo un refrigerio y la estaba relevando de sus deberes, definitivamente el mundo estaba loco, pero eso le encantaba ya que no dejaba de sonrojarse.

-Muchas gracias Malfoy, no se por que lo haces, despues de todo se supone que nos detestamos no?- Hermione lo miro inquisitiva al mismo tiempo que degustaba una de las croquetas.

-La que me detesta eres tu Granger, lo demostraste en pociones- Draco le comento tranquilo, su tono era diferente al que estaba acostumbrado a usar, totalmente desconocido para la castaña.

-No es por eso Malfoy lo sabes bien, es solo que...- hizo una breve pausa.

-Es solo que despues de lo de le enfermeria, no se que pensar- Hermione se ruborizaba mientras voliva a comer otra croqueta.