Pero su aparición sí fue desconcertante para Nolan.

Es decir, él sabía que ella iba a venir, pero verla esa vez fue totalmente distinto a las veces anteriores.

Porque en el preciso instante en el que ella pisó la sala, dos cosas sobre Madelein lo confundieron.

La primera: sus detalles.

Unos detalles que Nolan no había notado nunca:

Que Madelein tenía el ceño ligeramente fruncido como si estuviera de mal humor, pero lo ocultara.

Que su piel estaba algo sudorosa en el cuello.

Que su respiración era incluso medio pesada (¿cómo rayos podía darse cuenta de eso?).

Y que ella estaba algo acelerada, o mejor dicho, ¿nerviosa? (¿y cómo rayos podía estar tan seguro de su ritmo cardiaco?).

Segundo: su olor.

Eso tampoco había pasado antes. Nolan percibió que, con la entrada de Madelein, un horrible hedor se extendió por todo el lugar.

O bueno, él asumió que impregnó la sala porque por sus fosas nasales entró el olor. Era agrio y medio fuerte, como una mezcla de comida podrida y algo ácido.

La verdad, no pudo identificarlo por completo, pero le pareció que venía de Madelein...

Fue desconcertante porque él nunca había percibido mal olor de ella. Y se preguntó si tenía sentido. Es decir, ¿era posible que una persona pudiera oler así de mal?

La mujer no se veía sucia, pero es que sí, joder, tenía la fuerte certeza de que esa intensa asquerosidad salía de ella.

Miró a los demás presentes a la espera de que alguien arrugara la nariz o se quejara, pero nadie más puso cara de desagrado.

En definitiva, era un hedor para reaccionar...

Pero no, nadie expresó incomodidad.

Así que Madelein dejó la caja reposar sobre la mesa y la reunión inició oficialmente.

—Los individuos uno, dos y diez de STRANGE que escaparon durante la catástrofe de energía que derrumbó partes de los edificios, ya están de nuevo dentro de la organización —informó Madelein, parada junto a la silla de la cabecera.

Nolan abrió mucho los ojos. ¡Uno y diez!

¡¿Ax y Vyd habían vuelto?!

Y bueno... la chica número dos también. Aunque eso no lo alegró mucho.

—Por alguna razón, en el lugar en donde estaban ocultos soltaron una descarga de energía tan fuerte que pudimos localizarlos y llegar hasta ellos —siguió explicando Madelein—. Los encontramos desmayados. El número uno parecía el más afectado físicamente. Aún no se sabe por qué.

Nolan volvió a quedarse perplejo.

¿Una descarga?

Uno de los repentinos recuerdos que tenía desde el desmayo, ese de Ax muriendo y de él ofreciéndole la mano, lo hizo fruncir el ceño.

Y ahora que lo pensaba, no estaba seguro de que si Ax había tomado su mano, pero sí tenía la leve sensación de que una especie de explosión energética había sucedido...

Pero entonces, ¿eso quería decir que todo lo que Nolan recordaba por partes sí había sido real?

—No estábamos muy seguros de qué hicieron exactamente como para haber expulsado esa cantidad tan grande de energía —continuó Madelein— pero al encontrarlos lo entendimos. Estaban buscando a más individuos, y lograron encontrar a uno en lo que era una de las prisiones especiales de MANTIS. El sujeto es el número cinco. También está en recuperación justo ahora debido a una severa deshidratación.

S T R A N G E © [Parte 1 y Parte 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora