A hurtadillas. Parte I

264 57 0
                                    


Christian y yo salimos bajo la noche. No había mucha vegetación, apenas un par de árboles un poco antes de unas enormes rocas. Nos escondimos detrás de ellas y echamos un vistazo al otro lado. 

Un poco más abajo, entre la orilla y las rocas del interior, había un serpenteante grupo de antiquísimas tiendas de campaña, colocadas de manera desordenada. El viento azotaba las lonas con fuerza y unos cuantos farolillos temblaban, débiles, bajo la oscuridad. 

—Reidar dice que Jerome está en la segunda tienda a la derecha —me susurró Lisange, agachándose a mi lado—. No tendrás problema en camuflarte. Ve entre los árboles hasta allí y ocúltate entre las rocas hasta que veas el momento oportuno. ¿De acuerdo? 

—Sin problema —dije. 

La verdad es que parecía extremadamente fácil... 

—Yo buscaré a Hernan y Christian a Elora, pero estaremos cerca en caso de problemas. Tú regresa al coche en cuanto tengas a Jerome y enciende el motor. ¿Sabes conducir, no? 

—Jerome, sí.  

—De acuerdo... ¿vamos, pues? 

Tanto Christian como ella esperaron a que yo me alejara ladera abajo entre los árboles para dirigirse en sus propias direcciones. Sentí que mi corazón se hinchaba dentro de mi pecho, no sé si por la adrenalina o por el miedo. Erala primera vez, la primerísima vez que formaba parte de un plan... pero esos últimos segundos con Christian me habían desestabilizado por completo. De hecho, me detuve antes de llegar a las rocas para obligarme a dejar la mente en blanco ya pensar únicamente en lo que estaba haciendo. Jerome, ese debía ser mi único pensamiento en ese momento. 

Tal y como Lisange me había indicado, avancé ya guardé entre las rocas hasta que estuve segura de que no había ningún gran predador o guardián cerca. El campamento era demasiado pequeño para lo que yo había visto en el barco. No debía de haber más que una docena de tiendas de campaña, lo que debía significar que muy pocos habían sobrevivido al hundimiento. Las luces tintineaban por el aire y se oía un leve murmullo, casi amortiguado por el oleaje del mar. Verifiqué de nuevo que no hubiese nadie alrededor y me subí a la piedra para caer con sigilo sobre la arena oscura dela playa, a pocos metros de la primera lona. Evité las antorchas y presté atención a mi sentido del olfato. La segunda tienda estaba a solo unos pasos de mí, así que respiré y asomé la cabeza, pero no vi a nadie. El olor de salitre era tan intenso que no podía distinguir el olor a gran predador y, ahí abajo, había demasiadas voces como para distinguir alguna... No había opción, debía arriesgarme. Aparté unos milímetros la pesada tela y eché un rápido vistazo al interior. Nada, ahí no había nada. Estaba completamente vacía. Genial... Me mordí el labio, pensando a toda velocidad. Estaba claro que Reidar estaba equivocado... Me giré para avisar, pero ni Christian ni Lisange estaban allí. Tampoco distinguí el rastro de Hernan o Elora, así que no me quedó más remedio que mirar en las tiendas a ambos lados. Tal vez no fuera exactamente la segunda tienda más alejada... 

Un momento, ¿había dicho la segunda más alejada del bosque o de la playa? 

Decidí que debía comprobarlo. Crucé al otro lado, sintiéndome en medio de alguna película de acción y repetí el mismo procedimiento que con las anteriores tiendas. Sin embargo, tampoco encontré rastro de él. Ni siquiera su olor parecía presente allí...Entonces, empecé a ponerme nerviosa. ¿Y si Christian tenía razón y habían acabado con él? Un enorme nudo comenzó a formarse en mi garganta. 

En ese momento, sentí un corazón. Me agaché en una fracción de segundo y vi pasar a Lester. El gran predador avanzaba hacia mí. Intenté retroceder, arrastrándome por la arena. Cualquiera de ellos podría captar mi olor en cuestión de segundos, más aún si se acercaba lo suficiente. A unos metros, había una pequeña cueva donde el agua del mar parecía haberse acumulado durante la marea alta. Si quería seguir buscando a Jerome, necesitaba camuflar mi olor. 

Trilogía Éxodo (Éxodo, Revelación y Jueces)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora