Living With a Temperamental Adonis: 99 Proclamations of Love

Capítulo 137: Todos hemos sido olvidados (7)

Su Zhinian dejó su bolígrafo, se reclinó en su silla y levantó la mano para masajear sus ojos que se habían cansado un poco.

El diario que estaba abierto sobre la mesa reveló una página que estaba llena de palabras.

20 de diciembre de 2015 (en realidad ya es la 1 am del 21). Estrellas pero sin luna.

Hoy fue una de las raras ocasiones en las que volví a casa temprano. Me llenó de alegría recibir la llamada de Tingting de camino a casa. Sin embargo, las malas noticias llegaron cuando llegué a casa. Realmente no quería dejarla ir a encontrarse con Qin Yinan, pero temiendo que pudiera entristecerla, decidí dejarla ir.

Dio la casualidad de que Tang Nuo me invitó a unirme a él en City Clubhouse. Estuve de acuerdo a pesar de que sabía que ella estaría allí.

Originalmente lamentaba estar allí, pero en última instancia estaba agradecida por haber tomado esa decisión porque la escuché decir: "De ahora en adelante, me voy a dar por vencida con Qin Yinan".

Incluso sonreí en la habitación llena de gente. Sin embargo, después de que la ola inicial de felicidad se desvaneció, me di cuenta de lo egoísta que era.

Descubrí el secreto hace cinco años y sabía que me impide amarla y convertirme en pareja con ella, pero todavía deseaba egoístamente que no se enamorara de otra persona.

Sí, de hecho soy despreciablemente egoísta.

A menudo, realmente odio los superpoderes con los que nací porque me despojan de la capacidad de autoengañarme. En todas partes que veo, solo hay verdades desnudas.

Sin embargo, esta noche, estoy agradecido por mis superpoderes porque algo horrible le pasó a Tingting. Afortunadamente, terminó con una nota feliz.

Lo único que lamento es que no pude dar mi chaqueta para cubrir el cuerpo de Tingting cuando la vi parada allí sola a la orilla del lago con su ropa empapada.

Los murmullos de Song Qingchun luego volvieron a la deriva desde la puerta de al lado.

"Tengo muchas ganas de ir a Golden Corner ... No he estado allí durante mucho tiempo, cuando Song Cheng todavía estaba por aquí, almorzaba conmigo allí. Por desgracia, Golden Corner es demasiado caro. Una comida allí sobrecargará mi crédito ... Pero, realmente extraño la comida allí ... "

Los dedos de Su Zhinian que estaban masajeando sus ojos se detuvieron.

¿Quiere ir a Golden Corner? Luego iremos a Golden Corner ...

Su Zhinian alcanzó el teléfono de la mesa y llamó a Cheng Qingchong.

Por el sonido de su voz, Cheng Qingchong probablemente se despertó de su sueño. "CEO Su, ¿cómo puedo ayudarte?"

"¿Cómo se ve mi agenda el próximo lunes?"

"CEO Su, espera un minuto". Después de que Cheng Qingchong dijo eso, Su Zhinian pudo escuchar el sonido de su computadora encendida. Aproximadamente un minuto después, Cheng Qingchong dijo: "Estarás en Hong Kong el próximo lunes".

¿Hong Kong? Su Zhinian frunció el ceño. "¿Y el martes?"

"También en Hong Kong ..." Después de que Cheng Qingchong respondió, agregó confundida: "CEO Su, ¿lo ha olvidado? Tiene una reunión de negocios en Hong Kong el próximo lunes y martes; nuestros boletos de avión han sido reservados. Volaremos mañana por la noche. "

Su Zhinian murmuró algo incoherente en respuesta. Entonces, se dio cuenta de que efectivamente había tal cosa en su agenda. Después de una pequeña demora, agregó: "Cambie la fecha del vuelo a esta noche, estaremos partiendo hacia Hong Kong esta noche y cambie el boleto de regreso al martes por la mañana, tengo algo importante que atender el martes por la noche".

"Entendido, CEO Su".

...

Song Qingchun, que durmió hasta tarde la noche anterior, sufría de dolor de cabeza y, por lo tanto, le costaba concentrarse durante el trabajo.

Cuando fue a la sala de descanso a tomar un café, Song Qingchun solo se dio cuenta a través de sus colegas de que Tang Nuan no fue a trabajar ese día, solicitando una licencia por enfermedad.

Tal vez estaba realmente enferma por el salto al lago o simplemente no podía enfrentar a Song Qingchun… Independientemente, Song Qingchun tomó un sorbo de su café y se alejó como si no tuviera nada que ver con ella.