Capítulo 103. PoV Connor.

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Baje rápido hacia el garaje, cogí a Gun del parking y la metí dentro, su moto la estará esperando aquí voy a recuperarla como sea aunque tengo un miedo real a que no sea la misma mujer cuando vuelva a que le hagan lo que todos mis temores cree.

Busque mi moto de repuesto cuando vi la antigua moto de mi padre, aquella a la que le había dedicado tanto tiempo y empeño por restaurar y cuidar como paño en oro todo por rendirle honor a una basura como el que le ha fallado a su familia.

Cogí la moto y salí a la carretera sabía que Sonrenson solía estar en una cafeteria del centro como tapadera tengo que hablar también con esa rata podría serme útil para sacar a mi mujer de ese club de mierda. Nunca pensé que sentiría tanta impotencia en mi vida, ni jamas pensé en que me enamoraría de una loca, preciosa y perfecta mujer que le gusta incluso mas que a mi formar parte de un club esta acostumbrada a ello, no permitire que mi hijo crezca sin su madre. Llegue a la cafeteria guarde todo en mis alforjas y me fui hacia dentro, todo parecia como si fuera realmente una cafeteria había un chico vestido con un ridículo atuendo con el logo de la cafetería.

  -Bienvenido que desea hoy tenemos de oferta los muffins.-Dijo con una sonrisa que yo mismo se la quitaría a ostias.

  -Necesito ver a Sonrenson donde está?.-Ni se inmutó cuando lo dije ni una sola facción de su cara se movió.

  -Lo siento no entiendo de lo que me está hablando si no quiere nada de nuestra deliciosa selección de bollería o cafes le pediré que se vaya.-Solto mis nervios ya estaban crispados demás y no aguantaba las gilipolleces del F.B.I, saque mi arma y le apunte.

  -Te refresco la memoria o me dices dónde estás el capullo de Sonrenson o le añado tu cráneo a los muffins.-Levanto las manos sacando otro arma apuntándome.

  -Baja el arma F.B.I.-Grito haciendo que yo soltara una carcajada.

  -Tranquilo Mathews hablaré con el.-Dijo Sonrenson saliendo del despacho.-Bajad las putas armas los dos.

  -Muy bien, buen chico quieres una galletita.-Le dije al imbécil del mostrador.

  -Tranquilo imbécil estás hablando con la ley ahora pasa al despacho y no montes más espectaculo innecesario.-Empezo a andar hacia el despacho y yo a seguir sus pasos intentado no refunfuñar como un crío tal y como me sentía ahora mismo.

  -Muy bien imagino que la inconsciente de mi sobrina se ha entregado a estas hienas, me lo contó que sabemos de momento.-No me podía creer lo que escuchaba este capullo lo sabia y la dejo hacer esa locura dejo que la carroña se la llevará que clase de amigos y familia tenemos.

  -No hiciste nada para impedírselo por el amor del santo Cristo es tu sobrina a la cual violaran brutalmente si no la encontramos a tiempo, como lo habéis dejado hacer eso deberías haber dejado que me matasen a mí.-Me exalte mientras el ni se inmutaba tenia unos nervios de hierro por lo visto.

  -Relajate no eres un asesino a sangre fría ahora debemos pensar así, no te dejes llevar por los sentimientos es lo peor que puedes hacer en este momento, yo también la quiero y la intenté proteger de ti pero como siempre hizo lo que quiso y ha acabado donde ella ha querido han sido sus decisiónes lo que la han llevado donde está no las mías ni las de los que la rodean.-Dijo mientras yo me levantaba metiendole un puñetazo a la pared.

  -Es mi mujer y te juro que no voy a permitir que le hagan nada pero ella confiaba en ti y te pedía ayuda necesito el máximo de gente de confianza posible en esto no quiero ningún cabo suelto hay topos por todas partes si se enteran de que estamos cerca quien sabe lo que harán.-Dije y asintió.

  -Hable con ella y me dio sus condiciones las mías son, que quiero hacer un gran redada obviare que tú y tu club estáis de por medio en esa reclamación habrán jefes de la mafia si cumplo sacare de las calles a mucha escoria, dime lo que tengo que hacer y lo haré.-Sonrei por fin algo bueno que decía éste imbécil.

  -Estate atento a mí llamada, quiero que vengas a mi club en cuanto la recibas es hora de traer de vuelta a mi mujer y acabar con su pesadilla.-Nos dimos la mano y me fui.

De vuelta a mi moto solo pensaba en cómo hacer que salga bien ella necesita ser feliz, merece tener un vida sin tener que huir ni escapar de nadie donde poder ser ella misma.
Llegue al club y pase al bar directamente, busque a mi mano derecha y hermano.

  -Habeis echo lo que os pedí.-Dije y el asintio.

  -Si, el club está limpio Prez y como pediste solo hemos dejado a una viva pero es una mujer y sinceramente torturar a una mujer no es lo mío ni de ningún hermano del club y lo sabes.-Tenia razón nosotros no hacíamos daño a las mujeres da igual como fueran.

  -Lo haré yo.-Dijo alguien a mi espalda.

  -Mama pero que dices.-Ella sonrió y dejó ver también a Angélica.

  -Tranquilo Connor las mujeres de este club se encargarán de que esa zorra hablé le sacaremos todo, a mí no me importa torturarla se han metido con la Diabla equivocada.

Todo un grupo de mujeres se presentaron voluntarias para sacarle información a la única mujer que dejamos viva topo del club de mi padre, sabía que el tenía gente aquí en cuanto supe que estaba vivo siempre marcaba a fuego a sus hombres y mujeres, pero como yo y mi ética no me permitían torturar ni matar a una mujer todas ellas querían hacerlo por Lis.

  -Muy bien chicas toda vuestra está en el calabozo de abajo.-Dije pasándole las llaves a mi madre.

  -Prez algo más ha llegado un chico preguntado por ti.-Inmediatamente supe que era Sombra.

  -Donde está?.-Dije y el me señaló escaleras arriba.

  -En tu despacho.

Subí lo más rápido posible pero antes de ir allí vi la puerta de Melissa entreabierta viendo como cuidaba tanto de su hija como del mío, me alegraba saber que aún así teníamos personas en las que poder confiar siempre.

Pase a mi despacho y ví a un chico delgado, desgarbado, de pelo oscuro y alto esperandome.

  -Hola Connor.-Le di la mano y el me la recibió con recelo.

  -Sombra supongo.-Asintio sentándose en la silla.

  -Puedes llamarme Mike.

  -Muy bien Mike porque mi mujer dice que puedes serme útil.

  -Porque puedo localizarla.-Abri lo ojos lo máximo posible el podía decirme dónde está.

  -Como?.-Seguia dudoso.

  -Lo pendientes que lleva son unos pequeños microchips rastreadores si no la han sacado del país, y no está bajo una tonelada de titanio puedo encontrarla.-Sonri después de días sin hacerlo lo hice iba a encontrarla.

  -A que esperas hazlo no hay tiempo que perder.-Asitio.

-Necesito un sitio donde montar mi equipo.-Le lleve a mi antigua sala de vigilancia ya no la usábamos porque mataron al último informático.

  -Muy bien voy a montar el equipo te avisaré cuando tenga algo, la traeremos de vuelta hermano.-Dijo y por fin me sentía reconfortado.

  -Me gustaría que me explicarás los de que hay más Diablos.-El asintio.

  -Es una larga historia hermano.-Negue con la cabeza.

  -De momento tenemos tiempo.-Y así empezó a contarme.

Chicos perdonarme la vida por no actualizar realmente no he podido tuve un accidente en el que me rompí la mano izquierda y hoy por fin me han dejado sin escayola sigo teniendo dos falanges rotas pero esto muy bien. Actualizaré Diario, y pondré mi nueva novela a ver qué os parece. Lean, voten y comenten, os quiero diablillos.

La hija del diablo.Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang