La hija del diablo.

Capitulo 22.

Estaba en el baño curandome la herida que me habían hecho en la cabeza los hijos de puta que me secuestraron y que no dudo que posiblemente intentarán algo más contra mia, llamarme loca pero la mayor parte de las personas suelen tener ese sentimiento de venganza dentro se sus ser aunque nunca lo quieran reconocer es así. Todos en algún momento de nuestras vidas cuando alguien o algo nos ha hecho daño o lo han intentado hemos querido vengarnos y devolversela de alguna manera para que se enteren y que no vuelvan a intentar meterse contigo. Aunque muchas gente dirá que no es bueno guardar rencor a nadie y que es mejor perdonar y seguir adelante con tu vida y esas cosas, eso lo entiendo y tambien dicen que si les haces algo malo seguramente te pasara algo malo a ti ya que a las buenas personas nos sale como el culo eso de ser malos. Metida en mis pensamientos termine de curarme y cabreada ya porque mi móvil no paraba de sonar fui hasta la mesilla para cogerlo y ver que era Melissa, dudé durante un segundo en cogerlo o no porque tampoco quería un charla de porque me había ido o porque había dejado así a Connor o de porqué había ello aquello en la nave industrial pero bueno finalmente y no de muy buen humor se lo cogi.

  -Que quieres Meli no estoy de humor ahora mismo para nada.-Le dije para que ella me interrumpiera con la voz entrecortada.

   -No no Lis lo se y lo siento pero ha pasado algo grave en el club y te necesitamos por dios ven para acá.-Me dijo desesperada.

  -Pero qué leches dices si ha pasado algo seguro que tendrán a su Doc allí que le avisen y os ayude adios Melissa.-Le dije para luego intentar colgar.

   -Mira pedazo de cabezona dos de los niños de un hermano del club se han hecho daño jugando con unos cuchillos y el Doc no está aquí déjate de gilipolleces y autocompadecerte y mueve tu culo hasta aquí o voy yo a por ti donde quiera que este y te arrastro de los pelos hasta aquí. Por tu bien ven YAAAAA.-Me grito y por reflejo yo me separe el movil un poco de la cara.

  -Vale joder voy para alla pero necesito mi maletín y mi material médico y saber que ha pasado.

  -No hace falta tu material aquí hay de sobra y los niños estaban jugando pero supongo que sin ver el peligro uno ha acabado con una puñalada en el costado y otro con un corte profundo en el brazo derecho Lis por dios date prisa no sabemos qué hacer y aquí hasta los tios estan corriendo como pollos sin cabeza te lo suplico no tardes.- Me dijo y colgó. Mierda

Como pude me puse las zapatillas y salí de la habitación sin siquiera cambiarme la ropa que tenia manchada por mi propia sangre. Llegue hasta el aparcamiento y fui directa a mi coche, arranqué y salí pitando hacia el club, quite la música en este momento necesitaba tranquilidad para prepararme el desastre que me voy a encontrar en el club. Quince minutos después estaba aparcando en el parking del club y salí del coche y empecé a andar hacia el club subiéndome los pantalones de manera exagerada, por raro que parezca había adelgazado sin siquiera darme cuenta. Iba cabizbaja y antes de pasar el club mi cuerpo chocó contra otro, al levantar la cara me encontre con la de Connor. Genial a quien quiero evitar es justo a quien me encuentro el primero pero bueno que me esperaba está claro que el me esperaría el primero solo para indagar más en el secreto de mi vida.

  -Ya has llegado.-Dijo con voz de alivio para luego abrazarme de una manera que parecía una boa constrictor capaz de acabar asfixiando a su víctima pero por raro que parezca le devolví el abrazo, lo necesitaba y me transmitio la paz que necesitaba a través de ese abrazo. Pero que leches me pasa con este tío consegui tirar mis barreras abajo sin darme ni cuenta, me aparté de él.

  -Si ya estoy aquí dime que ha pasado y llevame con los niños.-Me asintió para después cogerme la mano y hacerme pasar.

Al entrar pasamos por un pequeño pasillos y llegamos al bar del club que olía justo como el de mi padre(tabaco, alcohol y mucha testosterona) sonreí para mis adentro. Al llegar Connor saludo a los del bar y me hizo llegar hasta una escalera.

  -Lleva hasta las habitaciones del club, la primera planta suele ser para las personas de paso y mujeres ya sabes que tipo de mujeres, la segunda es para gente de del club y sus familias y en la tercera estamos yo y los miembros de mi consejo asique vamos que tenemos que ir hasta la tercera.-Me dijo para tirar de mí y antes de subir el escalón darme un tirón de la mano y llevar la mano hasta mi nuca y sus labios a los míos, como las veces anteriores me costo devolverle el beso por la sorpresa que me he llevado pero al segundo me di cuenta y empeze a corresponderle de manera feroz lo necesitaba, su calor, sus labios sobre los míos y esa sensación de seguridad que me daba el estar a su lado o me estaba volviendo loca o lo que estaba sintiendo en mi interior era una verdadera revolución.

   -Si creo que si, así es como me vas a saludar a partir de ahora.-Solto despues de dejar de besarme haciendome sonreir como una boba,(PERO QUE ME PASA) eso es lo que me decía mi mente pero la ignore y le cogí su nuca poniéndome de puntillas y le planté un besazo en esos labios perfectamente mullidos.

  -Venga llévame con esos niños.-Me sonrió con toda su dentadura perfecta y seguimos subiendo.

Aquí os dejo el capitulo 22 espero que lo disfruteis y le deis mucho amor, gracias por leerme espero vuestros comentarios sobre que os parece. Si podéis compartir la historia os lo agradeceria un besazo enorme.