Free me | zayn |

Capítulo 65

— Estoy pensando en hacer un pub.

— ¿Un pub? ¿Como un bar?

— ¡Sí! Un bar pirata— si no fuese por su entusiasmo pensaría que estaba bromeando.

— ¿Dónde? 

— Ahí— señaló una de las esquinas al fondo del enorme jardín, donde se encontraba el trastero. Nunca le había puesto atención— un pub privado. De madera, con taburetes rústicos y barriles como mesas. Pondría estanterías llenas de botellas de ron... Podríamos ir a la costa a buscar viejas redes de pesca. Vi un timón por eBay que quedaría genial.

  — Así que llevas pensando en eso un tiempo ya.

Era tarde ya. Tras la cena a Shazia se le ocurrió sugerir ir a la zona donde a veces Zayn hacía un fuego y aprovechar la temperatura antes de que las noches se volviesen demasiado frío. Así que eso hicieron. Comieron las galletas que la muchacha había preparado bajo las luces del jardín y el calor de la hoguera. Zayn y Shazia sentados en la hamaca y Trisha y Yaser en dos de las sillas de jardín.

Seguía habiendo cierta tensión entre ellos, pero al menos volvían a hablar, a tener una conversación medianamente normal mientras Zayn hablaba sobre estos últimos meses, o lo que veía conveniente compartir. Sus padres hicieron lo mismo, aunque todo seguía igual de vuelta a su ciudad natal. También preguntaron por Shazia, perola respuesta a eso fue corta cuando él dijo que eso sería mejor dejarlo para otra ocasión.  

No había hablado sobre su viaje a Pakistán a pesar de que ellos sabían sobre el tema. No quería volver a discutir por los problemas que tuvo con su familia paterna que continuaba viviendo ahí, o sobre la vida de Shazia ya que eso era cosa suya para contar y ella no se encontraba lo suficientemente cómoda con ellos como para compartir una parte tan importante en su vida. Aunque había sido culpa suya al mencionar lo que Zayn hizo por ella y despertar su curiosidad, respetaron su espacio y no volvieron a tocar el tema.

Ahora estaban ambos solos viendo cómo la madera que quedaba se consumía dado que era casi la madrugada y Trisha y Yaser se disculparon al estar cansados tras el largo viaje. Habían preparado la habitación de Shazia para ellos.

La idea del bar pirata debía de entusiasmarle, porque no paraba de mencionar todo tipo de ideas mientras que con un palo intentaba hacer una pequeña imagen esquemática sobre la tierra apretada bajo sus pies. Ella lo escuchaba con una sonrisa en el rostro, feliz de que ya no fuese el chico triste y apagado que había conocido en Pakistán. Las cosas cada vez iban mejor para él y eso la alegraba.

  — ¿Y qué te parece poner un ojo de buey en la entrada?— Sugirió.

— ¡Eso sería fantástico! Quizás incluso un acuario, de estos tanques enormes con todo tipo de peces. Hum, tengo que preguntar a ver si se pueden comprar morenas.

— Eh, Zayn. ¿No será excesivo?

— ¿Qué?— Rió— lo único que hago es trabajar. Puedo permitírmelo, quiero hacerlo.

  — Las morenas son horribles.

— Pues a mí me parecen fascinantes— ese tono de voz... Se giró y Zayn le guiñó un ojo.

— Oh dios, ¡no puedes hablar en serio!— Lo empujó con su hombro, pero el chico la atrapó con su brazo.

— ¿No puedo complementar a mi novia?

— No si pasamos de hablar de uno de los animales más feos que he visto en mi vida a tirarme fichas.

— Hum... ¿Medusas? Las medusas son preciosas, ¿las viste bajo esas luces fluorescentes tan guays? Porque deberías.