Magnolia - Amor natural

｢Extra XXIII｣ - El Principito gay (13)

◦✤✤✤◦

No tenía sentido hablar con un borracho, pero Gary no podía limitarse a contemplar impasible cómo Ludwig destruía la cuenta de bestia... Tras noquear a Ludwig de un golpe, Gary abrió la boca de Ludwig y metió de nuevo la cuenta de bestia en su interior.

El cuerpo de Ludwig olía a alcohol y tenía la cara completamente roja, pero seguía siendo muy guapo... Gary estaba aturdido y de repente se dio cuenta de que aquel hombre, que había sido su hermano pequeño, había crecido de verdad hacía mucho tiempo.  

Estos días, además de fabricar un mech, también había pensado en su futuro. 

Era rico y poderoso y, sin duda, podría vivir bien en el futuro, pero temía que no le resultara fácil encontrar una pareja que se ajustara a su corazón. 

Si le gustaran los sub-bestias, sin duda tendría muchas opciones, pero hacía tiempo que tenía claro que le gustaban los hombres bestia. 

En el Imperio Bestia había muchos hombres bestia que preferían estar con los de su propia especie, pero la mayoría sólo lo hacían porque no podían casarse con un sub-bestia. En todo el Imperio Bestia, sólo había unos pocos hombres bestia realmente sobresalientes que eligieran a hombres bestia como pareja. 

Así las cosas, ¿podría encontrar una pareja a su gusto en el futuro?  

Por supuesto, podría no buscar pareja. Con su situación actual, podía vivir su vida solo con libertad y facilidad. Era sólo que quería una familia después de ver a sus cariñosos padres desde que era un niño. 

La mirada de Gary se posó de nuevo en Ludwig. 

Tenía una buena impresión de Ludwig, y la determinación que Ludwig le acababa de mostrar despertó un poco sus sentimientos. Pero los sentimientos surgían rápida y repentinamente, lo que le hacía no estar tan seguro cada vez. 

Además, siempre había considerado a Ludwig como su hermano pequeño, lo que también lo hacía algo incapaz de superar el obstáculo en su corazón. 

¿Pero quizá podría intentarlo? 

Ludwig ya se había convertido en un gran hombre desde hacía mucho tiempo. No debía limitarse a recordar al niño pequeño que solía correr detrás de él e ignorar al hombre que tenía delante. Es más, Ludwig era de hecho el hombre más adecuado para él. 

Ludwig había nacido bien; se conocían sus raíces y sus antecedentes, y siempre gustó de él. Y él mismo tampoco carecía de sentimientos hacia ese hombre. 

Gary se decidió y en realidad estaba mucho más relajado. Viendo que era tarde y Ludwig seguía inconsciente, simplemente no se durmió y se limitó a sentarse a meditar y cultivar junto a Ludwig. 

Gary sólo abrió los ojos para mirar una vez que hubo un sonido de actividad al lado de Ludwig. 

―Yo... anoche... ―Ludwig abrió los ojos y se encontró tirado en el suelo oliendo a alcohol de pies a cabeza. Parecía muy incómodo y su cara enrojeció al instante. 

―Ayer estabas borracho.

―Estaba borracho, yo... ―Ludwig asintió. Estaba a punto de decir algo y de repente recordó lo que pasó anoche. 

Aunque estaba borracho anoche, lo que hizo fue de hecho lo que sinceramente quería hacer. Sin embargo, no esperaba que cuando mostró su determinación a Gary, éste lo rechazara... Al recordar esto, Ludwig de repente se sintió agraviado. 

―Vuelve y date una ducha. Límpiate. ―Dijo Gary. ―Además, no hagas estupideces como las de anoche. Incluso si realmente quieres darme la cuenta de bestia, tienes que esperar hasta la boda para hacerlo.