Magnolia - Amor natural

C074 - El león desafortunado

Un lobo blanco......

Jones se quedó mirando al lobo blanco, estupefacto. Había visto las formas bestiales de muchos hombres bestia, pero el lobo blanco que tenía ante sus ojos era absolutamente el que le resultaba más familiar.

Al ver la expresión tonta de Jones, Bruno hizo una mueca y luego tiró a Jones al suelo, azotando con la cola. Jajaja, este sub-bestia está aterrorizado ahora, ¿verdad? ¡Se lo merece! Este tipo realmente se atrevió a tirar de su melena, ¡así que tenía que darle un susto de muerte!

Pensando así, Bruno dio al cuerpo de Jones un azote de su cola.

La cola de Bruno en realidad no era dura, pero la piel de Jones estaba seca y agrietada por el sol, así que cuando recibió ese azote, la piel de esa zona se rompió inmediatamente, supurando sangre.

Pero ahora mismo, a Jones no podía importarle menos su herida. Sólo sabía mirar fijamente al lobo blanco.

¿Era Reynolds? ¿Reynolds, al que no había visto en treinta años? ¿Estaba soñando? No, esto no era un sueño... lo que significaba que realmente vio a Reynolds así como a tantas bestias caídas... ¡Este lugar era el Planeta de la Bestia Caída!

Jones acababa de pensar en este punto, y la lucha entre el lobo blanco y esa bestia caída en celo ya había terminado. El lobo blanco gruñó una vez más y se precipitó en su dirección.

Sin duda, Jones no tenía ni un poco de miedo esta vez. Al contrario, estaba dispuesto a recibir al lobo blanco que se precipitaba a su lado y luego frotaba su cabeza contra él. Como resultado......

El lobo blanco pasó junto a él y se abalanzó directamente sobre Bruno por un lado. Cayó sobre Bruno con dos patas delanteras y luego lo mordió.

Justo ahora, cuando Reynolds escuchó inicialmente la voz de un hombre que sonaba como la voz de Jones, simplemente lo consideró como su propia fantasía auditiva. Después de todo, el Imperio no permitiría que un sub-bestia viniera aquí. Pero después de echar un vistazo... No era una fantasía auditiva, ¡era Jones de verdad!

Aunque el cuerpo estaba rojo por las quemaduras del sol y también sucio, pero ese era Jones. Era imposible no reconocer a Jones.

Jones no llevaba ropa en la parte superior del cuerpo y sólo llevaba un par de pantalones. Estaba siendo sujetado por la boca de Bruno, y también dijo que tenía un compañero... Reynolds se quedó momentáneamente estupefacto. En ese momento, descubrió que una bestia caída en celo se precipitaba hacia Jones.

El cerebro no había conseguido reaccionar todavía, y Reynolds ya se había lanzado y había derribado a esa bestia caída. Después de la pelea, miró a Jones por el rabillo del ojo y entonces vio a Bruno azotando a Jones con su cola, lo que hizo que Jones sangrara.

¡Este maldito tipo!

Después de que Reynolds se deshiciera de la bestia caída, no dudó en correr hacia Bruno.

―¡Jefe! ¡¿Qué estás haciendo?! ―Bruno, que fue golpeado inexplicablemente por Reynolds, empezó a gritar y a forcejear violentamente.

Sin embargo, Reynolds no se preocupó por él e incluso le mordió directamente en la piel.

―¡Rawr! ―rugió Bruno, gritando de dolor sin cesar. ―¡Jefe, está loco! ¡¿Qué hace golpeándome?! 

Reynolds seguía sin hablar. Su mente estaba en confusión; simplemente no sabía qué decir y sólo pensaba en golpear a Bruno. Bruno, viendo la apariencia despiadada de Reynolds, se dio cuenta de que era inútil pedir perdón. Sólo podía luchar con Reynolds y entonces gritó a su compañero pidiendo ayuda: ―¡Jesse! ¡Sálvame!