{Shawn Mendes One Shots}^

After Party 🔥

-Solo una copa más, Shawn. Será la última.-Le quité de las manos a mi novio la bebida que disfrutaba antes de su interrupción.

-Ya has tenido suficiente. Tenemos que irnos.-Shawn me tomó por la cintura y me llevó casi arrastrando hacia el coche. Eran las tres de la madrugada, ¿Qué le sucede? Todavía es muy temprano.-Cuidado con la cabeza.

Dentro del auto que nos llevaría a casa me quité los zapatos altos y juguetee un poco con el borde de mi falda. Shawn ocupó el asiento de a lado y le indicó al chófer que nos llevara a casa haciendo que éste lo hiciera sin decir nada.

Teníamos un largo camino por delante y el alcohol en mi cuerpo comenzaba a hacerme efecto. Pose una de mis manos sobre el muslo de Shawn y comencé a subirla. Toqué aquél bulto bajo sus pantalones sin pena alguna haciendo que se sobresaltara un poco.

-No hagas...

-Solo quiero que celebremos tus triunfos. No se ganan tres premios todos los días.-No me prestó atención así que seguí con mi toqueteo caliente hasta hacerle caer.

-Quien juega con fuego...-
De alguna manera hizo que terminara sobre sus muslos, subió mi falta y rompió mis pantaletas en tres segundos. Sus manos se deslizaron dentro de mis piernas y en cuestión de nada tenía uno de sus largos dedos dentro de mí. Mordí mis labios y traté de ser lo más silenciosa posible, no puedo creer lo que estábamos haciendo en este momento.-¿Quieres que me detenga?

-Nunca.-Hundí mis manos en su alborotado cabello y le animé a seguir soltando un pequeño gemido casi inaudible. Siguió con sus deliciosos movimientos hasta llevarme al límite pero antes de poder llegar a mi liberación retiró sus manos de mi cuerpo. Hijo de puta.

-¡¿Qué diablos haces?!

-Evitando que el conductor se dé un festín con el espectáculo que estás dando.

-Pero...

-No sabes lo que te espera en casa, pequeñita.-Eso suena mejor.

Cuando llegamos a casa lo primero que hice fue correr hacia la habitación y quitarme las pocas prendas que aún tenía puestas. Le esperé completamente desnuda sobre la cama.

Cuando llegó a la habitación con un par de copas y una botella de vino, sus mirada brillo de deseo puro cuando me notó.

-¿No puedes esperar un poco, gatita?

Negué y le atraje hacia mí. Retiré su chaqueta y su cinturón, le permití amoldarse entre mis piernas y volver a comenzar con ese caliente toqueteo que detuvo cuando nos encontrábamos en el auto. Bajó sus besos por mi cuello y pechos hasta llegar a mi vientre y finalmente a mi zona íntima. Demonios, estaba en el puto paraíso.

-Shawn.-Apenas pude pronunciar su nombre. Su boca seguía haciendo un gran trabajo dando pequeño mordiscos a mi clítoris haciéndome gritar en más de una ocasión.

Comence a cerrar las piernas haciendo que Shawn volviese a ascender sobre mi cuerpo y volviese a besarme haciendo que probara mi propio sabor. Abrazó mi espalda y me hizo girar sobre él para así quedar a horcajadas sobre su bien formado cuerpo.

Mientras besaba su cuello retiré su cinturón y pantalones para después tirarlos al suelo sin importarme poco si tuviese algo en ellos. Masajee su miembro por encima de la tela de su ropa interior y la retiré sin pudor alguno. No veía la hora de tener esos veinte centímetros dentro de mí.

Con pequeños besos húmedos llegue a su pelvis y comencé a juguetear un poco con su miembro. Dejé pequeños besos en la punta haciendole soltar un par de groserías, comencé a introducirlo en mi boca tratando de no ahogarme. Le sentí correrse en mi boca y sin pensarlo del todo solo lo trague.

En nuestros tres años de relación nunca habíamos tenido un sexo tan caliente como este.

Me tomó del cabello y me quitó de su cuerpo, tomó mis caderas por detrás y las levantó alzando mi trasero.

-No, amor. Por ahí nunca lo hemos hecho.-Solo pude escuchar un risa limpia de sus labios. No quiero probar cosas nuevas si no estoy en todos mis sentidos.

-No quiero lastimarte, linda. Además, sabes bien lo que pienso de eso.

-Es una salida, no una entrada.-Sentí sus manos en mi cintura y esa delirante sensación de llenura. Comenzó con movimientos rápidos y bruscos dejando escapar varios gruñidos en el acto. Esto simplemente era increíble.

Llegué a mi límite casi de inmediato, él salió de mí y me tumbó sobre mi espalda. Se amoldó entre mis piernas y volvió a entrar en mí solamente que ahora con más delicadeza.

-Me encantas cuando te calientas pero disfruto más estar de esta manera.

No tengo idea de cuanto tiempo pasó pero en cuanto terminamos de amarnos pudimos notar ligeros rayos de sol entrar por las persianas. Él me atrajo a sus brazos y me refugió en ellos dandole pequeños caricias a mi cabello.

-Enserio te merecías esos premios. Estoy muy orgullosa de ti.-Estaba algo adormilada pero eso no evitó que siguiese hablando.-Tambien deberías ganar el premio al mejor novio del mundo.

-Te adoro.-Y fue así como dió por terminada una gran noche para ambos. Una noche que realmente espero volver a repetir.