Capítulo 168

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CAPÍTULO 168

*narra Ana*

Me dirijo a los columpios, necesito tomar el aire y relajarme. Pero allí me encuentro a Manuel, está tan concentrado leyendo un libro, por el color y algunos dibujos distingo que es de Harry Potter, pero no descifro cuál de todos; que no se da cuenta de que estoy en frente de él. De repente, se echa a reír.

Ana: ¿De qué te ríes? - me sabe mal interrumpir el mágico momento que comparten lector e historia, pero necesito que sepa que estoy aquí. Él levanta la vista, deja de reírse y vuelve a mirar el libro.

Manuel: Echo de menos mi lenteja. - al principio me extraña un poco su comentario, pero luego caigo en la cuenta de qué libro de Harry Potter es y de qué capítulo es esa frase. Le sigo el rollo, ya que me sé el diálogo de memoria.

Ana: ¿Qué le pasa? ¿Tiene afectado el cerebro? - Manuel sonríe.

Manuel: Lenteja, oreja... ¿No lo pillas, Fred?

Ana: Patético. ¡Patético! Con el amplio abanico de posibilidades que ofrece la palabra <<oreja>>, ¿tú vas y eliges <<lenteja>>? - empiezo a reír, no puedo evitarlo. Manuel baja del columpio, deja el libro en el suelo cuidadosamente y se acerca a mí.

Manuel: Con el amplio abanico de posibilidades que ofrece nuestra reciente situación, ¿yo voy y elijo comportarme como un insensible contigo? Patético. - me coge la mano.

Ana: Echo de menos mi bacalao. - lo abrazo con fuerza, él me acaricia la espalda, es reconfortante. Me separo lentamente de él y poso mi mano en sus hombros, mirándolo de forma penetrante - No vuelvas a permitir que Efrén haga que nos enfrentemos. Tenemos que enfrentarnos nosotros contra él, juntos.

Manuel: Lo siento. - me besa y por fin me siento feliz de poder disfrutar de los días que nos quedan juntos, siempre unidos y sin dejar que nada ni nadie rompa lo nuestro.

*narra Efrén*

Observo la romántica escena desde la distancia, intentando controlarme para no matar a Manolo. Esta táctica no ha funcionado, tendré que empezar a pensar en otra. Quizás la rubia esa, creo que se llama Clara, pueda ayudarme, parece estar dispuesta a hacer todo lo que yo le proponga...

Detrás del delantalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora