Capítulo 113

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CAPÍTULO 113

*narra Marco*

Estamos sentados en los sofás de la sala común. Uno en frente del otro. Rocío me cura las heridas y Claudia se las cura al mal nacido de Efrén.

Aquí siempre que hay un conflicto, por muy pequeño que sea, todo el mundo se entera en cero coma y está la sala común repleta de todos los ex aspirantes para enterarse qué ha ocurrido. También está Eva, con el ceño fruncido, dispuesta a no irse hasta que vea que entre Efrén y yo hay paz. Pues eso nunca ocurrirá, así que Eva, puedes esperar sentada. O mejor tumbada. Porque va para largo.

Gruño cuando Rocío toca mi herida de la ceja.

Marco: Escuece.

Rocío: Quejica.

Efrén: Quiero ir a ver a Ana.

Teresa: Ya te hemos dicho que no puedes.

Efrén: NECESITO MATAR A ESE CHICO... ¿CÓMO SE LLAMABA? ¿MANOLO?

Mendicuti: MANUEL, IDIOTA.

Eva: Bajad la voz, ¡no quiero más gritos!

Efrén: NO TE ATREVAS A INSULTARME - hace ademán de levantarse del sofá, pero Claudia lo frena.

Marta: ¿Qué se siente al ser un cornudo?

Efrén: ¿Sois todos igual de desagradables? Mira niña, que seas tan rubia y tan guapa no impide que tú también llegues a recibir algún golpe. - levanta el dedo, amenazadoramente.

Marta: ¿Desagradable? Que te quede claro que yo no soy una parada en el camino, yo soy un destino. En cambio, ¿sabes cuál es tu destino? Ser un cornudo. Ah, y atrévete a tocarme, cielo, que si no te controlas voy a atacarte como Naomi Campbell.

*narra Daniel*

Lucía me empuja para que por fin le diga algo a ella, tengo que aprovechar ahora que estamos juntos. Y justo cuando estoy a punto de hacerlo, se lía la de Dios: Efrén se levanta y va derecho a pegarle un puñetazo a Marta, cuando Mendicuti y Marco se ponen en medio. Empiezan los golpes y los gritos. Todos contra Efrén. Una lucha muy justa no es, pero se lo merece. 

Detrás del delantalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora