Capítulo 8

306 17 1
                                    


*narra Martina*

Mauro: Hemos quedado segundos. ¿Un paseo para celebrarlo?

Martina: Sí!! Un momento...

Me acerco a Rocío y le pregunto si le importa.

Rocío: No, intenta descubrir quién le gusta... Y háblale de mí.

Me guiña un ojo.

Rocío: Por cierto, has visto cómo se arrimaba Claudia a Víctor? Reacciona antes de que te lo quiten!

Mi mentira está llegando demasiado lejos, pero ahora no estoy preparada para confesar.

Martina: No te preocupes. Hacemos una cosa. Mientras esté con Mauro, ve a hablar con Víctor y sácale información.

Rocío: Perfecto! Sabes que soy la mejor celestina del mundo!

*narra Mauro*

Los jardines que hay alrededor de la residencia son enormes y muy bonitos. Martina camina a mi lado. Hago amago de darle la mano, pero no se da cuenta. Nos sentamos en un banco delante de una fuente que tiene el logo de Masterchef. Friki a más no poder.

Mauro: Cómo te sientes?

Martina: A qué te refieres?

Mauro: En general. Con el programa, las pruebas, los jueces, los compañeros... Que tú y yo estemos aquí, solos, a la luz de la luna.

Martina: Es todo un sueño. Estoy aprendiendo tanto y pasándomelo tan bien. También es un sueño estar aquí, contigo.

Mauro: De verdad?

Martina: Mauro... Lo siento.

Mauro: Qué pasa?

Martina: Rocío está por ti hasta las trancas. No puedo hacerle esto.

Mauro: Solo necesito saber una cosa. Te gusto tanto como me gustas tú a mí?

Martina asiente sonrojada, con ese gesto me vale para lanzarme y besarla. Conseguir ese ansiado beso y que no me rechace me hace sentir la persona más feliz del mundo.

Mauro: No tienes que anteponer la felicidad de los otros a la tuya.

Martina: Pero tampoco quiero dañar a gente a la que quiero.

Mauro: Los sentimientos no se pueden controlar ni reprimir. Al final acabas estallando.

Martina: Mauro, me gustas un montón. Por favor, no le digas nada a nadie y menos a Rocío.

Ahora es ella la que me besa. Y así pasamos una hora, olvidándonos de los demás, de los problemas, solo pensando en lo que sentimos el uno por el otro.

Detrás del delantalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora