Capítulo 1: La verdad sobre las mentiras

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Para lo que se suponía que era un área pintoresca, Little Whinging estaba lleno de gente que había hecho de la mentira su carrera;  las mentiras eran la sangre vital de la comunidad.  Harry conocía a los mentirosos y las mentiras que arrojaban.  Desde muy pequeño empezó a darse cuenta de cuándo la gente estaba mintiendo (porque todo el mundo mentía, no se trataba de si, sino de cuándo).  Sacudidas en sus mejillas, ojos muy abiertos, etc. No pasó mucho tiempo antes de que se enterara de que los mentirosos son los que dan contacto visual.  Fue solo cuando fuera mayor que se daría cuenta de que probablemente se mostraba espeluznante con la forma en que miraba tanto a la gente.  Centrándose demasiado en sus caras y su patrón de habla de lo que realmente se estaba diciendo.

Pero de niño estaba agradecido por poder localizar falsedades y luego llegó a discernir otras emociones.  Ira, desprecio y repugnancia;  todas ellas emociones a las que estuvo expuesto a lo largo de su vida.  Una mano temblorosa significaba que debía evitar a su tío Vernon porque estaba enojado.  Sabía que debía mantenerse alejado de su tía cuando las comisuras de sus labios se apretaban y solo se levantaba un lado;  era un indicador de su desprecio.

Sin embargo ... cuando tenía nueve años, llegó a una visión del mundo bastante cínica.  Uno puede tener la verdad o la felicidad, nunca ambas.  Su aceptación de esto fue bastante rápida, completamente comprensible considerando que no había nada por lo que estar feliz cuando estaba creciendo.

 ¡Harry Potter y Katekyo Hitman Reborn! 4 {finalizado}Where stories live. Discover now